20

5.5K 511 117
                                    

El ojiazul llevaba prácticamente más de dos días esperando en el hospital que le dieran el alta a Harry, pero no podían hacerlo hasta que todo dentro de su cuerpo estuviese al cien por ciento recuperable. Y era de alguna forma bueno tener que esperar, porque Louis al menos quería que prontamente se recuperara. 

Sí Louis le había pedido a Denis que lo dejase quedarse con Harry en el cuarto. El dormiría en el sofá si era necesario, pero no quería alejarse del rizado. Quería que supiese que estaba con él. Incluso hasta le dio la comida cuando era la hora adecuada.

Harry estaba feliz de verlo allí con él. A su lado. Y parecía un verdadero sueño, era como si su accidente de alguna forma le hubiese hecho la ayuda necesaria como para que ambos estuviesen unidos. 

Joder, el cantante verdaderamente amaba a Louis. Sobre todo ahora que lo veía ahí con él. Sabía que no se había equivocado en el momento que decidió besarlo por primera vez. Esta vez el amor había aparecido en su vida y no dejaría que se volviese a escapar tan fácil. 

Pues, quería ver esa sonrisa siempre. Sobre todo escuchar su risita nerviosa cada vez que le mantenía la mirada fija. Además quería siempre ver su mirada azulada puesta en él. En verdad lo quería allí con él. Y lucharía contra todo si eso era posible, esta vez no se quedaría de brazos cruzados.

Porque entendió que tal vez no podía vivir sin el ojiazul. 

    —no me mires así... —pidió el ojiazul sonriendo avergonzado cuando Harry estaba recibiendo la cucharada de su postre de frutas. 

   — te miro igual que siempre...  —dijo sincero y Louis rodó los ojos. Harry supo que amaba ese movimiento típico del ojiazul. 

    — mentira. —dijo revolviendo la fruta, para luego mirar a Harry que mantenía su sonrisa coronada por hoyuelos en sus mejillas —  Me miras como si quisieses decirme algo. 

Harry soltó una carcajada pues sabía que quería decirle algo. Y Louis ya conocía sus modos, sus gestos y sus palabras sin pronunciarlas. Era esa conexión inefable que tenían ambos que los hacía especiales. 

— me alegra saber que estas conmigo... acá... —le confesó y Louis sonrió viendo la fruta para luego mirarle. — en verdad no pensé que te volvería a ver. 

— yo igual lo pensé en un momento. —dijo sincero, algo apenado y Harry acercó su mano buena hasta Louis para tomarle la mano. 

— pero acá estamos, ¿no crees?  —Louis sonrió mirándole, para luego asentir.  —  Todo se solucionará. 

— tu fans no me vieron al ingresar al menos. —Harry asintió escuchándole —  Denis me ayudo con eso...

— Espero que nadie del hospital haya filtrado alguna imagen tuya, pues no faltan los chismosos. — el ojiazul asintió dubitativo. 

— ¿crees que eso sea posible? —el rizado asintió. 

— si, esperemos que no. —suspiró —  De hecho la última fotografía que vi tuya fue en el hospital que tu trabajabas, habían paparazzis allá. —Louis abrió los ojos incredulo — Luego de eso yo me fui al bar, estaba molesto. 

— ¿molesto por qué? — el rizado negó —  ¿por qué me tomaron fotografías? 

— no, osea sí... —suspiró —  Pero tenía celos. Celos de un muchacho que aparecía contigo en esas fotografías... parecía alguien de allá en el hospital. 

— pero... ¿cómo era? — preguntó riendo y Harry dejo fruncido su ceño. 

— no recuerdo bien, pero era alto... más alto que tú. —dijo algo celoso recordando las fotos. —  Parecía doctor. 

INEFABLE (l.s.) TERMINADADonde viven las historias. Descúbrelo ahora