Capitulo 42: Nunca me amaste

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Un mes después:

-Está bien mamá, yo voy a llevarle comida a Ryan y luego voy a tu casa ¿esta bien?-

-Claro hija.-

-Te amo mamá.-

-y yo a ti hija.- bajo las escaleras apresurada. Ryan no sabe que yo iré.

Tomo las llaves de mi auto y me dirijo a mi antigua casa. Debo cobrar la renta y oagar la renta de mi tienda, más adicional entregar un traje de damas.

Me detengo frente a la casa y comienzo a tocar el timbre de la casa.

La puerta se abre dejando a la vista a la Señora Rachel.

-Rachel, buenas tardes. Vengo a cobrar el pago del mes.-

-¡Claro hija! Ven, pasa.- entro a la casa y realmente esta mucho más bonita que cuando yo la tenia. Ella se ha dedicado a cuidar y decorar cada detalle de la casa haciendo que quiera volver a vivir aquí. -Ten, esto es tuyo.-

-Gracias.- me giro y salgo de alli directo para pagar mis otras cuentas pendientes.

"Closer" comienza a sonar en la radio y recuerdo cosas pasadas que no debería.

*Flashback*
-Todo tiene una explicación.- es su voz detrás de mí.

-Shh.- dice la mujer encargada de la biblioteca. Estamos en casi los últimos estanes y aún asi ella nos escuchó.

-No las necesito Bradley o mejor dicho Profesor Cooper.- digo en un susurro mientras sigo caminando y buscando libros. Su mano en mi cintura hace que camine hacia atrás y cuando tiene su cuerpo pegado al mío me pega al están donde recuesta su mano y se posa frente a mi.

-Salgase Profesor Cooper, puede meterse en problemas.- le guiño un ojo y trato de seguir caminando pero su mano en mi cintura me lo impide.

Vuelvo al lugar donde estaba.

-Intenté decirtelo dos veces. La segunda no me escuchaste porque estabas pensando no se qué de la mesera.-

-¿Ya terminaste?-

-No. Escucha, si soy profesor. También sé que es poco ético que me encante cada parte de ti. Tu sonrisa, tus ojos, tu cuerpo y todo de ti. Si, me encantas Emily Johnson yo sólo quiero estar contigo y si tengo que renunciar a esto por ti lo hago, no me importa.-

Mueve su cabeza a un lado y se acerca a mis labios.

Demasiado cerca.

Me quedo viéndolo y una sonrisa aparece en mi rostro cuando lo veo mordiendo su labio inferior.

Empujo su brazo a un lado y sigo caminando.

-Mire profesor, está bien. Pero tenemos que llevar esto con calma y mucho cuidado, nos puede costar muchas cosas a ambos.- le digo de espalda a él.

-Como quieras, tus palabras son órdenes para mí pero deja de decirme profesor.-

-¿Algun problema profesor?-

-Que me dejes de..- rasca su nuca y respira hondo. -¡Arg! Olvidalo.-

-Okay Profesor Cooper.- hace una mueca con su rostro. -debo irme. Gracias por la platica.- muevo mis caderas lo más dramático que puedo y camino hasta la puerta de salida.
*Fin del flashback*

Respiro hondo al pensar en esto. Han pasado aproximadamente tres años desde que Bradley y yo ya no estamos juntos y realmente por momentos lo recuerdo. Y lo recuerdo como algo bonito porque pesaron más buenos recuerdos que malos.

Sacudo mi cabeza para dejar de pensar en eso y respiro hondo al ver que de alguna forma ya me encuentro frente a la empresa.

Me bajo del auto y veo la recepcion de la empresa a una chica de cabellos negros muy bonita. Ella siempre me sonríe y le avisa a Ryan que estoy aquí pero hoy no quiero que lo haga, quiero sorprenderlo.

-Hola Leila. Quédese tranquila, solo quiero sorprender a Ryan ¿esta bien?-

-Ah bueno Señora Smith, siendo asi todo tranquilo. Vaya.- se sonrie y yo sigo mi rumbo. Tomo el ascensor y me sumerjo en el undiendo el piso numero cinco donde se encuentra la sala ejecutiva donde está él.

Las puertas del ascensor se abren y me dejan notar que Mara no esta en su lugar.

Como ella no está, prosigo mi rumbo y abro la puerta de su oficina.

-¡Hola, buenos dias!- cuando me fijo bien que es lo que está pasando la comida que tenia en mis manos cae al suelo.

Él comienza a abrochar su pantalón y a ponerse su camisa mientras Mara se acomoda su falda. Yo solo me quedo ahí mirándolos a los dos en un shock inmenso.

-Señora Smith, esto no es lo que cree. Porfavor, esto no es lo que cree.-

-¡¿Y que demonios es?! Maldita sea.- comienzo a gritar. -¿Me crees estúpida? ¿Crees que no sé lo que es el sexo acaso? Sal de aquí. - ella baja el rostro y se queda mirando a Ryan. -¡Que salgas maldita sea!-

-Sal porfavor.- dice Ryan extremadamente calmado lo que hace que toda mi sangre hierva. Ella se gira y camina para la salida en la que estoy. Me quedo allí parada haciendo que ella tenga que abrir la otra puerta para salir. Sin cerrar ninguna, me acerco a Ryan y plasmo una cachetada en su rostro. -¿Que demnios hiciste? Confié en ti, rayos.-

-Eso no es lo que creias. Y necesito que bajes la voz.-

-¡No lo hare! A ver... Explicame que era.-

-Ella fue a caerse y yo... yo la estaba ayudando.- limpio con furia las lágrimas que estaban en mi rostro.

-¡Deja de mentirme que no soy ingenua! Por lo menos te hubieses inventado una excusa mejor que esa. ¡Quiero el divorcio!-

-No te vayas Emily.-

-No seas imbécil y deja ek maldito drama.-

-Yo te amo y hice esto porque tu nunca me amaste a mi.-

-¡¿Que yo nunca te ame?! Me costó todo volver a confiar en ti y tu me pagas asi. Yo te ame, lamentablemente llegue a amarte y mirate imbécil. Terminaste recolvandote con tu secretaria.- me giro para irme.

-¡No te vayas Emily, yo te amo!- se tira al suelo y comienza a llorar

-Mañana hablas con tu abogado.-

-¡Emily no!- tiro la puerta detras mío y limpio mis lágrimas. Miro a Mara que tiene sus ojos llenos de lágrimas y cuando ve mi rostro baja el de ella.

-Solamente te voy a dar un consejo: si lo hizo conmigo, ¿que esperas que suceda contigo cariño?- le guiño un ojo y me giro para entrar en el ascensor con mi alma destrozada. Este comienza a bajar dejandome en la recepción. Mis lágrimas aumentan y salgo corriendo a la salir.

-¡Emily! No te vayas.- miro hacia atrás y Ryan esta corriendo detrás mío por lo que decido correr mas fuerte. Cuando llego a mi vehiculo me sumerjo en el, pongo seguro a mis puertas y lo pongo en marcha lo mas rapido que puedo y mientras mas rápido voy, más rapido me desplomo en llanto.

El profesor y yoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora