El profesor y yo

Capitulo #8: Un simple café

12 de noviembre:

Han pasado días desde lo que sucedió. Mi recuperación va en mejoría cada vez más.

Bradley no se movió de aquel hospital hasta el día que me dieron de alta. Mamá ha estado muy al pendiente de mí y papá también.

Aunque ahora mismo no se encuentran en casa por trabajo, yo en cambio; tengo vacaciones.

Mi teléfono suena con un mensaje de WhatsApp. Busco la aplicación y entro.

Zorra mayor: Perra ataca bolas, ¿como te sientes hoy? 🌝
Bitch: Te extrañamos mucho Emily.💔
Perra ataca bolas: Son unos amores. 💕
Perra ataca bolas: ¿Quien carajos me puso ese nombre? 😑😒
Zorra mayor: ... yo... creo... que... fue... April 🌝
Bitch: Claro que no fui yo, mira quien te escribió el mismo nombre arriba ☝☝
Zorra mayor: 🌝🌝🌝🌝🌝🌝🌝

Bloqueo mi teléfono y lo pongo a un lado. Me impulso para levantarme y éste vuelve a sonar.

Lo tomo en mi mano y me indica otro mensaje más en WhatsApp. Abro nuevamente porque sé que son las chicas y me sorprendo cuando veo una conversación nueva.

Desconocido: ¿Podemos ir a tomarnos un café? No acepto un no.

Una gran sonrisa se forma en mi rostro.

En el hospital Bradley y yo intercambiamos números pero no nos habíamos hablado hasta ahora.

Yo: ¿Un simple café?

Bradley: Pueden haber muchas cosas más que un simple café...

Una propuesta indecente Emily Johnson.

Sigo leyendo el mensaje y ya es como la tercera vez que lo hago y se me forma una gran sonrisa en el rostro. Al instante mi teléfono vuelve a sonar.

Bradley: pláticas, chistes, risas... eso es más que un simple café. Guarda tu perversión para más tarde.

Emily Johnson, por la vergüenza que has pasado solo debes decir que si.

La consciencia y yo al fin estamos a mano.

Yo: Vayamos por más de un simple café 😏
Yo: ¿A que hora y donde?

Me quedo mirando el teléfono esperando que salga un "escribiendo" o tan sólo un en linea pero no, no sale nada.

Bloqueo mi teléfono y lo pongo a mi lado.

Me quedo mirando mi techo agrietado.

¿Y si pasa un terremoto? Este techo me cae encima.

Ya han pasado aproximadamente diez minutos del último mensaje y nada.

Abro WhatsApp otra vez y nada...

Alguien comienza a tocar la puerta lo cual es extraño porque mamá y papá tienen llave. April o Amber me llamarían antes de venir o simplemente me gritarian desde el otro lado de la puerta.

Me levanto de mi "espacioso" apartamento y llego hasta la puerta.

Su rostro dulce con su sonrisa extremadamente perfecta hacen que tenga que poner mi agarre a la puerta más fuerte.

Creo que ha mojado sus bragas.

Consciencia, no es el momento para chistes. Gracias.

-Hoo... ho...- carraspeo mi garganta. -hola.- digo con mi respiración completamente agitada y el corazón dando cantazos dentro de mi. -¿Que haces aqui? Te he escrito a WhatsApp.-