_Diferentes puntos del mundo han caído cual naipes y miles de personas han sido aplastadas cual insectos. Debemos parar esto de una buena vez.
_La sangre que fue derramada tenia que serla, sin ella las cosas no estarían donde están hoy.
_Aun así creo que podríamos hacer algo al respecto no simplemente ver la televisión y escuchar los entrenamientos que tiene Gabriel con los demás.
_Ya deja de quejarte, las cosas son como deben ser.
_Jesús ¿podrias apoyarme un poco aquí?.
_Mi padre sabe como hace las cosas Lucia, si una vez sacrifico su sangre puede hacerlo con lo que quiera.
_Ves, ya deja de quejarte.
Había transcurrido bastante tiempo desde que llegaron a Praga a entrenar al pequeño ejercito que daría batalla en la tierra, las 7 trompetas tocadas fueron, todo el mundo se encontraba en un caos total. El miedo comenzaba a apoderarse de la gente, los lugares atacados fueron rápidamente dominados por aquellos seres salidos de las mas recónditas profundidades, cada lugar era un monumento a todos los pecados. Algunos esclavos se volvieron otros fieles siervos. Los que aun quedaban sin corromper rogaban que dios los salvara de aquel horror o que tuviera misericordia y los llevara con el antes de que todo el mundo terminara igual.
Por otro lado existía gente que pensaba el que el final ere ese y dios quizá estaba al igual que ellos atrapado en un infierno infinito, en uno personal o atrapado con el papa en el único lugar donde no habían entrado esos seres. Quizá estaba en el vaticano con el pontífice y el diablo jugando a aplastar a la humanidad como hormigas bajo su poderoso dedo.