Naim: la ciudad detrás del espejo

Capitulo 1

No puedo creer como hemos llegado hasta aquí. Hace apenas 24h estábamos en el precioso apartamento de mi tía en Madrid y ahora nos encontramos en un avión camino de Isla Nemai para vivir con la persona mas ruin, fría y antisocial que ha visto jamás el planeta Tierra. Mi abuela.

Mi tia nos "pidio" que fuera a vivir unos meses con mi abuela materna cuando sin "querer" queme el aula de química. Pero no es mi culpa que el mechero saltará por los aires justo cuando me pidieron que respondiera a una pregunta (muy difícil queda decir) del profesor. Y encima, el tonto de mi hermano Ryan no se le ocurre de otra que decir que el me estaba hechando una mano, no, ¡si hermano mío tenía que ser! Conozco lo suficiente a Agatha para saber que no le ha hecho ninguna gracia cuando su hija mayor se lo dijo. Desde el fallecimiento de mis padres, Agatha no ha vuelto a ser la misma. Se volvío fría y callada. Las primeras semanas después del accidente las pasamos en aquella casa. Agatha no nos dirijio la palabra salvo cuando nos daba ordenes. Esa mujer es el diablo en persona. ¿Quien en su sano juicio encerraria a unos niños de 6 años en su habitación después de la muerte de sus padres? Ella.

Mis padres eran mi ejemplo a seguir. Klia, mi madre, era una abogada de gran prestigio en Nemai, que era donde mi padre y ella se habían criado y donde viviamos. Y mi padre, Noah, era el mejor profesor de astronomía que jamás a existido. A mi madre se la respetaba muchisimo allí a donde fueramos, era una gran abogada. Todos los casos que había llevado los había ganado, incluso consiguió que un hombre que había robado un banco le quitaran la condena de 4 años de carcel y le condenaran a arresto domiciliario. Todos la temían, pero yo no. Era mi idola. Yo la veia como a una super-heroína.

Pero a mi padre era muy distinto, se le tomaba como un loco. A sus alumnos les contaba leyendas de como se crearon las estrellas, los planetas, los seres humanos...

Decía que nada de lo que veíamos era completamente cierto. Contaba que la primera estrella del universo se creó gracias al nacimiento de un hada. Él la llamaba Ashel. Decía que, Ashel fué la primera de las miles de hadas que hoy en día existen. Narraba que, Ashel, creó un mundo en el que las hadas y otras criaturas mágicas vivieran en paz y armonía. Y, cuando un hada o criatura mágica moría, ésta se convertía en una estrella más del firmamento. Añadía el detalle de que a cada constelación, se le da el nombre de la familia a la que pertenece. De esta forma, cada hada estaba unida a sus seres queridos por toda la eternidad. Y así, fué como se crearon las estrellas.

Aun me acuerdo de la cara que ponía su jefe (según él contaba) cada vez que le hablaba de esta historia y otras muchas explicando cada cosa de las estrellas y galaxias. En más de una ocasión algún que otro alumno iba a quejarse de la forma de enseñar de mi padre y amenazaba con quejarse al director o a la junta directiva para que lo echaran. Pero mi padre se mantuvo firme y no cambio su forma de enseñar.

Cuando era pequeña admiraba mucho eso de él. De mantenerse firme frente a las amenazas y adversidades.

Eramos una familia feliz. Pero todo cambio cuando ocurrió el accidente.

El 21 de Julio de 2006 hubo un gran incendio en la casa en la que mi familia y yo vivíamos. Yo me encontraba en casa de unas amigas haciendo una fiesta de pijamas, y Ryan estaba en la casa de mis otros amigos haciendo una reunión de Hombres, o como nosotras decíamos, una fiesta de pijamas varonil, pero mis padres estaban en casa resolviendo unos a sustos del trabajo. Según los forenses, el incendió lo causo una brasa de la chimenea mal apagada. Nos contaron que, seguramente, mis padres se encontraban en su habitación cuando empezó el incendio. Ambos se despertaron al oler el humo e intentaron salir, pero quedaron encerrados. Se asfixiaron con el humo y fuero carbonizados por las llamas. Lo que a día de hoy seguimos sin poder explicar es por que no saltaron por la ventana del cuarto o pidieron ayuda por sus móviles.