El Lobo Rojo

19.¿Funcionará?

Ya sabía por donde iba y no me gustaba.

-Sé lo que pasó y a mi tampoco me gustó. Pero lo he pensado y ya que vives aquí...

De verdad iba a decirlo, creo que ahora me siento como en la canción "Cómo te atreves" de Morat. Después de tanto tiempo y todavía sigue insistiendo. Me costó mucho olvidarme de Meg como mi novia, creo que ahora mismo está bien como mi amiga.

-Mira Meg, yo también lo he pensado, pero ahora mismo están pasando muchas cosas y volver a intentarlo en ese estado de emergencia no sería muy buena idea, ¿no crees? - intenté decirle de forma delicada. No quería hacerle más daño.

Meg se quedó un rato callada hasta que al final habló.

-Tienes razón. Olvida lo que he dicho. Ahora tenemos que centrarnos en encontrar a esos tíos con plumas en la cabeza - dijo dolida. Sé que no le había gustado mi respuesta, pero era lo correcto.

-Indios - corregí - Tenemos que buscar a los indios.

-Lo que sea - dijo molesta - América es demasiado grande para buscar en cualquier sitio, tenemos que  hacerlo en un lugar exacto o esta guerra a acabará y nosotros todavía no habremos encontrado ni dónde buscar.

-Puede haber indios en cualquier parte de América, creo que esto se nos va a hacer muy largo - pensé.

Encontrar a la tribu correcta de indios sería como encontrar una aguja en un pajar. Casi imposible. Pero no imposible del todo.

-Tiene que haber un lugar concreto - murmuró Meg por lo bajo.

De repente se me encendió la bombilla e hice lo que mejor se me daba.

-¿Qué haces? - preguntó Meg mientras yo sacaba mi móvil.

Cómo no haberlo pensado antes. Todo se encuentra en Internet. La noche en que todo empezó decidí que mi móvil me acompañaría, nunca me separaba de él y no iba a empezar a hacerlo ahora.

Con sólo encenderlo me saltaron miles de notificaciones de WhatsApp, Instagram y si, Pokémon Go( tuve una mala época con eso). Rápidamente me metí en el buscador y escribí indios en Canadá. Por algún sitio tenía que empezar a buscar, y qué mejor que este.

A Meg no le convencía mucho la idea, pero al final cedió.

-¿Encuentras algo?

-Hay millones de páginas en Internet que hablan sobre indios en Canadá. Tiene que haber una tribu concreta, tendríamos que coger el libro de Maya para averiguar cuál es.

-Está bien. Vamos, se nos acaba el tiempo.

Esto iba a ser muy difícil, y más si Meg sigue molesta conmigo. Nunca la entendí y nunca lo haré.

Buscamos por todos lados hasta que al final encontramos a Maya en los barracones. Esta se sobresaltó algo al vernos corriendo hacia ella como dos locos.

-¿Qué pasa? ¿Han vuelto los "lobos rojos"?

-No - dije respirando entrecortado- Necesitamos encontrar qué tribu exacta es la que poseía la flauta y la mezcla rara, y saber dónde se encuentran.

Sacó el libro y empezó a mirarlo tranquilamente.

Me puse las manos en las rodillas y me senté en una silla, decidido a recuperar el aliento. Definitivamente lo de correr no era lo mío.

-Aquí dice que la tribu que nosotros buscamos es la de los Pies Negros - vaya chorrada de nombre pensé - Se  desplazan desde el centro de Canadá hasta el sur-oeste en... Alberta, Calgary.

Una oleada de alegría me invadió, era la ciudad en la que estábamos.

-Escuchad, antes de que vayamos a buscarlos me parecería una buena idea si antes nos informáramos sobre ellos¿ no creéis? - Maya y sus ganas de aprender.

Meg vio mi cara de decepción, así que para hacerme rabiar decidió aceptar por lo dos.

-Genial - dijo Maya sonriendo- nos vemos en el salón de clases a las cinco en punto.

Maya cogió a Meg del brazo y las dos se fueron alegremente cuchicheando alegremente sobre algo sin importancia dejándome más solo que la una. Así que mi mejor opción fue buscar a Peter y a John, que como siempre estaban​ en el comedor engulléndolo todo a su paso. Esos chicos tenían un pozo sin fondo en ves de estómago.

-¿Nunca os cansáis de comer? - pregunté sentándome en una silla vacía.

-Nunca, es un don que tenemos - respondió Peter con la boca llena.

-Qué asco tío - dije apartando la vista - Primero termina de comer.

-Somos oyentes Alan, siempre nos estamos moviendo y necesitamos cargar las pilas - explicó John dándole un trago a su bebida.

-Hacemos mucho ejercicio, si estuviésemos gordos las chicas no se matarían por nosotros como normalmente lo hacen - dijo Peter con una sonrisa ladeada.   

John lo miró con una mueca de asco y desaprobación.

-Creo que a alguien se le está subiendo el ego a la cabeza, todo el mundo sabe que yo soy mucho más guapo que tú. Solo eres mi copia fallida - dijo su hermano borrándole la sonrisa al instante.

-Chicos - dije intentando evitar una posible pelea - por qué no...

- No nos interrumpas Alan, esto tiene que aclararse - dijo Peter mirando desafiante a su hermano - Haber...¿cuántas novias has tenido?

Enserio, no aguantaba a esos chicos.

-Déjame pensar, mmm... Carly, Debby, Jessica... Creo que cuatro ¿y tú hermanito?

-Sólo tres - dijo visiblemente​ enfadado.

-Já, gané - dijo John haciendo un baile de la victoria. Era ridículo.

Sin comentarios.

-Nos olvidamos de Alan - dijo girándose hacia a mi - ¿Cuántas has tenido tú?

Mierda.

-Sólo una - reconocí - Meg.

Los dos abrieron los ojos como platos y estallaron en carcajadas. Seguramente el rojo estaría subiendo por mis mejillas.

-¡No tiene gracia! - dije dándole en el brazo a Peter.

Los dos pararon de reírse para respirar a duras penas.

-Lo siento tío, pero es que no me lo creo. Podrías tener a cualquiera comiendo de tu mano.

¿Eh?

-Maya por ejemplo - dijo John entre toses.

Ya empezamos, estos dos están empeñados en shippearnos a Maya y a mí. Pero a decir verdad, desde que Maya empezó a entrenarme me caía mejor y ,hay que decirlo, era muy mona. ¿Qué me pasaba? Maya sólo era una compañera más.
Fue entonces cuando dos partes de mi mente empezaron a discutir sobre Maya.

Vas a una misión con ella - dijo una.

Pero sólo es para salvarnos​ a nosotros - gruñó la otra.

Prometiste llegar a su nivel.

Sólo quiero ayudarla.

Sí claro.

-Callaos ya - dije molesto y contrariado.

-¿Qué? - preguntaron los dos a la vez.

-No era a vosotros.

-Eh, hemos oído que vais a ir de misión para encontrar a esos tíos con plumas.

-Sí, las noticias corren muy rápido.

-¿Creéis que funcionará?

La pregunta del día, si la resuelves ganarás la destrucción o la salvación.

-Eso esperamos - dije finalmente.

Gracias por leer😻😻