Son una nueva generación de magos,las cartas mandadas por lechuzas y los mensajes a través de patronus han llegado a su fin.
Hace diecinueve años que Voldemort fue derrotado y esta nueva generación tiene muchas cosas que contar y experimentar.¿Es...
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Los labios de Daphne chocaron contra los míos, sonreí en medio del beso, sus manos estaban sobre mi cuello y las mías apretaban su cintura. Estábamos en la Madriguera, estaba sentada en mi regazo, con sus piernas rodeaba mi cintura. Creo que en mi vida había estado más cómodo.
—¿En que piensas?—susurró antes de besar mi mejilla.
—En lo mucho que me gusta que vengas a animarme—mis manos acariciaron mi espalda.
—¡Para que digas que no soy buena novia!—susurró, sus manos se perdieron por mi pelo.
Sonreí antes de sus labios volvieran a los míos. Sentí sus caricias por debajo de mi camisa.
—Oh venga ya—Nos separamos y vi a Dominique parada en la puerta junto a Lyssander—Id a la habitación, queremos ver una película.
Daphne y yo soltamos una carcajada. Daphne se puso de pie y yo la seguí.
—Eres una aguafiestas, lo sabes, ¿verdad?—preguntó Daphne mientras tiraba de mi muñeca.
Tiró de mi por las escaleras, parecía tan emocionada.
—Vale, Malfoy, vas a tirarme al suelo—me quejé entre risas.
—Eres un lento, Potter—rió ella mientras rodeaba mi cuello con sus brazos.
—Me gusta cuando te pones tan cariñosa—sonreí mientras deslizaba mis manos por su cintura.
—Yo siempre soy cariñosa—dije antes de que sus labios se unieran con los míos.
Mi espalda chocó contra la puerta, sus manos se colaron por debajo de mi camiseta mientras su lengua acariciaba la mía. De repente, la puerta se abrió y me caí al suelo. Vi la sonrisa cruel de Daphne antes de que cerrara la puerta.
Me puse de pie y golpeé la puerta.
—Esto no tiene gracia, Malfoy—grité a través de la puerta—¡Vamos, no me jodas!
Forcejeé con el pomo.
—No se abre—murmuró una voz a mi espalda, me giré y vi a Fred parado con las manos en sus bolsillos— Ya lo he intentado.
—De eso nada—volví a golpear la puerta— ¡Daphne Astoria Malfoy, abre esta maldita puerta ahora mismo!
—Lo haré cuando hayáis solucionado vuestros problemas—gritó ella al otro lado de la puerta.
