Don't Leave [Yoon Gi - BTS]

v e i n t i u n o

Ha Neul se echó sobre el sofá al salir de su ducha, dejando apoyada su pierna de costado en el resto del asiento y atando el cabello húmedo en una coleta baja. Se sintió aliviada de encontrarse sola por al menos unos minutos hasta que Chun Hei y los muchachos regresaran con comida. Al terminar el partido, la habían llevado de urgencias al hospital donde el doctor Kim estaba haciendo sus rondas nocturnas y éste le informó que debería evitar usar su rodilla por algunas semanas hasta que sanara. Con la férula apretando su piel debajo del pantalón militar, todavía podía sentir un poco de malestar a pesar de las pastillas que le recetaron, por lo que se levantó unos segundos para tomar la fotografía colgada de sus dos compañeros y Tae Hyung, buscando una distracción.

- ¿Qué te pareció? – le preguntó a la imagen, dejando caer su cabeza a un costado cuando volvió a su lugar - ¿Hice un buen trabajo?

- Ne.

Sonrió a medias al escucharlo y abrazó el cuadro a su pecho.

- Lo logramos...

Creyó por un momento que se había quedado dormida al sobresaltarse por el sonido de la puerta abrirse, haciendo la fotografía a un costado y viendo a Seok Jin y Nam Joon aparecer con bolsas. Estaban solos. ¿A dónde habrían ido los demás?

- No tuvimos tiempo de felicitarte – admitió el segundo, sacando de sus espaldas un pequeño ramo de tulipanes de distintos colores -. Aquí tienes.

- Oh, no era necesario. Gomawo – agradeció ella con una inclinación.

Quiso levantarse pero el mayor la detuvo levantando la mano.

- Quédate ahí, no deberíamos moverte. ¿Cómo te sientes? ¿Te duele mucho la rodilla?

- Ani – respondió -. Molesta un poco después de que me muevo, pero ya no duele.

Ambos lanzaron un vistazo al cuadro a su lado y ella se apresuró en calmar la incomodidad en sus miradas.

- Yo... quería verlo – dijo sin darle importancia.

- Está bien, nosotros también lo hacemos de vez en cuando. – Seok Jin tomó la fotografía en sus manos y la admiró con ojos tristes. – No puedo dejar de lamentar el haber perdido esos seis años que tan importantes fueron en su vida.

- Todos lo lamentamos, hyung – acordó Nam Joon, cruzándose de brazos y apoyándose en la pared -. Pero debemos entender que se trató de algo fuera de nuestro control.

- Lo sé. Es sólo que el que no lo supiéramos seguro debió dolerle más a él que a nosotros. Tuvo que enfrentarse a algo como eso – lamentó soltando un suspiro y mirando a Ha Neul -. Al menos te tuvo a ti. Debió haberse sentido bien contigo a su lado.

Intentó sonreír por sus palabras, o al menos mostrarse de acuerdo, pero le fue imposible.

¿Cómo podía hablarles sobre el estado de Tae Hyung durante esos meses? ¿Cómo podía mentirles asegurando que había sido feliz cuando ni siquiera ella lo sabía? Ya no podía estar segura de lo que su novio hubiese pensado en aquel tiempo desde que supo la verdad sobre los amigos de quienes nunca le habló. ¿Por qué no confió en ella? ¿Le habría estado ocultando alguna otra cosa? Su cabeza le dolió por el torrente de preguntas que la invadieron de repente.

- Mianhae, no quería sacar este tema. – Seok Jin renovó su sonrisa y miró el reloj en su muñeca. - ¿Por qué están tardándose tanto?

Sin darle oportunidad de preguntar a qué se refería, el bramido alegre de distintas voces la hizo darse vuelta en su asiento para encontrar a Yoon Gi, Ho Seok, Ji Min, Chun Hei y Jung Kook y los miembros de su equipo de baloncesto. Cada uno traía algo diferente en las manos, tanto comida como bebidas, y la mayoría le regalaba una enorme sonrisa a la que ella respondió atónita.