-¡No Quiero!-

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Después de aquella tarde en el hospital, Lauren tuvo que permanecer 3 días más ahí, ya que tenían que monitorearla y esperar que la herida sanara para poder extraer las puntadas.

Liam y Camila se turnaban para quedarse a cuidar por las noches, los padres de la morena al enterarse fueron corriendo al hospital, Sinuhe le llenó toda la habitación con flores "ni que estuviera embarazada" bromeaba Camila al ver aquellas acciones, le agradaba ver como su mamá le encantaba pasar hablando con Lauren, pero se llenaba de melancolía al recordar que, si no pensaran que es su disque "cuñada" y supieran que realmente es su novia, no la trataría de la misma manera.

Dinah y Zayn también fueron a visitar a la pelinegra, Zayn entendió perfectamente y le dijo a Lauren que hasta que se recuperara por completo volvería a trabajar, que no se preocupara, pues él ya la quería como una hija y la necesitaba al 100%.

Pero la verdadera guerra para la morena comenzó el día que le dieron el alta a la ojiverde.

4 días después de la operación de Lauren.

-¡Jauregui! ¡No me hagas meterte esas verduras a la fuerza! –gritó furiosa la morena.

-¡No me obligarás a comer esa cosa! –respondió el grito la menor.

-¡No me contestes así! ¡Es por tu bien! –dijo la castaña ya sacada de quicio.

-Dios esto es mejor que las novelas de la tele. –bromeó Liam al ver aquel enredo en la cocina.

-Liam, dile que no me haga comer esas cosas. –suplicó Lauren.

-A mí no me metas. –dijo el castaño. –pero, deberías comértelas Laur, es por tu bien. –agregó al ver la mirada fulminante que le regaló Camila. Haciéndolo tragar saliva.

-Vez hasta Liam me apoya. –dijo triunfante la morena.

-¡Claro! ¡Tremenda mirada de revolver que le has dado! –dijo riendo la ojiverde. –No las comeré. –repitió.

-Entonces iré a regresar el árbol de navidad que pensaba ayudarte a poner esta tarde. –dijo Camila encogiéndose de hombros.

-¿¡QUÉ!? –dijo Lauren rápidamente. –Tú no irás a devolver nada. –advirtió poniéndose de pie.

-Esto se pondrá bueno. –dijo Liam sentándose en una silla lejos de las chicas para poder apreciar aquella pelea que se avecinaba.

-Oh sí que puedo. –dijo Camila riendo al momento que Lauren se paraba frente a ella.

-¡No puedes Karla! –respondió Lauren.

-¿No puedo? –retó la castaña. Sacó de su bolsillo una enorme, por lo visto, factura y bajó hasta el pie de la misma. –Si mal leo aquí, dice "Se aceptan devoluciones" –dijo leyendo el papel. –después de 15 días de la compra. De lo contrario no se aceptarán los productos. –agregó sonriendo y guardó el papel. -¿Aún piensas que no puedo hacerlo? –preguntó mirando fijamente a Lauren.

-Eres el diablo. –dijo Lauren negando con la cabeza sin perder su vista en la de Camila. –está bien, tú ganas. – terminó dándose por vencida. Se sentó nuevamente en su silla y con todo el dolor de su alma comenzó a comer aquella sopa de pollo con verduras que la mamá de Camila había preparado para la ojiverde.

-¿Puedo tomar una foto de esto? –preguntó Liam asombrado. -¡Esto es magnífico! –dijo riendo el castaño. – has encontrado la urna de tus zapatos, Jauregui.

-La Conocí Al Borde De La Muerte.- Camren.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora