Capítulo XXXI: ¡El DigiSpirit del Fuego Está Dañado!

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     Habían intentado que Tai se animara con todos los medios posibles pero él había entrado en un estado de aletargamiento, parecía estar suspendido en un vacío que le impedía moverse, hablar o reaccionar ante cualquier estímulo.

     T.K y Masaru habían ayudado con la herida de Taiki, le habían vendado la cabeza y el chico se encontraba descansando sobre una improvisada cama hecha de hojas. Shoutmon no se había separado de él y los poderes de Cutemon no habían podido curar lo suficiente su herida para que pudiese despertar.

     En vista de que no podía hacer nada por su amigo Taiki, Cutemon se encontraba usando sus técnicas especiales de curación con Takuya, que seguía inconsciente y rodeado de su DigiCode. El grupo se encontraba terriblemente desanimado, como si la derrota que acababan de pasar se cerniera sobre ellos como un terrible manto de angustia y temor.

     Karminmon había salido con Mervamon y Beelzebumon varias noches en busca de Takato Matsuki, el último All Star que faltaba. Sin embargo, no lo habían encontrado aún.

     Taiki despertó el segundo día luego de la batalla contra Taichi y Zero. Abrió los ojos y al ver a su compañero Shoutmon junto a él sonrió y dijo con voz débil:

     —Shoutmon… Qué bueno que estás bien…

     —Taiki… —Shoutmon también sonrió—. Eres un idiota, ¿por qué hiciste eso?

     —No podía dejarte correr ese peligro —sonrió Taiki e intentó levantarse.

     Cuándo se incorporó, tuvo que sostenerse del hombro de Tagiru para no tropezar, porque seguía demasiado débil.

     —Taiki, deberías descansar —dijo Masaru desde un rincón.

     Taiki negó con la cabeza y cruzó el escondite hasta el sombrío rincón donde estaba Tai, que tenía la mirada agachada y ambas manos entrelazadas frente a él, como si estuviese orando o algo parecido. Taiki se coloco de rodillas frente a él y le puso una mano en el hombro, diciendo:

     —Animo, amigo.

     Tai levantó la vista. Para sorpresa de Taiki, no lloraba ni nada parecido.

     — ¿Estás bien, Taiki? —Preguntó Tai como si no quisiera hablar de la muerte de WarGreymon—. El golpe de ese Digimon te dejó muy herido.

     —He pasado por cosas peores —sonrió Taiki—. ¿Cómo estás tú, Tai?

     —Estoy bien… —mintió Tai.

     Taiki quiso decir algo, pero en ese instante Cutemon anunció:

     — ¡Takuya despertó-kyu!

     Taiki y Tai corrieron a comprobarlo por sí mismos. Los Heroes Legendarios que se encontraban ahí reunidos formaron un corro al rededor de Takuya. Incluso Kira estaba ahí.

     — ¿Estás bien, Takuya? —preguntó Masaru.

     Takuya se incorporó y les sonrió a sus amigos. Se sacudió el polvo de la ropa y le guiñó un ojo a Kira, ella se sonrojó.

     —Estoy como nuevo —anunció sonriente. Luego se arrodilló frente a Cutemon y le sonrió—. Muchas gracias por ayudarme, Cutemon.

     — ¡No fue nada-kyu! —dijo Cutemon sonriente.

     — ¿Qué era esa luz que te rodeaba mientras estabas herido, Takuya? —preguntó Kira.

     —Era el DigiCode —dijo Takuya despreocupado—. No es gran cosa, me ha pasado en batallas anteriores.

     Takuya intentó dar un paso hacia adelante, pero se quejó de un dolor y cayó de bruces. Rápidamente, Taiki y Tagiru lo ayudaron a levantarse.

     — ¿Estás bien? —dijo Taiki apurado.

     Sin embargo, Takuya no respondió. Para comprobar que realmente estuviera bien, intentó Digievolucionar. Cuando invocó el DigiSpirit de Agunimon, recibió algo semejante a una terrible descarga eléctrica que lo hizo gritar y caer al suelo.

     —Me lo suponía… —dijo Karminmon mientras Taiki auxiliaba a Takuya.

     — ¿Qué suponías? —dijo Mervamon.

     —Los DigiSpirits de Takuya Kanbara… —dijo Karminmon—. Ese ataque que sacó su DigiCode tenía como única finalidad provocar un daño en Agunimon.

     — ¿Dices que…?

     —Los DigiSpirits están dañados —anunció Karminmon.

     — ¿Dañados? —Takuya sintió que su mundo se derrumbaba.

     —Eso significa que… —por primera vez Taiki no sabía qué hacer—. ¿Takuya no podrá Digievolucionar de nuevo?

     —Intentarlo sería una misión suicida —respondió Karminmon.

Digimon A.D.N AdventureDonde viven las historias. Descúbrelo ahora