El novio de mi mamá. 《Jeffrey D. Morgan》

Extra 6

Suspiro aliviada cuando veo mi madre marcharse con Bella, si, estaba de vuelta en mi casa. Era por un caso especial, Ian se iba a casar! Si, mi mejor amigo se iba a casar y volvimos a nuestra ciudad, tanto él como yo. Era tan raro volver, él para casarse y yo con mi familia.

Crecimos tanto, maduramos, pasó todo tan rápido que parece ayer cuando Ian insinuaba que Jeffrey estaba bueno y que algo prohibido era tentador, justo aquí, sobre mi cama.

--¿En que tanto piensa esa cabecita? –escucho a mi marido y lo miro, está recostado sobre el respaldo de la cama leyendo un libro. Es tan rutinario esto, de acostar a Nico y hacer a Bella dormir, él se acusta a leer  un rato y charlamos, a veces yo me pongo a leer también o sino… ya saben como termina la cosa, no?.-

-- En Ian, no puedo creer que ese puto se vaya a casar –rio y Jeffrey también lo hace.- Digo, siempre nos imaginábamos viajando a esta edad y mira ahora, yo casada con 2 hijos y él por casarse y por adoptar uno.

-- Muy bien casada… -me dice y yo asiento, me muevo hasta meterme por debajo de sus brazos y estampo mis labios con los suyos. Él deja el libro en la mesita de alado e inmediatamente sus manos aprietan mi trasero, juntando más aun nuestros cuerpos. Gimo  sin poder evitarlo, y él me mueve hasta que quedo sentada sobre su regazo. Mis manos se dirigen a su pelo y tiro un poco, el toma como una señal para empezar a torturarme. Besa mi cuello, mi oreja, mis hombros, hasta llegar a mis pechos. Mi camisón vuela y quedo solo con mis bragas, sé que no van a durar mucho, a Jeffrey le encanta desnudarme por mientras que él sigue vestido. Saco su camiseta y él me da la vuelta y se coloca encima, como puedo bajo sus boxers y su short de dormir. Sus dedos rozan mi centro y yo me remuevo debajo de él, siento su risa.-

-- Deja de torturarme –digo un poco agitada.-

-- ¿Qué quieres? –me pregunta divertido.-

-- Que… -escucho unos golpes en la puerta y maldigo.- ¿Q-qué? –grito y siento la risa de Jeffrey en mi oído.- Callate –susurro.-

-- No encuentro la mamadera de Bella –grita mi madre por el otro lado y yo cierro mis ojos maldiciendo.-

-- Creo que está… -miro alrededor y empujo a Jeffrey un poco, él rie pero aun así se sienta sobre sus pies y me mira divertido, ¿Qué tanto le divierte? ¿qué mamá me cortara la calentura?. Le hago una seña para que se calle y sin poder evitar miro su miebro completamente erecto.- está… -Jeffrey alza las cejas.- en su bolso, en la cocina.

-- Voy a buscar, gracias! –dice mamá y yo vuelvo a apoyar mi cabeza en la almohada.-

-- ¿Y? –pregunto.-

-- ¿Y qué?

-- ¿Vas a seguir o que…?

-- ¿Qué quieres que haga?

-- Que folles  tu esposa…–me muerdo el labio.- ¿Hm amor?

-- Diablos Alex! –vuelve a posicionarse sobre mi y yo bajo mi mano, tomo su miembro y escucho su risa.- Tienes las manos heladas mujer! –se queja y yo con mi otra mano le doy un manotazo.-

-- Estás enfriando todo…

-- jamás mi amor, nuestra llama jamás se apaga.