Capitulo #20: Levántame imbécil

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El timbre suena.

-Bien, es hora de que se vayan, mañana seguimos con más.-
Todos se levantan desesperados de sus sillas para salir. Yo comienzo a guardar mis cosas para salir igual de desesperada. A lo largo veo a la rubia halar a Bradley para hablarle.

El me mira por un momento y mi vista cambia a otro lugar, debo salir de aquí.  Una mano se posa en mi codo haciendo que gire para ver quien es.

-Em, debemos hablar.- era él, sus ojos con ese brillo y sus labios se ven igual de deliciosos que siempre. Su cara preocupada hace que mi corazón se caiga rendido pero no puedo.

-Habla con ella, yo vengo después.-

¿Estas consciente de lo que dijiste? Bueno, no entiendo... yo soy tu consciencia y yo estoy consciente no sé porque tu no. Okay, me confundes, voy a dejar de hablar.

-Por favor Emily, porfavor quédate.-

-Está bien pero sólo me quedaré cinco minutos porque Luisa me espera.- el asiente con su cabeza. La rubia sale con su grupo de amigas y yo sigo a Bradley hasta el escritorio.

-Saca algo de papeles para que piensen que vamos a hablar de algo de los créditos. -  susurra, le hago caso porque sé que si no nos meteriamos en graves problemas. Saco el papel y el comienza a señalar las clases y a verse concentrado.

-Bien, acompañame.- casi grita, se levanta de su silla y salimos por la puerta. Camina por el largo pasillo hasta llegar a un pasillo solitario.  No hay nadie, que se hizo.

-Por aqui.- escucho a alguien susurrando y busco la voz. -Hey.- miro hacia mi lado y una puerta esta un poco abierta.

La abre y yo entro, la única luz que entra es la del sol. Es un despacho.

-¿Como sabes de esto?-

-La mitad de ésta Universidad ha sido de mi padre por largos años. Mamá venia mucho aquí y cuando no quería estar aburrido mientras ella atendía las cuentas de todo esto, venía aquí. Ha estado abandonado por mucho tiempo pero siempre acomodado para mí.-

Okay. Un niño mimado.

-Debemos hablar.- digo mirando al suelo. -debo cambiarme de clase, no puedo estar ahí contigo.-

-No es lo que quiero, quiero que estes conmigo.-

-¿Para qué? ¿Para ver como le coqueteas a misis Dana?-

-¿Estas celosa?- dice acercándose a mí.  -Porque si es asi, entonces hay un problema Señorita...- sigue acercándose por lo que. Yo sigo dando pasos hacia atrás -¿Como es que una estudiante se pone celosa de otra? Acaso... ¿te gusta el profesor?- mi respiración esta agitada de tenerlo cada vez mas cerca. Muerde su labio y yo muerdo el mío pero no puedo hacerlo. Sigo caminando hacia atrás y de la nada siento que algo choca con mis pies.

En un momento a otro siento como mis nalgas chocan el suelo haciendome gritar.

Me caí y me dolió. 

Bradley me mira asustado y de la nada comienza a reir.

Se sienta em el suelo agarrándose el estómago de tanta risa.

-Levántame imbécil. - su risa cesa un poco y cuando va a estirar su mano para darmela, comienza a reir otra vez.

Pongo las manos en el suelo, y con mucho dolor en mi culo me levanto. Me giro, y voy dispuesta a irme.

-Hey hey, perdón. - suelta una risa. -no te vayas ¿estás bien?.-

-Si profesor estoy bien, debo irme. Adiós. -

Siento sus pasos rápidos detrás de los míos y cuando voy a coger la manija de la puerta en mis manos, su cuerpo se interpone en mi camino. 

-No te vas.- pone sus manos en mi cintura y me hala hacia el con fuerza.

-Sueltame debo irme.- en sus manos, soy mantequilla. 

-No te vas.- tiene una sonrisa formada. Comienzo a hacer fuerza pero la de el, es más que la mia.

En el intento, acuna mi rostro en sus manos y se acerca a mi besando mis labios.

Hago resistencia y lo empujo. 

-Salte y dejame ir o gritaré.-

-¿Estas segura?- sumerge sus menos dentro de mi blusa y toca mi abdomen suavemente. -no creo que eso sea lo que quieres hacer.- se acerca y vuelve a besarme.

Me besa como tanto anhelaba, como me hacia falta. Le correspondo el beso que cada vez se hace mas intenso. Nuestras respiraciones aumentan y llega a ese punto en donde lamentablemente debemos separarnos.

-Emily, yo no quiero que te vuelvas a ir.-

-Y yo no quiero volver a irme. Solo prométeme que cuando lo intente, me detendrás.-

-Lo prometo.- vuelve y posa sus labios sobre los mios dejando un corto beso en ellos.

-Creo que debo ir a clases.-

-Si ve con cuidado. ¿Que tal si nos vemos mañana en la noche?-

-Me parece perfecto.- le doy una sonrisa. -Mañana en la noche nos veremos.-

-Que lamentable que no será hoy.-

-Tengo que trabajar.- pone cara de perrito maltratado. -Quita esa cara, ya mañana nos veremos. Ah claro, y en el resto del día también.-

-Ve.- deja otro beso en mis labios y me da una preciosa sonrisa. -te quiero em.-

Eso si que no me lo esperaba.

Le sonrío y tomo la manija de la puerta.

-Y yo a ti profesor Cooper.- el rie y yo salgo.

Me recuesto de la pared y suspiro. Me siento como una niña cuando ve películas Disney y sueña con su príncipe azul.

Todo este tiempo Bradley siempre fue un caballero, yo fui la culpable de todo.

Tomo mi celular y justo cuando iba a escribirles a mis mejores amigas, recuerdo que están enojadas. Asi que, sólo lo tomo, veo mi aspecto y voy caminando al salon de la señorita McCartney.  Abro la puerta y ella esta hablando.

-Emily, pasa.- me dice con mucho entusiasmo.

*No te vayas sin darme un voto, te regalo un beso 😘*

El profesor y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora