Don't Leave [Yoon Gi - BTS]

t r e i n t a

Guardando sus gafas en el bolsillo de su bolso deportivo y parpadeando para acomodar sus lentes de contacto, Ha Neul reconoció a Ji Min caminando tranquilamente por el campus mientras ella corría lo más rápido que sus piernas le permitían con el peso extra. Al escucharla, su amigo se giró para saber de quién se trataba y la miró desconcertado.

- ¡Llegaremos tarde! – vociferó la muchacha, aferrándose a su mano en el camino y continuando con su carrera.

- ¡¿Hablas enserio?! – Él la seguía al mismo ritmo. - ¡Creí que teníamos diez minutos!

- ¡Pues, tu reloj no funciona bien!

- ¡No culpes a mi reloj, se rompió por tu culpa!

- ¡Ya te dije que no lo arrojé al retrete apropósito!

Entre gritos y empujones, llegaron con apenas diez segundos de anticipación y el entrenador Lee los mandó directo a los vestidores a que se cambiaran para comenzar la práctica. Lo hicieron con velocidad, ignorando el dolor de sus piernas, y regresaron a la cancha donde el equipo los esperaba.

- De acuerdo, muchachos, gracias a la tardanza de Ryu y Park, ¿adivinen cuántas vueltas al gimnasio les daré esta tarde? – preguntó Dae Wo. Llevó el silbato a sus labios y lo hizo sonar ruidosamente. - ¡Veinte vueltas! ¡Ahora! ¡Muévanse!

Ambos jóvenes se disculparon con leves inclinaciones y sonrisas a las miradas recelosas de sus compañeros.

Con lo mucho que había ocurrido el anterior fin de semana, Ha Neul apenas era capaz de mantener la calma a pesar de que en su mente estuviese sufriendo una guerra interna. Al terminar con su charla el viernes en la noche con Yoon Gi, ella tuvo que regresar a casa porque debía estudiar y el sábado y el domingo no pudieron encontrarse debido a que el rubio estaba ocupado estudiando para un examen de la universidad y su trabajo. Por lo que aún existía una conversación o encuentro incómodo que deberían superar en cualquier momento, al cual Ha Neul no tenía idea de cómo reaccionaría. Todo era demasiado nuevo. ¿Estaban saliendo? ¿O eran una especie extraña de amigos que se gustan? Después de la noche en el apartamento meses atrás, él no había vuelto a besarla. Entonces, ¿no eran una pareja? Al menos, no una normal, se dijo a sí misma. Su relación con Yoon Gi nunca había sido normal, y quizás esa era la razón por la cual era tan especial y diferente. No obstante, no podía evitarse sentirse inquieta ya que sabía que debería enfrentarlo de nuevo.

Quizás más pronto de lo que esperaba, admitió durante práctica, distinguiendo a un muchacho de cabello platinado con expresión seria recostando su espalda en el marco de la puerta que dividía la entrada de la cancha. ¿Por qué estaba allí? Su presencia la puso inexplicablemente nerviosa por los últimos quince minutos hasta que el entrenador Lee dio por finalizado el día. ¿Debería ir a saludarlo? Estaba sudada, ¿y si se daba una ducha primero? Se encontraba gritándose en su mente qué debía hacer mientras tomaba una toalla de mano de su bolso cuando Ji Min apareció a su lado.

- ¿Se supone que vino a por ti? – inquirió su amigo de mala forma.

Él estaba al tanto de lo ocurrido el viernes en la noche porque se lo había contado al día siguiente. Y, como había esperado, no estaba del todo de acuerdo con ello.

- No esto segura. Pero es algo incómodo. – Ella se llevó la toalla al cuello. - ¿Sigue observándome?

- Ne – respondió después de girar con disimulo la cabeza -. ¿Tienen planes?

- No que yo sepa.

- Deberías averiguarlo – le aconsejó, dándole una palmada sonora en la espalda -. Pero recuerda que tenías un compromiso para hoy.