Inalcanzable Liz

Liz y Malena

-No deberíamos estar haciendo esto, Dev nos dijo y nos repitió una y otra vez que no podías verla hasta que hayamos concluido con el plan.

-Ya cállate Wyatt y ayúdame a subir, maldita sea.

Malena y Wyatt ya estaban en el jardín de la casa de Liz, habían saltado la cerca y ahora Wyatt tenía que ayudar a Malena a subir hasta una ventana que tenía la luz encendida. Mientras Malena, parada en los hombros de Wyatt , trataba de llegar hasta la ventana Wyatt miraba hacia todos lados, preocupado de ser descubiertos.

-¿Cómo sabes que esa es su habitación?

-No losé, solo lo presiento... tranquilo. 

-¿Quieres que esté tranquilo mientras estoy ilegalmente en la maldita propiedad de un ricachón?

-Listo lo logré. Ahora agarra mis pies con tus manos y trata de levantarme lo más que puedas.

Wyatt refunfuñando y haciendo mucha fuerza pudo levantarla. 

-Apresúrate, por-por favor. -Le pedía con la voz entrecortada por la fuerza que hacía.

Cuando Malena por fin pudo alcanzar a ver por la ventana la vio a Liz boca abajo en su cama  y su habitación un desastre. Golpeó despacio la ventana y Liz levantó la cabeza con los ojos rojos y llorosos. Malena desde afuera le sonrió y la saludó con la mano. Liz abrió la boca y la miró extrañada desde su cama, luego recapacitó y rápido fue a abrirle la ventana. 

-Dios mío, Malena ¿Que rayos haces?

La ayudó a entrar a su habitación por la ventana. Una vez dentro las dos se miraron cara a cara. Liz todavía no podía creer que ella estaba allí mismo frente a ella. Parecía un sueño.

-¿E-estas bi-bien?- Le preguntó mientras se fijaba que no tenga ningún rasguño. 

-Yo sí. Creo que la pregunta es si VOS estás bien. 

Le contestó Malena mirándola preocupada.

-Debo verme horrible en estos momentos.

-Siempre te ves hermosa pero ahora te ves apagada, cansada... triste. -Le dijo mientras le acariciaba la mejilla.

Liz la miró y no supo que decirle, habían tantas cosas que le pasaron pero ella solo quería escuchar sobre Malena. 

-¿No estás enojada conmigo?

Malena la miró extrañada.

-¿Por qué estaría enojada con vos? 

-Por lo que pasó... Dejé que se metieran con vos y Wyatt, dejé que los lastimaran. Y luego no te llamé nunca y prácticamente desaparecí. 

-Sí, desapareciste pero imaginé que fue por el loco de tu padre. También imagino que la pasaste mal, solo siguiendo órdenes y obligaciones... 

Liz asintió mirando a un costado así como fruncía los labios, Malena se dio cuenta que no quería llorar. 

-Hey... está bien, estoy aquí ahora. -Le dijo mientras se acercaba más a ella tratando de abrazarla pero Liz no la dejaba.

-Es solo que... estoy muy cansada. -Le contestó y la miró a los ojos. 

-Losé y eso está bien. 

Liz no pudo más y dejó que la abrazara, sintió tanto alivio y paz que no quería soltarla. Malena le acariciaba la cabeza y la abrazaba fuerte. A Liz le cayeron unas lágrimas pero no dejó que fueran más. Malena le besó la frente y la sostuvo de las mejillas.

-¿Mejor?

Liz, sonriendo, meneó la cabeza.

Malena se rió. -Ah, entiendo. -Suavemente la besó y luego le preguntó. 

-¿Y ahora?

-Mejor.-Le contestó con una sonrisa.

Malena le dio cariñosamente unos cuantos besos más. -Te extrañé muchísimo.

Liz en vez de contestarle le dio un beso largo seguido de un -Yo también.

 Malena  la miró a los ojos y le dijo.

-Ahora escúchame bien, nada de esto es tu culpa, nada de lo que me paso a mi o a Wyatt. Es tu padre y tus ''amigos'' quienes deben entender que no pueden encerrarte por siempre, ni tampoco pueden obligarte a que pienses y seas como ellos quieren. Sinceramente nosé como mantuviste la cordura tanto tiempo, hasta ahora yo ya habría explotado. 

Liz miró a su alrededor. 

-Sí, bueno creo que ya era hora de que yo explote. 

-¿Que dijo tu padre?

-Nada, solo se quedo callado. No quiero hablar de eso ahora quiero saber cómo estás vos.

-No creo tener mucho tiempo para hablar... Wyatt me espera abajo. 

Ambas suspiraron, deseaban tener todo el tiempo del mundo para poder hablar.

Liz se acercó a besarla y Malena quizo agarrarle las manos pero Liz se las quitó de inmediato haciendo una mueca de dolor. Malena levantó sus manos y vio que tenía los nudillos lastimados. La miró inquieta.

-No pasa nada, ya me los curaré luego. 

-Debo sacarte cuanto antes de este maldito lugar antes de que te vuelvas loca.

-¿Que pasa si ya lo estoy? 

-Lo mismo te sacaría de aquí. No me daré por vencida con vos tan fácil. 

Liz la besó, un momento se detuvo y la miró a los ojos, ambas sonrieron, luego volvieron a besarse, pero esta vez el beso fue muy largo, Malena comenzó a bajar la mano por la espalda de Liz, y ella llevó su mano desde el hombro de Male hasta su mano y luego comenzó a subir por debajo de la remera.

-N-no no podemos, no ahora. -Le dijo Male, apoyándose frente a frente y mezclando sus respiraciones entrecortadas de excitación.

-Losé.- le susurró Liz al oído y luego le besó el cuello. 

-No, no, espera. No quiero darte más problemas. Ahora no es el momento. -Le contestó Malena mientras se alejaba. 

-Pero quiero estar con vos ahora. -Le contestó Liz suplicante mientras le tomaba la mano. 

-Losé, no sabes cuánto te deseo pero no podemos ahora. Escucha debo irme, tenemos un plan para vengarnos de tus amigos mañana, luego de eso te veré más seguido, lo prometo.

Volvieron a besarse fuertemente y se soltaron, luego Malena llamó a Wyatt por la ventana.

-Wyatt, ahí voy. -Le dijo tratando de hablar bajo. Wyatt le hizo seña de que estaba bien, subiendo los pulgares.

Malena volvió a colgarse de la ventana, en un instante sintió que Wyatt le agarraba los pies y los apoyó en su hombro. 

-Nos volveremos a ver lo prometo... -Le dijo a Liz.

Mientras apoyaba las manos en la pared, bajaba despacio hasta ponerse en cuclillas en los hombros de Wyatt, de ahí Wyatt la sostuvo de los hombros y la bajó. Ambos saludaron a Liz que los miraba desde la ventana y, con cautela, se fueron rápido.