La obra de J. K. Rowling está llena de referencias a la historia, a los mitos, a las leyendas y a la literatura. Por tanto, a través de ella, se abre un excelente camino para llegar a los orígenes de esos seres mágicos o al misterio que encierran su...
La marca tenebrosa es el temible signo de Voldemort. Tras la Copa Mundial de Quidditch en Cáliz, <<algo grande, verde y brillante salió de la oscuridad [...]. Se trataba de una calavera de un tamaño colosal, compuesta de lo que parecían estrellas de color esmeralda y con una lengua en forma de serpiente que le salía de la boca>>. El símbolo también aparece en el brazo de los secuaces de Voldemort, haciéndose más visible cuanto más fuerza adquiere Voldemort y cuanto más cerca está.
La marca tenebrosa es la versión de Voldemort de la marca del Diablo, una noción de la Edad Media. Según un demonólogo medieval, <<el Diablo les pone la marca, en especial a aquellos de cuya lealtad sospecha. La marca varía en forma y tamaño; a veces, es como el pie de un sapo, otras como una araña, un perrito o un lirón. Está impresa en las partes más secretas del cuerpo: los hombres pueden tenerla debajo del párpado, o en la axila, los labios o el hombro; las mujeres suelen tenerla en los senos o en sus partes íntimas. El sello que estampa estas marcas no es otro que la misma pezuña del Diablo>>.
Los cazadores de brujas a menudo identificaban las marcas de nacimiento, las verrugas y otras manchas de la piel como marcas del Diablo. Las presuntas brujas eran rasuradas por completo para poder examinarles todo el cuerpo.
Aparte de la marca del Diablo, los cazadores de brujas buscaban <<marcas de bruja>>. Éstas eran menos graves (sólo la marca del Diablo indicaba un pacto especial, como el lazo que une a Voldemort y a los mortífagos), pero aun así podían ser fatales para la acusada. Se creía que todas las brujas tenían una. Cualquier mancha, como un lunar o una peca grande, podía identificarse como tal.
A veces, se decía que las marcas de bruja eran puntos de la piel que no sangraban y eran insensibles al dolor. Para hallarlas, los cazadores pinchaban con punzones a las presuntas brujas. Con frecuencia, éstos sólo recibían su paga si desenmascaraban alguna y muchos de ellos hacían trampas. Por ejemplo, usaban punzones especiales, similares a los cuchillos trucados que hoy emplean los prestidigitadores. El acerado filo se introducía en el mango al hacer presión sobre él y, de esta forma, no perforaba la piel.
* <<Morsmordre>>, la orden para que aparezca la marca tenebrosa, significa <<muerde la muerte>> en francés, una invocación apropiada para los mortífagos.
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* Se usaban punzones como éstos para pinchar a las presuntas brujas y detectar la marca del Diablo. La ilustración representa un punzón trucado. La punta se introduce en el mango.
