Don't Leave [Yoon Gi - BTS]

t r e i n t a y o c h o

Con el paso del tiempo, los días se convirtieron en semanas en las que Ha Neul tuvo que trabajar arduamente en sus exámenes. Su método de estudio era salir de clases por la tarde y dirigirse a la cafetería de Dae Ho con sus libros, donde podía concentrarse mejor que estando en su apartamento, y luego en la noche se encerraba en su habitación junto con Ji Min después de cenar para ayudarse mutuamente en sus estudios. Su amigo era mejor en los números que ella por lo que le daba una mano con las materias que le resultaban más difíciles, aunque siempre solía recordar la tarde en la biblioteca con Yoon Gi.

Si la situación hubiese sido diferente, ¿estaría él enseñándome en su lugar? Se preguntaba en su mente cuando rememoraba los momentos pasados a su lado. ¿Cómo habría sido su destino si no hubiese descubierto que estaba enfermo? ¿Debía arrepentirse de haber contradicho a la ley y entrado en la habitación de un paciente sin permiso? Tal vez vivir en la ignorancia habría sido mejor. Esa afirmación cruzaba su cabeza todas las noches al no poder dormir. ¡Cuánto desearía no saber la verdad! Entonces, esa angustia y tristeza no la invadirían ni convertirían sus días en tediosas rutinas aburridas que debía sufrir cada minuto que pasaba. Quizás hasta podría haber sido feliz, al menos por algún tiempo. Después de todo, ni siquiera había podido prepararse para una noticia como esa. ¿Por qué no había sido advertida? ¿Por qué tuvo que descubrirlo por sí sola?

Sin embargo, no podía culpar a los demás por no habérselo dicho. Seok Jin y Ho Seok fueron los primeros en disculparse por no contarle la verdad pero le aclararon que no querían que ella tuviese que pasar por el mismo sufrimiento por el que ellos pasaron al enterarse por Nam Joon. Al igual que Ji Min y Jung Kook, ninguno volvió a ser el mismo después de la noticia. Sus compañeros de piso buscaban excusas para estar ocupados y no sentirse obligados a sentarse y tener la charla que tanto eludían para evitar las lágrimas que alguno probablemente derramaría. El simple hecho de mencionar el nombre de Yoon Gi era suficiente para que tuviesen que detener lo que sea que hacían y salir cuanto antes de la habitación donde se encontraran. Todos se sientes igual de dolidos, admitió Ha Neul al notarlo la primera vez. La única persona que sabía que seguía en contacto con él era Nam Joon, pero éste no lo nombraba porque podía percibir el ambiente denso que se formaba con su evocación.

¿Cómo se sentiría Yoon Gi sabiendo que sus amigos no eran capaces de enfrentarlo? ¿Estaría triste? ¿O enfadado? ¿Los creería cobardes? Ha Neul definitivamente se sentía como una. El saberse débil frente al muchacho le aterraba y le impedía mantener cualquier tipo de contacto con él con miedo a que volviese a sucumbir a la desesperación como esa noche en el cementerio. No quería regresar a ese momento al igual que tampoco quería sentirse de la misma forma que lo había hecho después de la muerte de Tae Hyung. Es demasiado doloroso...

En su primer día de vacaciones de verano, finalmente libre de exámenes, Ha Neul se permitió levantarse al mediodía y disfrutar de una ducha de casi diez minutos bajo el agua fresca para ese clima caluroso. Al salir, se vistió con una camisa color crema que escondió bajo unos vaqueros negros y sus botas marrones militares, se dirigió a la cocina donde halló una nota escrita de Seok Jin donde le decía que los tres habían salido temprano por diferentes razones y que no pasarían la noche en el apartamento, por lo que estaría sola hasta el día siguiente. Se entusiasmó por la idea ya que, desde que se había mudado, no había tenido en ninguna ocasión el lugar para ella misma. Podré controlar la televisión, pensó, dando algunos saltos de felicidad hasta el refrigerador, aunque su sonrisa no duró mucho al notar que no había nada para comer. ¿Acaso a nadie le agradaba hacer las compras? Cerró la puerta de mala gana, se colgó su mochila al hombro con varias pertenencias y salió del edificio para tomarse el autobús que la llevaría a la cafetería de Dae Ho.

En el camino, se distrajo escuchando música en su teléfono y, como era usual, buscó algo que la ayudara a no pensar en Yoon Gi. Lo primero que se le vino a la mente fue la boda de Chun Hei. La fecha había sido decidida y no era muy lejana por lo que tanto ella como Jung Kook apenas tenían tiempo para estar con sus amigos en esos días. Chun Hei la había hecho prometer que la acompañaría a comprar el vestido y se lamentó en incontables oportunidades acerca de no poder elegirla para ser su dama de honor ya que su madre quería que sus primas se encargaran de ese papel. Sin embargo, a pesar de que a Ha Neul no le importaba, Jung Kook se mostró una noche después de trabajar para hacerle un pedido que la dejó congelada de la sorpresa.