''Capítulo 12''

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Holi, pues aquí la otra parte de la cita. Espero les guste y no olviden comentar que les pareció. Saben que las Sarangheo mucho :3.



Por Ren:

-Esto—comentó JR antes de besarme, así de la nada. Y por un momento deseé tanto que aquel fuera mi primer beso. Aun si con BaekHo solo había durado unos segundos, contaba como primer beso ¿No?

Sin más, deje mis pensamiento de lado, correspondiendo a aquel dulce y romántico beso. Sintiéndome como toda una princesa, siendo besada por el príncipe azul de sus sueños. Sentía que mis labios se derretirían entre los suyos, mis piernas temblantes como la gelatina. Pero, como era de esperarse, los sueños no duran para siempre. Ya que la voz de un desconocido nos hizo separar.

  -¿JR?—llamó aquella persona desconocida, o al parecer para mí. ¿Quién era él?

-Jasón...—llamó JR de vuelta, ahora nervioso, soltándome lentamente. Viendo correr a ese sujeto a brazos de JR. Por algún motivo yo estaba sorprendido y, a la vez ¿Celoso?

-Mi agúmon, creí que no te volvería a ver—dijo el tipo con una voz cursi y melosa. Una que destruyó mi corazón, ¿Es que acaso, ellos...eran novios? No, no creo, de ser así ¿Por qué JR me habría invitado a salir?

Pero, todo pensamiento se borró de mi mente, al ver como ese tipo besaba a JR en los labios. Así como JR lo había hecho conmigo segundos atrás. No pude hacer nada más que agachar mi rostro y salir corriendo de aquel lugar. Sintiendo a mis ojos cristalizarse y a mis mejillas mojarse debido a las lágrimas que bajaban por ellas.

¿Qué clase de broma era aquella? Estaba visto que una de muy mal gusto. No creí que JR fuera de ese tipo de chicos. Esos que solo quieren jugar contigo. De verdad creí que él era diferente, que era... Pero, de pronto, en medio de la acera, una mano en mi antebrazo me hizo detener.

-Ren...—llamó JR agitado, ciñendo su agarre en mi ante brazo, esto para evitar que pudiese escapar.

-Suéltame, déjame ir —sollocé, intentando soltarme, aunque era inútil ya que JR era mucho más fuerte que yo.

-No, por favor, déjame explicarte. No es lo que parece—dijo con la suplica brillando en sus ojos.

-¿Y que me vas a decir, que yo soy tu nuevo juguete?—pregunté destrozado pero, sin poder despegar mi mirada de sus ojos. Esos que me hipnotizaban.

-Claro que no, tú eres mucho más que eso Ren—comentó haciendo latir mi corazón de un forma muy extraña. Dolía pero, a la vez, sentía como latía con fuerza por sus palabras.—Y sobre ese tipo... Él es mi ex novio pero, la verdad, él ya no me interesa. El único que me interesa, eres tú, conejito. 

-¿Ex novio?—pregunté ahora confuso.

-Sí, ex novio, él y yo ya no somos nada—confesó sincero, pude notarlo en su mirada.

-Pero, entonces... ¿Por que te besó?—volví a preguntar, aún confuso.

-Supongo que él aún siente algo por mí—indicó con una pequeña mueca en sus labios.—Pero, eso no cambia las cosas, el único para mí eres tú, Ren. 

Y de pronto, me tomó por la cintura, atrayéndome hacía él. Volviendo a besarme por segunda vez. Aún si estábamos a mitad de la acera, con la mirada de todas las personas del lugar sobre nosotros. En un instante me propuse rechazarle, apartarle y abofetearle. Negándome a creer sus excusas. Pero, para cuando me di cuenta, ya estaba correspondiendo a su beso.

El beso duró solo unos segundos pero, me fue suficiente, para sonrojarme por completo. Sin más, JR me tomó de la mano, llevándome de vuelta a los bolos. No quería regresar a ese sitio, no quería ver a ese tipo de nuevo pero, tampoco hice por donde negarme.

