Capítulo 13

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El lunes, Eloise ya había regresado a su rutina habitual en la oficina del alcalde, aunque esa normalidad estaba enriquecida con el placer de haber compartido un fin de semana haciendo el amor con Nick Marshall.

Nick era maravilloso y sabía que tenía que decirle todos y cada uno de sus secretos. Sabía que él no merecía vivir más en la ignorancia de los aspectos de su vida.

Todo sobre su enfermedad.

Distraídamente se llevó las manos a la cicatriz de su vientre, recordando el día que la habían operado. Ese día había marcado un antes y después en su vida:

El antes, la enfermedad que había minado sus defensas.

El ahora, una vida sana, aunque sabiendo que jamás iba a poder darle hijos al hombre que amaba.

Al hombre que amaba...

A Nick...

Mientras ordenaba unos papeles para el alcalde Hurtman, pensó que tal vez se lo dijera aquel mismo día o pronto. Pero sabía que no podía dilatarlo por más tiempo.

Pero no estaba lista, no era fácil

¿Cómo le decía?

Faltaban tres días para la fiesta de navidad, que iba a ser el miércoles, y había trabajado mucho para que esa fiesta fuera maravillosa, e incluso iban a encender el árbol de navidad, una mega estructura de cien metros de altura adornada con múltiples luces de led que se verían en todo el pueblo.

—Puedes hacerlo —se dijo a sí misma en voz alta—. Puedes hacer esto y mucho más Eloise Angelina...

Mientras susurraba y acomodaba los múltiples papeles que se habían acumulado, no se dio cuenta de que un hombre la miraba apoyado en una pared mientras sonreía y se cruzaba de brazos.

Nick jamás pensó que una mujer que hablaba sola podía ser tan... cautivadora, pero en realidad Eloise lo era.

Lo tenía demasiado atrapado y ya no había más tiempo.

—Eloise —le dijo haciendo que ella diera un respingo y se apoyara en la mesa.

—¡Nick! ¿No tendrías que estar trabajando? —le preguntó mientras que le daba un beso en los labios y él se aferraba a sus caderas.

—Solo pasaba a saludar.

Eloise volvió a ocupar su lugar detrás del escritorio y le sonrió.

Mientras ordenaba algunas carpetas y hacía anotaciones en una agenda, Él la miraba con detalle, había cambiado desde el primer día que la vio tiempo atrás, ya no era ni tímida ni sutil. Miraba a los ojos de las personas cuando hablaba con alguien y elevaba el tono de voz si estaba en desacuerdo con algo.

Había cambiado de manera repentina, no de a poco. Lo que significaba que había estado mintiendo...

—Pareces tensa —dijo sentándose en la silla al frente de ella. Eloise guardó una carpeta en un archivero.

—Estoy muy nerviosa —Admitió—. No esperaba que me dieran este trabajo y la verdad que... bueno.

—Todo va a salir bien. Ese árbol va a ser el mejor del pueblo y los pueblos aledaños van a hablar de él. Hasta los medio internacionales van a venir a ver este árbol.

Ella se rio y miró a su amor vestido de policía.

—No hace falta adular, amor.

—Sí que hace falta. Tu lo... tú haces que... Te mereces que te adule, Eloise.

—A veces creo que no lo merezco —Nick negó con la cabeza y ella miró el reloj—. Es hora de que te vayas. Hay mucho trabajo acumulado y tú debes estar igual.

De amor y tormento #2 "De amor y soledad".Donde viven las historias. Descúbrelo ahora