One in a Million

One in a million (21)

Perdón, se que esta vez me he tardado más de lo normal, no he tenido tiempo suficiente para poder subir nuevos capítulos. Trataré de subirlos lo más pronto posible, he tenido mucho trabajo en la escuela y mi agenda esta llena. Lo lamento. Pero les prometo más capítulos.

Por favor Voten...Comenten... Añadanla a su lista de lectura.... conviértanse en fan!! :D 

Los dejo con el capítulo 21! Por fin.

Disfrútenlo.

Capítulo 21

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---------------ANTES---------------

-Él ultimo en llegar hace el desayuno – y con eso, los dos salimos corriendo escaleras abajo.

 -------------DESPUÉS------------

Comenzamos a desayunar unos ricos huevos revueltos con tocino, hechos por mí. No quiero decir que perdí, hubiera ganado si tan solo Alex no hiciera trampa. Bajamos de las escaleras, estaba a punto de llegar cuando sentí unos brazos al rededor de mi cuerpo que me alejaba de la cocina. Comencé a patalear para poder llegar pero la sensación de besos en mi cuello me hizo ceder. Me volteé para estar frente a él. Me dió un beso apasionado y entrelace mis manos atrás de su cuello. Me había olvidado del desayuno cuando de repente él se deparo y comenzó a correr a la cocina. Llegamos prácticamente al mismo tiempo entre empujones. Pero podrán ver como Alex decidió que la perdedora había sido yo.

-Vamos Jess, no te pongas así, sabes que perdiste.

-No perdí y lo sabes. Hiciste trampa.

Se acercó a mí pero yo me aleje con mi plato.

-¿Cuánto tiempo estarás enojada amor? – preguntó provocándome.

Me sentía como en uno de esos días en lo que lo único que pensaba era en poder golpearlo con todas mis fuerzas. No quieré decir que lo hiciera pero la tentación estaba ahí.

-Hasta que admitas que perdiste – admití. Desde que eramos novios no podía estar mucho tiempo enojada con él, siempre tenía razones para estar con él y pasarla bien.

-De acuerdo, yo perdí. – dijo fastidiado.

 -Pero no lo crees.

-Jess…

Lo siguiente que supe fue que estaba rodeada por sus fuertes brazos y su labios estaban presionados en los mios.

-¿Me perdonas? – preguntó entre besos.

-No…

-¿Segura?

-¿Hhmm?...

-Sabes…Que…Te…Amo…

Sonreí.

-Perdonado. 

Terminamos de desayunar y nos dirigimos de nuevo a mi cuarto para que me pudiera cambiar, le había prestado ropa a Alex ya que no quería que fuera a su casa a esta hora, en realidad no quería que se fuera de mi lado. En el momento en que me disponía a cambiarme vi como Alex me miraba.