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—harry no quiere abrirme la puerta desde que tú viniste a verlo. —louis le miró algo confundido a Denis— No sé que le habrás dicho para que no quisiera hablar ni conmigo, ni con nadie...

Louis simplemente había recibido una llamada de parte de Denis para que asistiera al hotel nuevamente, pensando que el rizado le había hecho alguna petición con respecto a algún tipo de medicamento. Pero para su sorpresa esto era algo de otro nivel.

—sinceramente no le dije nada. —admitió— Sólo que no puede intentar sacar la voz, ni mucho menos andar paseándose por la ciudad cuando debe estar en reposo... pero nada más.

—Harry simplemente no me contesta, sólo me dijo que quería más medicina. —louis asintió— Por eso también te he llamado... Pero no lo sé, me parece extraño que él no quiera hablar con nadie cuando puede conversar a través de mensajes con nosotros. ¿no es parte de todo eso?

—síntomas no son, pero puede que Harry sienta algo de presión con respecto a su carrera y sólo quiera cuidarse. —su manager asintió dubitativo— Quizás Harry sólo quiere espacio para si mismo.

—¿y tú no puedes intentar hablar con él? —el ojiazul hizo una mueca— Vale, sé que es algo insoportable pero estoy preocupándome por él...

—lo intentaré... —Denis asintió y se puso de pie para que Louis le acompañase a la habitación del rizado.

—gracias, créeme que te agradeceré enormemente si logras hablar con él. —habló el manager para luego mirar como el más bajo cargaba su pequeño pero usual maletín.— Incluso podría pagarte por ello.

—esperemos que me hable. —susurro el ojiazul cuando Denis se detuvo frente a la puerta del rizado.

—¡harry! —golpeo la madera— ¡soy yo Denis! ¡ha venido Louis! ¡quiere hablarte! —exclamo y el ojiazul miro al manager del ojiverde para luego ver cómo la puerta comenzaba a abrirse luego de un par de minutos.

Denis simplemente no podía entender como el cantante podía abrirle la puerta cuando se trataba del doctor que odiaba, pero cuando él lo llamaba nunca atendía. Sinceramente se sintió insultado. 

  — vino a verte el doctor... —mintió Denis para luego salir de allí algo molesto. Louis sólo vio como el manager de Harry se iba y los dejaba solos, para después girarse a ver al rizado que parecía cansado. 

  — hola. —le sonrió el doctor y Harry asintió abriéndole la puerta para dejarle pasar. 

El cuarto del cantante parecía un desastre, estaba completamente sucio y tenía un par de cajetillas de cigarrillo esparcidas por la habitación por lo que Louis le miró con el ceño fruncido directo a regañarle. 

— no puedes fumar, era obvio Harry. —el rizado asintió y tomó las cajetillas para mostrarles que estaban selladas.—  Vale, sólo te lo recuerdo. —el rizado asintió tirándose al sofá para luego cerrar los ojos y Louis se quedó de pie mirándolo. 

Por lo que luego de un par de momentos luego de que Harry se dignase a mirarle, el rizado tomó una pequeña pizarra que le había traído Denis el día anterior, para comenzar a escribir con una caligrafía particularmente correcta. 

"¿qué te trae por acá? Supongo que vienes porque me traes más de tus increíblemente "alentadoras" palabras... " —el ojiazul leyó eso y suspiró pesadamente para negar posicionando su maletín al centro sosteniéndolo con sus dos manos.

—no... —le miró y Harry puso sus manos tras su cabeza para mirarlo—   Vine porque Denis esta preocupado por ti, porque dijo que estabas algo depresivo... —el rizado bufó sentándose en el sofá para comenzar a borrar lo antes escrito para luego volver a escribir. 

INEFABLE (l.s.) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora