¿¡Por qué siempre en los momentos menos indicados pasaban estas cosas!?en un momento de besos apasionados y toqueteos algo subidos de tonos entre Mia y D'antonio, el hermano del mismo había cruzado el umbral de su oficina encontrándose con esta escena poco convencional para una oficina tan seria y con tantos protocolos. ¡Había encontrado a su hermano con su secretaria!
Esto estaba mal, muy mal.
Estaban rompiendo reglas, muchas reglas y todas juntas. Los protocolos se los podían meter en el culo, diría D'antonio si estuviesen solos... si tan solo hubiesen estado solos todo sería distinto. Cuando estaban solos él era un hombre distinto, era tan dulce como duro, era una parte que no veía tan seguido, cosa que había podido corroborar momentos antes con su madre.
-¡DANTE!- Dijo su hermano expectante y con una sonrisa en su rostro seguida de una carcajada
¿Dante? nunca había escuchado el primer nombre de D'antonio, a pesar de que lo conociese esta era la primera vez de Mia en escucharlo desde otros labios
-Enzo...- dijo esta vez D'antonio con una mano acariciando su cien, como si se lo esperase de parte de él.
-Yo..ehh- Mia no logro terminar de decir una frase que se echo a "correr" podríamos decirlo, solamente paso del hermano de su jefe y salió de la habitación lo mas rápido que podía antes de que el mismo la frenase.
-!Con que te tiras a la secretaria hermanote! ¿no sabías que existe algo llamado hotel...?
-Solo callate Enzo, que haces aquí?- tan duro como una piedra, tan seco como siempre...
-Hermano venía por los papeles de todos los meses, no quería encontrarte en tal... situación- una risa se escapó de sus labios que se vió apagada por la mirada y el semblante serio de su hermano mayor, todo en el demandaba seriedad.
-Voy a ser sincero contigo y no quiero ni siquiera que mamá o papá se enteren, Capisci quello che sto dicendo?-
-Creo que te entiendo fratello- dijo Enzo calmándose y bajando un poco la voz, esto iba en serio.
-Mia, la chica que se fue corriendo ni bien vio tu cara de imbécil, no es una simple secretaria- D'antonio toma aire y sigue hablando -Al principio Mia comenzó siendo un caos, porque comencé investigándola y viendo cosas de su pasado reciente a trabajar para mi, algunas cosas que es mejor no mencionar
-Entiendo...
-No me interrumpas- dijo algo cansado- Pero a medida que me acercaba, a medida que ella me miraba y me hipnotizaba caí en su juego. Verás, ella no es una chica cualquiera. A grande rasgos, hermanito, me encuentro en una situación que me es imposible de contener- dicho esto D'antonio suspiró, no lo podía contener...- Y creo, Enzo, que me estoy enamorando nuevamente, con todo lo que eso significa para mí.
hubo un momento de completo silencio, la mirada de D'antonio se había perdido en algún rincón de esa oficina que estaba arreglada con esos colores tan intensos y añejos, su semblante cayó rendido y ahora estaba calmado. Mientras que su hermano lo miraba fijamente, tal vez sim poder creer lo que su hermano había dicho. El hombre que se hacía llamar Dante D'antonio, por el que tantas mujeres caían rendidas, por el que tantos hombres envidiaban, el hermano serio que siempre estuvo allí para él, se había abierto completamente, o eso parecía.
-Hermano...
-Los papeles- D'antonio cortó totalmente la conversación entregándole los papeles
Una mirada triste cargada de resignación fue la que puso Enzo- Algún día cambiaras, hermano, y eso no va a estar mal como tu crees.
Dicho esto se fue, cerrando la puerta de la oficina pero también el corazón de su hermano.
De camino a la salida se encontró con una Mia algo asustada, mas bien avergonzada llenando unos papeles, la cual al verlo se puso más roja que la sangre. Una sonrisa se aproximó por las mejillas del hermano de su jefe, algo en ella le resultaba bueno, tranquilo.
-Cuídalo Mia, hazme el favor
Sin comprender las palabras Mia solo asintió, ¿Qué había pasado allí adentro? todo era tan confuso en estos momentos, no había podido terminar de analizar lo que sucedió con la madre de D'antonio que ahora el hermano le decía que lo cuidase, ¿Qué pasa en esa familia?
Cuando intentó acordarse de Enzo este ya se había marchado por el umbral de su recepción, por suerte que se marchó rápido, diría ella.Por el resto del día no volvió a ver a su jefe, todo pasaba tranquilo, lo único que hizo fue organizar los papeles que Pol le había llevado y atender el teléfono fijo que sonaba cada tanto; un café que había comprado se había enfriado sin que ella lo bebiese y estuvo a punto de ir a recalentarlo, con todo el debate mental que era levantarse a hacerlo, hasta que el reloj de la pared de su lado marcó el horario de salida, y cuando quiso levantarse para recoger sus cosas lo vio a él parado, al final de las escaleras que llevaban a su oficina. Con el saco algo desaliñado y una mirada tan fría y penetrante que la hacía temblar, ¡Y no de la buena forma!
-Dante...ya me estaba por ir, necesitas que organice algu- no terminó de decir las cosas que se dió cuenta que lo había llamado por su nombre, su primer nombre y por primera vez- Lo siento yo..- su mirada bajó totalmente y su rostro, nuevamente, estaba colorado.
-Tranquila Mia, solo iba a pedirte que me acompañases a comer algo, así compartimos algo de tiempo juntos y puedo hablarte de algo importante que surgió estando mi hermano hace unos momentos
¿Algo importante que surgió? si me lo decía de esta forma es algo que tiene que ver conmigo, algo en lo que estoy metida. No puede ser algo que yo haya hecho si no había provocado nada. La intriga de Mia la carcomía por dentro, solo tuvo que aceptar la oferta de ese dichoso almuerzo.
-Esta ben, no veo ningún problema, aguarda que busco mis cosas...
-Te espero en el auto-dicho esto D'antonio se marchó, pero antes de irse hizo algo que dejó paralizada a Mia, le dio un beso en la frente in que ella hiciese nada.
¿Que significaba esto?
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Gracias a todas (Énfasis en ustedes chicas que son mayoría) y todos a los que les está gustando la historia, me anima mucho que el alcance haya subido al igual que los votos y me dan ganas de seguir escribiendo para ustedes esta historia con la que estoy creciendo!. Nos leemos pronto!
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Peligrosa obsesión [+16]
Romance[La atracción debe diferenciarse de la obsesión] Un magnate italiano Una mujer de mirada endiablada Un crimen y pasión en Roma [EDITANDO]