El novio de mi mamá. 《Jeffrey D. Morgan》

Extra 10

Doy vueltas por la sala pensando, ya se pasó una hora de nuestra discusión y Jeffrey se encerró con Nico en la habitación. No podemos hacernos esto, no. Tenemos que resolverlo conversando, como dos adultos.

Camino decida a buscarlo, veo que el va entrando a nuestra habitación y lo sigo. No me doy cuenta que estoy llorando hasta que siento mis lágrimas caer por mi mandíbula.

--Jeffrey! –sollozo y el me mira. Camino hasta él y lo abrazo.- Ni se te ocurra pensar de nuevo que lo mejor es estar separados –digo furiosa.- te amo y ni siquiera puedo pasar una noche sin ti –confieso.- No me dejes

-- No te estoy dejando, mi amor –sus brazos me rodean.- Dijiste que necesitamos pensar y tienes razón.

-- Pero no estar lejos –lo miro y el asiente.-

-- No ire a ningún lado entonces –besa mis labios.- No llores.

-- Lo siento –me separo y el limpia mis lágrimas con sus pulgares, suelta una risita y yo también lo hago.- Lo siento…

-- Sh, deja de decir lo siento –besa mis pómulos y vuelve a abrazarme.- Tienes el costumbre de pedir perdón cuando no es tu culpa.

-- Lo siento

-- Alex -ríe.-

***

Sin disimulo alguno miro a Jeffrey acostado, tiene sus lentes puestos y está leyendo una colección de poemas, en realidad, me está leyendo algunos. Se ve malditamente bien, demasiado. Al estar sentada a su lado pero de frente a él, puedo verlo descaradamente.

--Me está dejando nervioso que me mires así –dice sin despegar la vista de su libro, su mano recorre mi pierna hasta llegar a mi muslo, donde reparte caricias.-

-- Siempre me pregunto como un hombre como tú, se fijó en mi… -sonrío al recordar nuestras miradas y roces.- Era una adolescente rebelde

-- Y yo me pregunto como una niña como tu, se fijo en un hombre mayor…

-- Te das cuenta que si yo fuera un día antes para el casamiento de mi hermano, no estaríamos casados –pongo mi mano en su pecho y acaricio.- digo, no tendría tiempo de fijarme en ti, zorrear con el novio de mi mamá ni de enamorarme

-- ¿Zorrear?

-- No literalmente. –pongo mis ojos en blanco.-

-- Es verdad, aunque si te conociera un día antes, me volvería loco por ti igual –yo lo miro.- Pero no tendría tiempo de enamorarme perdidamente de ti.

-- Es impresionante como un simple detalle podría haber cambiado toda nuestra historia –inconscientemente trazo figuras en su pecho, el rie por las cosquillas.-

-- ¿Qué cosa te atrajo de mi? –pregunta divertido.-

-- No sé –respondo y el alza las cejas.- Me gustaba como me mirabas, me dabas confianza y seguridad –me encojo de hombros.- Cuando nos besamos, me gusta que seas un hombre experiente, que tiene confianza, que no duda en hacer las cosas. Y eso me enloqueció, te juro que nunca en mi vida había confiado en un hombre en tan poco tiempo, los tipos de mi edad eran un asco, querían coger solo por hacerlo, ¿Qué pasa con disfrutar y repetir?

-- recuerdo nuestra primera vez –dice riendo.- Me mostraste las tetas

-- Jeffrey! –carcajeo y le pego un manotazo.- Tu no hacías nada, tenía que actuar

-- Eras la hija de mi novia, ya bastante la había cagado con besarte –se encoje de hombros.- Pensaba que tu, eras distinta, no sé… –acaricia mis labios.- Hasta que hicimos el amor, y vi como te entregaste, como si nos conociéramos hace mucho más tiempo, supe que eras diferente. Y que estaba loco por ti.

-- Eres un dulce –susurro y beso su sien. Mis dedos corren su bóxer dejando a la vista sus vellos púbicos.- Y un esposo perfecto, cariñoso, atento, respetuoso y lo más importante, saber usar esto –señalo su miembro.- perfectamente.

-- Alex! –carcajea pero enseguida quedamos quietos cuando escuchamos una voz.-

-- Mamá –dice Nico parado al lado de la puerta.-

-- ¿Qué pasa amor? –pregunto y el camina hacia nosotros, se sube arriba de la cama y yo inmediatamente saco la mano de la zona baja de Jeffrey.-

-- No puedo dormir –susurra y yo palmeo mi lado.-

-- ¿Quieres el medio o el lado de mamá? –pregunto y Jeffrey deja su libro.-

-- El lado de mamá –chilla y al tener nuestra cama contra la pared, el se acuesta en mi lado, contra el ventanal. Yo me acomodo en el “medio”, aunque prefería así, se me hacía imposible domir sin tener contacto alguno con Jeffrey, y cuando Nico dormía en el medio de nosotros, pasaba gran parte de la nocha despierta, necesitaba el calor de mi esposo para estar tranquila. A veces mi mamá necesitaba de su trabajo y el tenía que viajar para allá, entonces era una tortura dormir sola, aunque tenía a Nico, necesitaba las caricias de Jeffrey.-

-- ¿Estas bien? –escucho su voz ronca en mi oído y siento sus brazos rodearme por atrás, con una de mis manos acaricio a Nico y con la otra tomo la mano de Jeffrey.-

-- ¿Por qué no estaría? –pregunto y el apoya su bulto duro contra mi cadera.- Jeffrey! –susurro y maldigo no haber llevado a Nico y quedarme en su habitación un rato hasta que durmiera. Ahora tengo que dormir caliente.- Controlate.

-- Controlate tu que estas tirando tu culo contra mi pene –me susurra riendo y yo le pego un manotazo, intento separarme pero el no afloja el agarre.- Quedate quieta. Vas a despertarlo.