「Amore Mío」Lutteo | completa.

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[Autora]

—Entonces... ¿me cuentan qué pasó en la primera casa? —preguntó Matteo a sus amigos y a su novia-.

—Mis padres no estaban allí, pero encontramos algo... la señora nos dijo que el dueño anterior, habría mencionado alguna vez el apellido Smith... y nos dio un número de teléfono.

— ¿Llamaron?

—Sí... —contestó Simón-. Mañana iremos... pero no me da buena espina ese señor...

—A mí tampoco... —confesó Luna-. ¡Oh, esperen! Debo atender una llamada... —se levantó y se alejó un poco de ellos-.

{...}

— ¿Lautaro? —dijo ella y Matteo la miró-. ¿Qué sucede?

— ¿Puedo pedirte un favor?

—Sí, dime que necesitas... —Matteo alzó una ceja y se acercó-.

— ¿Podrías cuidar a Bruno? Mira Luna, mi mamá está muy mal. Y hoy es una operación muy importante, de vida o muerte literalmente. Y pensé en vos, qué estabas acá... entonces se me ocurrió en qué lo podías cuidar; no quiero estar con él si algo malo llegara a suceder.

—No te preocupes... ¿dónde vives?

—Te espero en una hora en lugar indicado. Gracias Valente, sabía que podía confiar en vos.

—De nada Lautaro, siempre podrás contar conmigo. Un beso Prince. —cortó-.

{...}

— ¡Tres, dos...

—Uno! Se viene el interrogatorio de Matteo Balsano.

Dijeron Simón y Ámbar respectivamente.

— ¿A dónde vas? ¿A qué hora? ¿Por qué? ¿Era necesario mandarle un beso?

—En una hora VAMOS, los dos a lugar porque precisa que cuide de su hermanito, mientras el asiste a una operación de su madre, muy riesgosa. Y si le llegara a parar algo... él no querría que su hermano lo viera mal. ¡Es un saludo Matteo! —gritó-. Chicos... ¿ustedes qué harán?

—Nos tomaremos el día para descansar, además... tengo algo preparado para esta princesa. —dijo Simón y besó la mano de Ámbar-.

—Yo también tenía algo pensado, pero como siempre Lautaro vino a arruinar todo. —dijo Matteo y cruzó los brazos-.

—Te prometo amor que apenas termine la operación, vamos a hacer lo que tú quieras. —soltó los brazos de su novio y lo abrazó-.

—Estoy muy feliz de vernos así a los cuatro. Yo también tengo una sorpresa, pero no es para vos Simón.

— ¿Para quién entonces?

—Para Luna, obvio. Pero ninguno de los dos irá. Será sólo para las dos.

— ¡¿Qué?! —gritaron ellos-.

—Sin más que decir, me iré a duchar. Mañana estate lista Lunita, después del encuentro con el señor, pase lo que pase, iremos. —­se acercó y la abrazó-.

{...}

—Prometemos cuidarlo, no te preocupes. Avísanos cualquier cosa...

Luna abraza a Lautaro para luego irse con Matteo y Bruno, que estaban más lejos.

—Parece que mi hermanito quiere a tu novio...

La bella chica, se giró para mirar la escena. Matteo lo sostenía en sus piernas y le daba un helado que le había comprado en una heladería que estaba cerca. Anonadada, se fue junto a ellos.

—Creo que acabo de ver la escena más tierna del mundo.

—Corrección. Creo que acabas de ver una escena del futuro...

— ¿Del futuro?

—Sí, cuando tú y yo estemos casados y tengamos un hijo.

—Luna... ¿vos sos la novia de Lataro? —dijo el pequeño-.

—Ni lo sueñes amiguito, ella es mi novia. —Matteo alza al niño-. Tu hermano es solo un amigo de ella.

—Ah... —dijo el chico desanimado-.

—Bueno... ¿vamos a pasear?

— ¡Vamos!

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