Cameron
Me desperté bastante temprano, me bañé y mierda, puedo admitir que me puse guapo para ir con Abril.
Me miré en el espejo como ochenta veces, no estoy seguro de si me veía bien o no.
Después de cambiarme de ropa como mujer en una cita, alto, ¿esto era una cita?, mierda, control Cameron.
Toqué en su casa, abrió con esa sonrisa radiante con la que siempre me recibía. Traía unos leggins o esas mierdas que usan las chicas con una blusa kawai (como ella las llamaba).
Mi mente fantaseó un poco ante la idea de que haya llamado a Ali para hacer esas mierdas típicas de las chicas de preguntarse qué debían ponerse para salir con alguien. Pero, ¿a quien engañas, Cameron?, claro que Abril hace eso, pero no para ti, debe llamar a Ali como loca para que le ayude a vestirse cuando sale con Perci, tú no eres Perci. Tú no eres su novio, solamente eres su amigo. Ninguno de tus estúpidos sueños de quererla, cuidarla, poder besarla, hacerla tuya y amarla como se debe, no eran más que eso, sueños que jamás pasarían, ahora que lo pienso, soy patético, amando a alguien que ama incondicionalmente a otro, patético, Cameron.
Manejé hasta el gotcha, al menos sí hoy era el último día que estaría con ella sin su novio de por medio lo aprovecharía al máximo, para después volver a ser el patético amigo de Abril.
Bajé de la camioneta para después abrirle y que pudiera bajar, entramos y después de una gran terquedad de Abril, me dejó pagar las entradas.
—Espero seas buena en esto cariño—Reí.
—Eso creo.
Me acerque a ella y le puse mechones de cabello detrás de la oreja, para después poder ponerle el casco con sumo cuidado.
—Que guapa.
—Tampoco estás nada mal. —Dijo tomando mi casco y acercándose a mí. Al igual que yo a ella, me lo puso.
En cuanto entramos a la sección de juego cada uno corrió por su lado, la sección era un tipo bosque con pedazos de lo que serían "ruinas" y casas del árbol.
Subí a una de las casas del árbol donde la ubiqué rápidamente camuflada detrás de unos árboles, disparé, ¡Casi le doy!, pero ese pequeño duendecillo rojo sé movía rápido y ahora mi posición era la que había quedado al descubierto y mierda, ella me tenía bien ubicado porque comenzó a dispararme ¡Y me dio!
Baje de la casa del árbol y corrí tras ella, literalmente nos correteamos jugueteando sin dejar de dispararle a ella y ella a mí. Me disparó de nuevo y me dio, mierda.
—¡Oye!
—Ya ríndete —rió de forma traviesa.
—No, hasta que me quede sin bolitas de pintura —me escondí tras un árbol, aunque mi voz me delataba, al igual que ella.
—Entonces dispara mas y habla menos.
Salió corriendo en zig zag, yo aproveche y le disparé varias veces, le di una vez, ella cambio de dirección repentinamente y se ocultó.
—Te odio —reí.
—Me amas.
Sí que lo hago.
La busqué detrás de cada árbol pero no lograba encontrarla, vaya ésta chica es de ensueño, justo perfecta para mí.
Me subí a una de las "ruinas" para ver si podía encontrarla más rápido, pero vaya sorpresa ella me localizó a mi antes, disparó varias veces, dándome perfectos tiros limpios, comencé a disparar a lo idiota hacia los árboles hasta que no salió ni una bala más, mierda, me había quedado sin balas.
—¡Gané! —gritó desde algún lado.
—¿Quién dice?
—Yo digo, dispárame sí no es cierto—casi pude ver su sonrisa orgullosa.
La tenía localizada así que le tiré una roca que por poco esquivó.
—¡Salvaje! —me gritó con un tono risueño.
—Así me amas.
—Umm —lo pensó mientras bajaba del árbol y yo hacía lo mismo que ella—No mucho.
—Acabas de admitir que me amas, poco, pero lo haces —me quité el casco y ella hizo lo mismo soltando su hermoso cabello.
—Entiendes lo que quieres entender.
—Interpreto todo lo que dices.
—Interpretas demasiado.
—Eso siempre es bueno —le sonreí de lado.
—No sabría decirlo.
Salimos del área de juego aún con una sonrisa boba.
—Ahora que somos las personas más asquerosas del mundo, ¿qué haremos?
Cariño, asquerosa o no, te ves malditamente sexy. Me quite el cabello de la cara.
—Ummm... —Tomé una botella de agua, hay otra forma de que se vea malditamente sexy, me acerqué a ella y le tiré la botella de agua encima.
—Algo como eso, cariño. Lindo bra—me mordí el labio y la miré.
Ella se cruzó rápidamente de brazos, pero al otro instante tomó otra botella de agua y me mojo.
—¡Oye! —Reí.
—Me mojaste primero.
—No me mojes —me miré, vaya, no usar bóxer era un problema. Sentí su mirada sobre mí, mierda, si me seguía mirando así, se me pondría duro.
—¿Por qué no me dejas ver tú bra si tu me estás viendo todo?
Dejo de verme rápidamente.
—No te estoy viendo nada.
—Lo hacías.
Me jale un poco el pantalón para que no se marcara lo que Abril me provocaba y santa mierda, ella me miraba. Y no puede ser, me siguió el juego de alguna forma, se descruzó de brazos y pude ver sus bellos pechos cubiertos por su blusa y su bello bra de...
—Dime que no son arco iris.
—Si no diferencias, no es mi culpa. ¿Nos vamos?
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Little time to LOVE
Teen FictionAbril Collins es una brillante y romántica estudiante del primer año de medicina, tiene la vida perfecta, un gran futuro por delante, amigos fieles, y un primer amor perfecto o es al menos lo que cree hasta que conoce a Cameron Masterson y empieza a...