✎Bts- Run (Ballad Mix)Cuidar a un montón de borrachos. Eso podía pasar.
Luego de nuestra huida furtiva del club, Yoongi condujo hasta una especie de parque abandonado cerca del lugar y todos empezaron a beber como si eso no fuese a pasarles facturas al día siguiente. Yo también había tomado unos cuantos tragos, aunque no los suficientes como para nublarme los sentidos, pues, en cuanto vi aquella reserva en la camioneta, supuse que nadie iba a salvarse de una buena borrachera.
Estaba tirada en el césped, sin importarme mucho que fuese a ensuciarme y a arruinar todo mi esfuerzo por arreglarme. Escuchaba a lo lejos las risas de mis acompañantes y sus gritos sin sentido. Sentí un cuerpo sentarse a mi lado y cuando volteé para ver de quien se trataba, me encontré con la vacía expresión de Jaebum. Ni siquiera sabía por qué nos había acompañado, aunque lo más seguro es que fuese porque Hoseok estaba ahí. Pero algo si sabia y es que esa mueca de fastidio en su rostro, me ponía de los nervios; al menos podría disfrutar un poco, ¿no?
Ni siquiera me di cuenta de cuando el cuarteto de borrachos llego hasta nosotros y se lanzaron en el suelo, riéndose de ese simple acto cuan niños pequeños. Yoongi fue el primero en sentarse como un indio y señalarnos con su blancuzca mano. — ¡Vamos a jugar!
Jimin soltó una risita, que más bien sonó a arrepentimiento, pero aun así se irguió y asintió. Hoseok permaneció quieto en el suelo, respirando acompasadamente, pero, por el contrario, yo si me levanté. Ni siquiera supe porque lo hice, tan solo quería ver qué clase de estupideces dirían. El pelinegro a mi lado también se dio la vuelta y tomo un sorbo de una lata de cerveza.
Namjoon me pasó la botella transparente y con una sacudida de cabeza, preferí desviarla a Hoseok; quién tomó de esta como si fuera jodida agua y luego se incorporó al pequeño círculo que habíamos formado, sentándose junto a Yoongi y dejándome atrapada entre Jimin y Jaebum.
— Bien, empeceeeemos.
Yoongi arrebató el objeto cristalino de las manos de Hoseok y dio un profundo trago a la misma antes de mostrarnos sus encías en una sonrisita. — Jimin. Confiésanos algo andaaaa.
— Así no va el juego enano. — Namjoon le dijo mientras le daba un golpe en el costado, juguetonamente.
— ¡Qué más da tío! — Yoongi volvió a empinarse la botella y se rio. — Anda Park, cuéntanos algo.
Jimin tomo la botella que Yoongi tenía en mano y pareció meditar unos cuantos segundos antes de darle un trago. La melancólica aura que tenía era totalmente diferente a lo que estaba acostumbrada a ver de él y ciertamente, era un cambio que podría poner triste a cualquiera. Cerró sus ojos y se pasó la mano por el cabello, soltando una risa sarcástica en el camino.
— Yo,...— Comenzó, arrastrando un poco las palabras producto del alcohol y quizás de la vergüenza. — Estoy enamorado. Estoy enamorado como un pendejo. — Dejo caer su cabeza mientras curvaba sus labios en un puchero, escondiendo su cara en el vacío de sus piernas. Levantó un poco el rostro y me miró a través de sus largas pestañas; teniendo en su mirada una tristeza que me inquietaba. —No es justo.
— ¡Vaya Park, que mierda! — Namjoon le interrumpió mientras se acercaba a darle palmadas en la espalda. — ¡Esa tía debe ser una víbora!
Aparté la vista, sintiendo un pequeño escozor en mi pecho y evitando la mirada del castaño. ¿Qué había sido eso?
— Yo tambiennnn tengo algo que decir~— Hoseok pronunció, meneando sus brazos dramáticamente y sonriendo como idiota. — Y-yo...