Digimon A.D.N Adventure

Capítulo L: ¡Una Nueva Digievolución! ¡FairyKarminmon Nace de la Amistad!

     — ¿Cómo que esa inútil de Karminmon Digievolucionó?

     Clarisse iba sobre el lomo de Mastermon y hablaba hacia la pantalla de su Digivice. Estaba furiosa. Detrás de ella iban Yuu Amano y Kouji Minamoto, atados con aquella cuerda de coloridos trapos de colores. Del Digivice de Clarisse salía la voz de Gabo el Gabumon.

     — ¡Así es! ¡Karminmon Digievolucionó en Justicemon y dejó mal herido a Taichi y Zero! —Gabo se escuchaba preocupado—. ¡Necesitamos que vuelvas cuanto antes!

     — ¿Qué vuelva cuanto antes? —dijo Clarisse más enfurecida—. ¡Estoy haciendo algo importante aquí, inútil!

     — ¡Pero Taichi te necesita! —Dijo Gabo—. ¡No sé si pueda resistir más tiempo!

     — ¡Hazlo! —Ordenó Clarisse—. ¡No me importa cómo, pero quiero que lo mantengas vivo!

     Diciendo esto, Clarisse presionó un botón de su Digivice y la voz de Gabo se apagó. La chica soltó un bufido y habló autoritariamente:

     —Mastermon, tenemos que volver cuanto antes al Digimundo. Si no llego antes de que sea tarde, mi Obscuridad se desvanecerá de su corazón y no podré seguir controlándolo.

     —Entendido —dijo la grave voz de Mastermon—. Iremos al Digimundo entonces…

     Clarisse levantó su Digivice y presionó un botón para hacer aparecer un mapa holográfico de la zona sobre la cual viajaban.

     —Hay una Puerta hacia el Digimundo al norte de este lugar —dijo Clarisse—. Pero… —miró a sus dos prisioneros—. No puedo permitir que ustedes se queden aquí…

     — ¡Veamos como lidian con esto, Heroes Legendarios!

     — ¡No te atrevas, Rei!

     Del Digivice de Rei salió un potente resplandor de color negro que se dirigió a toda velocidad hacia Tagiru. Taiki tuvo que lanzarse para proteger a su amigo, al mismo tiempo que DivineD'Arcmon arrebataba el Digivice de Rei de su mano, provocándole un rasguño al chico.

     — ¡Estúpido ángel! —Soltó Rei—. ¡Devuélveme mi Digivice!

     Sin embargo, DivineD'Arcmon presionó con fuerza el Digivice y este se partió en pedazos. Sin embargo, Rei no fue liberado de aquella obscuridad. Se veía tan enfurecido que parecía que su maldad no era provocada por la influencia de Clarisse.

     — ¿Porqué no vuelve a la normalidad? —se extrañó Natsumi.

     —Eso significa que la única forma de acabarlo es… —dijo Taiki mientras seguía cuidando de Tagiru en el piso.

     —Matarlo —dijo T.K y miró a DivineD'Arcmon—. No tenemos otra alternativa, DivineD'Arcmon.

     —Entiendo, T.K —dijo DivineD'Arcmon y con un fluido movimiento hizo aparecer una flecha hecha de luz—. ¡Flecha de Luz Divina!

     DivineD'Arcmon lanzó la flecha hacia el corazón de Rei, despiadadamente. T.K retrocedió un par de pasos, eso era demasiado para él. ¿Acaso los Digimons Angelicales eran tan despiadados cuando se les ordenaba ser así?

     —Será mejor que vayamos a buscar a Taiki y los demás —dijo Tai y miró a Takuya—. ¿Estás bien, cierto?

     —Te acompañaré… —dijo Takuya e intentó acercarse a Tai, sin embargo ni bien dio un paso, tropezó soltando un gemido de dolor.

     — ¿Estás bien, Takuya? —dijo Kira atrapándolo para que no cayera.

—Creo que el golpe de Zero fue muy fuerte… —dijo Takuya sosteniéndose del hombro de Kira—. Tendré que descansar un poco.