-La Conocí Al Borde De La Muerte.- Camren.

- ¿Qué Tienes?-

A la mañana siguiente, Liam se levantó y se extrañó al no ver a yulia dando vueltas por ahí. Así que fue a su habitación.

-¿Lauren? –dijo Liam tocando la puerta, no tuvo respuesta así que abrió. -¿Lauren? –preguntó nuevamente, caminando hasta donde la ojiverde. Esta sólo se quejó, dima Liam y acarició su frente, pero su temperatura llamó la atención del castaño. -¿Jauregui? –preguntó esta vez más fuerte. La ojiverde trataba de despertarse.

-¿Qué pasa? –preguntó adormitada.

-¿Te sientes bien? –dijo Liam pasando su mano por la frente de Lauren. –estás hirviendo de fiebre.

Lauren se acurrucó nuevamente y soltó un leve quejido. -¡Ah! Mi estómago.

-¡Jauregui estás enferma! –dijo Liam espantado.

-Oh eres un genio. –Contestó sarcásticamente la menor mientras seguía quejándose.

-¿Qué hago? –preguntó desesperado el castaño.

-Apártate. –dijo Lauren levantándose de golpe de su cama y salió corriendo. Segundos después se escuchó que estaba vomitando.

Liam corrió hasta el baño desesperado, se paró frente a la puerta a esperar a Lauren.

Un rato después la puerta se abrió, dejando ver a Lauren mucho más pálida de lo normal.

-Moriré. –dijo en un hilo de voz.

-Debes tomar algo. Debo comprarte algo ¡Pero no sé el qué! –decía aún con su tono desesperado el castaño.

-Contrólate. –dijo seria Lauren sentándose en el sofá para volver a retorcerse del dolor. –Le hablaré a Zayn, no podré ir así.

-iré por tu celular. –dijo el castaño al momento que salió corriendo a buscar el celular de Lauren.

-Dios, Liam parece loco. –dijo la ojiverde para ella misma. Liam iba llegando con el celular. -¿No has hecho un desorden en mi cama por encontrarlo verdad? –preguntó tomando su celular.

-No, bueno, no tanto. ¿Qué hago?

-Ya te dije ¡Contrólate! –marcó un número y espero que contestaran, seguía quejándose del dolor.

-¿Aló? –dijo alguien del otro lado de la línea.

-Dinah! –dijo Lauren.

-¿Jauregui? –preguntó asombrada. -¿Estás bien? Te escuchas mal.

-Estoy mal. –admitió la menor. –Tengo, tengo... nah no sé que tengo. Pero ¡Auh! –dijo tomándose su estómago por un fuerte dolor. –Estoy enferma. ¿Podrías decirle a  Zayn que no podré ir al trabajo?

-Sí, seguro ¿Necesitas algo? –preguntó la rubia un poco preocupada.

-No, descuida, estaré bien. –dijo Lauren sonriendo, o al menos eso intentó. –Nos vemos, mañana estaré mejor lo prometo.

-Bueno, entonces descansa, y que te mejores. –dijo Dinah. -Dile a mi osito que lo amo. Por favor. –agregó con un tono tierno.

Lauren volteó a ver a Liam y comenzó a reír. –sí claro yo le doy tu recado. Adiós Hansen.

-Adiós  Lauren.

Y ambas chicas colgaron. Lauren comenzó a reírse hasta donde el dolor de su estómago se lo permitió. –aay Osito. –dijo haciendo un puchero mientras miraba a Liam.