-Espérame aquí, iré por nuestras cosas, ahora regreso—indicó antes de ingresar, tardando unos diez minutos en salir.—Listo, ya podemos irnos.

-¿Irnos, a donde?—pregunté, observándole ponerse el casco para luego subirse y encender la moto.

-¿Te gustan los helados?—respondió con otra pregunta de vuelta, algo confuso asentí. De igual forma amaba los helados. Sobre todo, por que me traía buenos recuerdos junto a madre y mis tíos cuando era más pequeño. Y cuando mi madre aún vivía.—Entonces vamos.

Nuevamente me entregó el otro casco, no tardando nada en ponérmelo y subir a la moto, aferrándome al estómago de JR. Sintiendo sus abdominales por encima de la camisa. No tardamos mucho en llegar a una heladería. Esta era muy bonita, parecía un sitio bastante romántico, como para parejas.

Nuevamente, al bajarnos de la moto, JR me tomo de la mano, solo que esta vez entrelazo nuestros dedos. Esto hizo que mis mejillas se volviesen a sonrojar y mi corazón a latir con gran velocidad. Luego de entrar, JR me llevo con él hasta la barra, dejándome observar los sabores que habían.

-Buenas tardes y bienvenidos, ¿En que puedo ayudarles?—saludó una amble linda chica, tal vez de unos 20 años, con el cabello largo y negro. Era muy bonita, debía admitirlo.

-Dos helados para comer acá, por favor—ordenó JR con una leve sonrisa, una que lo hacía ver atractivo.

-Por supuesto, ¿De que sabor gustarían sus helados?—preguntó la chica aún con amabilidad. Demasiado diría yo.

-El mío de fresa, por favor—indiqué sin dudarlo, por que el helado de fresa era mi favorito. Desde pequeño, siempre había sido mi favorito.

-En ese caso, serían uno de fresa y, el otro de chocolate—indicó esta vez JR, sacando su billetera y cancelando los helados. Luego de eso esperamos unos minutos hasta recibir nuestros helados, sentándonos en una de las mesas junto a la ventana.—Ren...

-¿Mmm?—pregunté sin dejar de comer mi helado. El cual por cierto, estaba delicioso.

-¿Podrías perdonarme?—preguntó de vuelta, parecía algo nervioso.

-¿Perdonarte, por qué?—pregunté nuevamente confuso por su pregunta.

-Por lo de hace un rato, por arruinar nuestra cita y, por todo en general—respondió serio, lo que me hizo volver a ver el arrepentimiento y suplica en sus ojos.

-Esta bien, JR, te perdonó—dije, viéndole sonreír más tranquilo.—De todas formas, hoy me la pase genial. Para ser mi primera cita, me gusto mucho.

-¿Lo dices enserio?—preguntó de nuevo, con una casta sonrisa dibujada en sus labios.

-Muy enserio—respondí antes de comer otro poco de helado. Observando a JR cambiar su casta sonrisa en una burlona.

-¿De que te ríes?—pregunté serio. ¿Acaso me estaba bromeando o algo por el estilo?

-Tienes un poco de helado en la nariz—comentó sin dejar de reír.

-¿Qué?—pregunté, tomando una servilleta para limpiarme pero, siendo detenido por JR.

-Yo lo haré—indicó JR, antes de estirarse sobre la mesa, llegando hasta mí y besando la punta de mi nariz. Limpiando todo rastro de helado.

No pude evitar sonrojarme, desconociendo la cantidad de veces que ya lo había hecho durante toda la tarde. No me atrevía a mirarle a los ojos, no cuando sabía perfectamente que me perdería en ellos. Por que JR me gustaba, ya no tenía ninguna duda de ello.

''Culpable''Donde viven las historias. Descúbrelo ahora