Todo Por Tu Amor [MEJIBRAY]

¿Donde estabas?

Koichi se despertó en casa de su padre otra vez, había comenzado a ir más seguido para ocultarse a pensar, a dormir, a romper cosas. Básicamente a explotar en voz alta.

Sintió entonces el olor a alcohol de su propio aliento, y un par de botellas rotas en el suelo además de algunas cosas que ya no sabría como decir qué fueron.

Encendió su móvil por si es que aparecía algún mensaje de Meto, y se dirigió a tomar una ducha. Escuchó el sonido de las notificaciones desde lo que era su antiguo baño privado de adolecente, así que apuro un poco más su tarea.

Será Meto, quizá me pida que lo vea para hablar, ojalá sobre lo que le escribí, aunque ya han pasado unos días, bueno, hoy es un nuevo día y quizá...

Ilusionarse es gratis.

Al ver la pantalla su mandíbula se desencajó, habían tres mensajes, pero ninguno de Meto.

Corazón, buenos días ¿dormiste bien?
08:03 a.m.

¿Ya te olvidaste de mí? No me descuides que me pongo celoso, eh~~
08:24 a.m.

Oye, mas te vale que vengas por mi hoy. Di que siiiiii~ <3
08:46 a.m.

Era Minpha, otra vez.

Se supone que habían llegado a un acuerdo con respecto a los mensajes y todo eso de poco más que parecer una pareja real. Pero Minpha no entendía, nunca entendía.

Decidió enviarle un intento de disculpa, un simple...

Lo siento, hoy trabajo ¿recuerdas? Soy un adulto y tu aún no.
09:32 a.m.

Tal vez un poco descortés, pero en ninguna de sus respuestas hacia Minpha era muy cariñoso, tampoco había una razón para eso. ¿Había alguna razón para algo en su vida? Pareciera que no a estas alturas, pero siempre hay alguna cosa -persona-hace que siga.

Se distrajo en el camino al trabajo fijándose en las demás personas de la calle, era una costumbre mirar el cabello de los demás. Siempre. Hasta que divisó una cabellera platinada inconfundible.

-¡Jirafa!

-Hola Mia. -

El rubio se notaba especialmente de buen humor, irradiaba una especie de aura positiva. Koichi retrocedió un poco en cuanto estuvieron muy cerca.

-¿Qué pasa? Tan lúgubre que te ves, si ni te has puesto tanto maquillaje como siempre.

Era cierto, a penas y su piel cargaba con una desganada capa de base líquida y un poco de delineador y brillo labial de lo más sutil. Para nada el Koichi normal.

-Supongo que se me ha pasado arreglarme esta mañana, me he quedado dormido. -

-Mmh... ajá, ¿no quieres venir al departamento cuando salgas? Tsuzuku y yo no tenemos planes y va a ser algo aburrido. Además podríamos hablar, por que eso de "me quedé dormido y por eso tengo cara de que mi vida es una mierda" puedes guardarlo para cuando llegues tarde a la escuela, cariño. -

Mia siempre pillando a la gente cuando tienen un problema, será porque no quiere plantearse sus propios debates mentales sobre sus sentimientos hacia Tsuzuku que está claro que existen.

-Vale, vale. ¿Van a estar en casa todo el día? La verdad pensaba en salir antes. -

-Yo no pero Tsuzuku si, si quieres quedarte con él a solas un rato pues ve. Yo llegaré en la noche. -y desvió la mirada.

-¿Mia-chan regresando tarde a casa?. -

-Dejame que yo también tengo asuntos que atender, ahora ve a trabajar. -