Las Cadenas que nos Unen

parte 4

  se estaba haciendo tarde y el trabajo no había terminado para Hermione, pero no estaba cansada ya que Alana le había dado la noticia de que se había puesto en contacto con Bellatrix y que ésta volvería a Londres dentro de un par de días. Esto la ponía muy contenta ya que así, no estaba sola en una batalla contra su padre. Estaba terminando de cerrar su laptop cuando la puerta de su despacho se abrió y por ella entró Josephine, la mujer se veía algo nerviosa y la chica se sorprendió con su visita.

- hola Josephine, no te esperaba que vinieras por acá-. Hermione se acercó para saludarla, pero la mujer retrocedió un paso y eso preocupo a la chica ya que Josephine jamás había tenido esa actitud con ella.

- necesitaba hablar contigo de algo ... muy, muy importante-Josephine se agarró de su bolso como si fuera una tabla de salvación.

- deja que termine por acá y podemos ir a tomar un café , si te apetece-. Bajo la atenta mirada de Josephine , Hermione término de cerrar los archivos y termino de arreglar algunos documentos para el día siguiente. Mientras caminaban hacia el elevador Hermione aprovecho para llamar a Hanna y preguntarle por Jamie, la preocupación que demostraba la chica por su hijo caso hizo llorar a Josephine ya que ella jamás pudo hacerlo por ella.

- bien-le dijo Hermione mientras se subían al elevador.- Tú me dices donde te apetece ir-.

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Harry contemplaba la alberca en donde una vez había caído Hermione, mientras bebía una copa. Jamás imagino que la chica que le había arrojado café un día sería la dama y dueña de su corazón, nunca pensó en enamorarse de ella , y ahora ahí estaba loco por ella y por el hijo que habían tenido juntos.

- espero que no intentes suicidarte ahogando te en la piscina-dijo una voz detrás de Harry.-No puedes dejar a Jamie sin su padre-.

- pensé que estabas encerrado escribiendo otro libro-el moreno se giró y se encontró cara a cara con Snape, este tenía las manos en los bolsillos y miraba a Harry con atención. -¿Qué pasa?-.

- recuerdo la primera vez que te vi, eras una cosa flacucha y con lentes. Ahora eres todo un hombre y tienes un pequeño, estoy muy orgulloso de ti Harry y se muy bien que James debe de estarlo también allá arriba-. Harry lo miró y sus ojos se pusieron algo brillosos.

- gracias, Severus. Se muy bien que no te hice las cosas fáciles con mamá, pero la has hecho una mujer feliz y nos diste una hermosa he inteligente niña la cual adoro con todo mi ser-le dijo el moreno sonriendo le.

- tu madre, Alice y tú son todo para mi -. Severus apoyó su brazo sobre los hombros de Harry mientras sacaba algo de su bolsillo. -Por eso quisiera darte algo , técnicamente no es para ti -Severus le entregó una pequeña caja de terciopelo verde y el moreno levantó una ceja curioso. Cuando este la abrió , encontró dentro de ésta un anillo de doble engarce con una piedra de color amarillo corte princesa. Harry lo volvió a mirar sorprendido.

- era de mi madre y me gustaría que se lo dieras a Hermione, espero que esta vez hagas las cosas correctamente y no la vuelvas a joder de nuevo-.

-Severus -el moreno lo miró.-Este anillo es demasiado, deberías dárselo a Alice por ser tu hija no a mí que soy solo tu hijastro-.

- te lo estoy dando a ti ya que para mi también eres mi hijo, Harry. Te he cuidado y te he visto hacerte mayor , así que dame el honor de ver a Hermione con el anillo de mi madre y no te preocupes por Alice ya que para ella tengo un relicario precioso de mi madre-. Harry abrazó a Severus, esta vez no obligado por su madre o las circunstancias. Si no porque le nacía abrazar al hombre el cual lo quería como si fuera su padre.

- muchas gracias, Severus. En serio-.

- no hay que darlas- él le sonrió. -Ahora se viene una pregunta muy importante, ¿cuándo se lo pedirás a Hermione?-.