- ¿Papi? – Dijo Victoria entrando a la cocina -Pensé que ya te habías ido.
- Mi pequeña- Simon caminó unos cuantos pasos hacia ella y la envolvió en sus brazos, ella correspondió el abrazo mientras me veía con cara de asombro.
- ¿Por qué estás tan despeinada mamá? - Me pregunto.
- Por el clima- Respondí sarcástica - ¿Qué haces aquí, acaso no te dijo tu papá que te quedaras en tu habitación? – La regañe.
- ¡Adele! – Me reprendió Simon.
- ¡Tú te callas! – Lo señalé - ¡Es mi casa y es mi hija, ya te lo dije! -Volteé a ver a Victoria nuevamente - ¿Qué quieres? – Le pregunte fastidiada.
- Oh claro, mami me das permiso para salir esta noch...
- No.
- ¿Qué? ¿Por qué no? – Preguntó confundida - ¡Ni siquiera me dejaste hablar mamá!
- No me interesa lo que digas ¡No vas y punto! - Conteste simplemente.
- ¡Pero mamá! – Exclamó casi gritando. Sentí como la sangre empezó a hervir en todo mi cuerpo, detesto que se oponga a mis decisiones y más aún que me levante la voz; apreté los puños y camine rápidamente hasta quedar frente a ella, sin decir una palabra y sin darle tiempo de reaccionar levante mi mano y le di una bofetada tan fuerte que su mejilla inmediatamente se puso roja y sus ojos llenos de lágrimas.
- ¡Que mierdas te sucede! – Gritó Simon enojado poniéndose en medio - ¿Estás loca o qué?
- ¿Y tú que mierdas haces aquí todavía? ¡Lárgate! – Grite histérica.
- ¡Me largó, pero con mi hija, no voy a permitir que la maltrates de nuevo! ¡Victoria trae tus cosas, nos vamos ya de aquí! - Le ordenó, pero ella no se movió de su lugar.
- ¡Tu aquí no le das ordenes, imbécil! ¡Victoria se queda conmigo, la custodia la tengo yo!
- ¡Me importa un carajo que tu tengas la custodia, de que te sirve tenerla si eres una mala madre! - Gritó hecho una furia.
- Papá vámonos- Dijo Victoria entre sollozos halándolo del brazo.
- Ya mi amor, tranquila – Dijo Simon volteándola a ver - ¡Y tú! – Me señalo – ¡Le vuelves a poner una mano encima a mi hija y te juro que no respondo Adele!
- No me amenaces idiota, lárgate de una vez por todas y llévate a ¡Tu hija!, señor perfecto – Dije y lo fulminé con la mirada.
- Voy por la camioneta hija, ve por tus cosas, te espero en la entrada – Le dio un beso en la frente y salió de la cocina.
-Mami- Dijo Victoria y trato de acercarse. La tomé del cabello y se lo apreté fuerte.
- ¡En la vida me vuelves a gritar! Ahora vete con tu papá, pero no creas que te vas a vivir con él, te quiero el fin de semana en casa ¿Entendido? -Hablé muy cerca de su rostro, ella solo asintió moviendo su cabeza y cerrando sus ojos, las lágrimas escurrían por sus mejillas provocando que mis niveles de enojo aumentaran -Fuera de aquí- Solté su cabello y ella salió casi corriendo de la cocina.
Tome dos aspirinas junto con un vaso de agua y me fui a mi habitación, me recosté y me puse a ver televisión hasta que me quede dormida.
Narra Simon
¡Maldita sea! ¡Maldita sea! ¡Maldita sea!, maldigo una y otra vez para mis adentros mientras conduzco hasta mi casa; no logro entender que fue lo que pasó con Adele, ¿A dónde fue esa mujer amorosa, cariñosa, alegre, de la cual me enamore?, se ha convertido en alguien que desconozco, soy consciente de que maneja mucho estrés por su carrera, pero eso no le da el derecho de tratar a Victoria así; una cosa es que la regañe y otra muy distinta que la golpee.
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Best For Last
Fanfiction¿Qué se supone que se debe hacer cuando tu vida y familia perfecta dejan de serlo? ¿Acaso alguien puede entender el dolor que conlleva crecer y que la vida cambie cuando creíste erróneamente que todo estaba en orden?