Capitulo XXlV. • Adolecentes con hormonas alborotadas •

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Austin me había dejado en casa , mis padres ya estaban dormidos , así que yo fui a hacer lo mismo.

Me puse una camisa larga de Tony , me metí debajo de la sabana y quede rendida.

Al día siguiente me desperté porque mi madre estaba discutiendo con mi padre por comerse el último yogurt que quedaba , que estúpidos. Pensé. Fui a darme una ducha de siete minutos , me vestí , me hice una coleta alta y bajé.

- ¡Antonio Perry! , vuelves a agarrarme una nalga y te voy a pegar con la cuchara - lo amenazó mi madre poniendo sus ojos grandes como vaca y levantando la cuchara.

- Primero el yougurt , y ahora ¿las nalgas? - dije apareciendo y ellos brincaron del susto.

- Por dios Wú Antoniette Perry Soto me vas a matar de un ataque al corazón - dijo mi padre , mientras yo reía.

- Te voy a pegar con la cuchara a ti también - dijo mi madre.

- ¿Qué hay de desayunar? - dijo Tony abrazandome por la cintura y poniendo su cabeza en mi hombro.

- Pancakes - dijo mi padre con su sonrísa de sicópata.

- Oh , yo quiero el mio con miel y fresa - dijo Tony.

- El mio con chocolate y fresa - dije yo.

- Y el mio con miel y manzana - dijo mi padre.

- Se lo hacen ustedes mismos - dijo ella con su tono de madre gruñona.

- Sabes muy bien lo que paso la última vez que nos preparamos nuestros últimos pancakes , papá los tiro todos al piso por hecharle tanta miel , y yo sin querer le heche demaciada miel y sabia asqueroso , y Wú se comio todo el chocolate y dejó su pancake - dijo Tony mientras papá y yo reíamos al recordar lo que había pasado ese día.

- ¿Qué hice yo? ¿Qué hice para tener una familia tan inútil? -todos reímos.

- Y así de inutiles nos amas -dijo papá dandole un tierno beso en su mejilla.

- ¡Ay que tiernos! - dije yo.

Tony mordió mi cuello y le mordí la mano.

- ¡Auch! - se quejó.

- A mi me dolió más , estúpido mordiste mi cuello -le pegué en la pierna.

- Imbécil - dijo él , pellízcandome una nalga.

- Gay - le pise los dedos del píe.

- Un pancake menos para ustedes , y más para nosotros - dijo nuestra madre con su rísa burlona.

- No es justo - se quejó Tony.

- Si lo es , cuatro para nosotros y tres para ustedes - dijo mi padre.

- Te dire Antonio por un mes - dijo Tony.

- Y yo le dare tu tortuga al perro , si lo haces - dijo mi madre.

- Esta bien , cuatro pancakes para ustedes y tres para nosotros.

- No , tres para ti y cuatro para mi también , yo no he hecho nada - me quejé.

- Wú tiene razón , ella no ha hecho nada - dijo mi padre.

- Pero me mordió la mano y me pisó los dedos del pie - se quejó Tony de nuevo. Este imbécil.

- El me mordió el cuello y me pellízco una nalga - me quejé yo.

- ¡CESAR ANTONIO! ¿Qué te he dicho de pellízcarle las nalgas a tu hermana? - mi madre frunció el ceño.

Mi Campeón » Vic Fuentes « (EDITANDO)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora