Opuestos. (COMPLETA Y CORREGIDA)

Él No.

- Quieres explicarme ¿cómo rayos puedo escuchar a Tyler, en su forma humana, en mi mente? - Lo miré confundida.

- ¿Son tontos o se hacen? - Nos miró con seriedad y su ceño fruncido, dejando en blanco sus ojos. - Eso significa que, ustedes, son realmente sus Opuestos. Tienen una conexión tan fuerte entre ustedes, que pueden comunicarse el uno al otro por telepatía. Tú también puedes hacerlo, Gabriella. - Fruncí mi ceño con confusión, dejando un poco abierta mi boca.

- ¿Es en serio? - Sí, pendeja. ¿No recuerdas el día de la casi pelea? Sí, pero ese día Tyler estaba en su forma animal. Ah, verdad.

Mi padre asintió, regalándonos una pequeña sonrisa.

- Te dije que tienes sangre de lobo corriendo a través de tus venas pero que, tu sangre, es perfecta.

- Perfecta. - Escuché a Tyler decir en un susurro; parecía perdido en sus propios pensamientos. Quise preguntar pero justo en ese momento, mi madre entró a la habitación.

- Aquí estoy, amor. ¿Qué sucede? - Se acercó a mi padre, revisando sus vendajes; él sonrió.

- Sólo quería mostrarle a Gabi cómo funciona lo de el enlace mental. - Mi madre sonrió, asintiendo en silencio mientras, yo, los miraba incrédula.

- ¿Mamá también puede comunicarse contigo? - Mi padre asintió.

- Pero sólo yo puedo hacerlo con ella. Si alguien más intentase hablar a su mente o que ella responda, no funcionaría. Tiene sangre de lobo en sus venas también pero no funciona igual que tú. Tú llevas más genes míos que de tu madre, hablando en el sentido de lobos.

- ¿A qué se refiere con Sangre Perfecta? - Preguntó Tyler, aunque no sabía si había curiosidad en su voz, o algo más.

- Yo era el que debía quedarse como Alpha Supremo, pero renuncié a ese cargo hace mucho. La sangre de Gabi es perfecta porque por ella corre sangre de familia real, de reyes, de líderes, de Alphas, o como prefieras decirle. Su sangre es tan perfecta que, si ella lo desea, podría comunicarse con otros, al igual que lo hacemos tú y yo; incluso, cruzar los límites, si así lo desea. Pero, - me miró esta vez - si su sangre cae en las manos incorrectas, si la atrapan y derraman su sangre, bebiendo de ella, habrá una guerra, que será casi imposible de detener. - Sentí las manos de Tyler apretar mis brazos suavemente.

- No dejaré que nadie la toque. - En su voz iba incluida la promesa.

- Sé que la cuidarás, Tyler, pero ahora que él regresó, y que la está buscando, debemos ser más precavidos.

No me gustaba cómo sonaba eso, así que decidí cambiar un poco el tema, no queriendo sentirme peor.

- Mamá, - ella me miró con ternura, esperando que dijera algo - ¿por qué llevas sangre de lobo corriendo por tus venas? - Sonrió un poco, uniendo su mano con la de mi padre.

- Mi padre, o sea tu abuelo, era un Alpha. Pertenecía a uno de los clanes principales, lejos de aquí. Conoció a tu abuela un día de "verano", enamorándose perdidamente de ella, pasando por alto las normas de su manada. Ambos tuvieron una relación complicada, pero se casaron unos años después y me tuvieron a mí. Supe unos años más tarde lo que era mi padre, pero mi madre no tenía nada mágico corriendo a través de sus venas; así que, llevo sangre de lobo pero no es la gran cosa. Es algo mínimo. - Asentí, comprendiendo con más claridad.

- Por eso supiste que ella era tu Opuesto. - Miré a mi padre, viéndolo asentir. - Pero, ¿no te enamoraste antes de conocer a mamá? - Mi padre sonrió, dejándome ver cómo daba un leve apretón a su mano.