Inesperada sorpresa

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Edward pov. 

Vi como Bella vomito todo el desayuno de esta mañana me preocupe en realidad se veía muy mal. Cuando termino se acerco a lavabo y enjuago su boca, la observe por el espejo preocupado. 

- ¿Cómo te sientes? -pregunte. 

Bella solo me observo por el espejo y una sola palabra salio de sus labios. 

-Rayos. 

-¿Bella, que pasa? 

Pero solo se quedo pensativa observándome por el espejo, luego se giro hacía mí y se mordió el labio inferior con nerviosismo. 

-Bella, me estas preocupando dime algo. 

-Prométeme que no te vas a enojar. 

-¿Por qué tendría que enojarme? se trata de tu salud... ¿estas enferma? 

-No creo que se trate de una enfermedad -agacho su cabeza. 

Me acerque a ella y puse un dedo en su barbilla para que me viera a los ojos. 

-Dime. 

Se abrazo a mi pecho, sentí como se mojaba mi camisa ya me estaba preocupando. 

-Creo que estoy embarazada -dijo, no se si escuche bien debido a sus sollazos. 

-¿Qué? -fue lo primero que se me ocurrió. 

-Se que soy una tonta, perdón -salió corriendo del baño. 

Me quede en shock ¿qué es lo que había pasado? fui corriendo tras de ella; pero no la vi por ningún lado, tenía que haberle dicho que no se preocupara pues yo me haría cargo de mi hijo... hijo, se escucha extraño pero me agrada como se oye. 

El timbre sonó y comenzaron a salir de sus clases los demás, tenía que encontrar a Bella, salí hacía el estacionamiento y no la vi por ningún lugar hasta que a lo lejos alcancé a ver a una figura que dio la vuelta en la esquina, la reconocí y era Bella... subí a mi auto, sería más rápido que ir corriendo tras ella. 

Salí del estacionamiento e inmediatamente la vi, iba corriendo como si la fueran persiguiendo puede notar como lloraba eso no me gusto, frente el auto delante de ella prohibiéndole el paso. 

-Bella... -salí del auto y la abrace-. Tranquila. 

-Lo siento -no dejaba de repetirme que lo sentía. 

-No tienes porque disculparte -tome su rostro entre mis manos-. Es la mejor noticia que me podía haber dado, se que somo muy jóvenes pero veremos la forma de salir adelante, tú  y yo. 

-¿No estas molesto? 

-Por supuesto que no. 

-Seremos padres -dijo con una tímida sonrisa. 

-Seremos padres -confirme y la bese en los labios. 

No sabía que sería de nosotros ahora pero de algo estaba seguro cuidaría a mi familia más que a mi propia vida. 

Minutos después subimos al auto. 

-Creo que deberíamos ir a una farmacia, digo para confirmarlo. 

Tome su mano. 

-Claro- conduje hacía la farmacia. 

Bella estaba por bajarse. 

-Espérame aquí. 

-No -me baje del auto y abrí su puerta. 

-Edward... 

Mi Tiempo PerdidoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora