POV. ANASTASIA.
Miro mi reloj, justo faltan quince minutos para salir de la oficina
¡Viernes que grande eres!
Siempre me ha gustado este día, ya que es donde puedo hacer planes para pasar todo el fin de semana con Amy, tal vez salgamos de la ciudad este fin de semana... suspiro frustrada y un poco abatida porque a decir verdad por más que quiera no lo puedo hacer, Marck simplemente me prohibió estar sola por seguridad, y si algo tengo claro es que no permitiré que nada malo le suceda a Amy... ¿maldición cuando podre sentirme en paz? ¿Cuándo podre vivir sin miedo? Pienso en Amanda, mi pequeña Amy y se me estruja el corazón, si algo tengo claro es que ella merece algo mejor, no una vida llena miedo, donde la constante es huir y esconderse... ¡Necesito un maldito respiro! bueno quizás no todo este perdido, aun podemos planear un picnic en el parque cerca de casa, o en su defecto en el jardín.
Definitivamente eso hare.
Suspiro mientras pienso en este día, recuerdo que fue un viernes en la noche que todo se acabó... ¡Joder, como duele! Es inevitable esto, las últimas dos semanas solo me he reprochado haberlo dejado entrar a mí vida, pero todo fue tan de repente que simplemente luego no podía dejarlo de lado, no podía ni quería alejarlo de mi vida... mis ojos pican y mi corazón se estruja al recordar lo que paso un viernes hace dos semanas.
¡Maldita sea!
¿Cuánto más debo sufrir esto?
¿Cuándo dejara de doler?
¿Hasta cuándo debo seguir extrañándolo?
¿Pensara en mí? Claro que no, no puedo seguir siendo ingenua, debo reconocer que solo fui sexo y un prospecto de sumisa, una maldita sumisa, se me revuelve el estómago de solo pensarlo... nunca podría ser ese tipo de mujer, pero de algo estoy segura y es que el sexo o como lo llama él follar es delicioso, interesante, duro, salvaje, fuerte y arrasador pero también sé que es solo con él, sé que no tengo experiencia en esto, pero sé que Christian ha dejado la bandera demasiado alta para cualquiera y realmente no soportaría otras manos sobre mi cuerpo... un cuerpo que fue suyo en su totalidad, ha dejado una marca indeleble en mi vida, mi cuerpo lleva tatuado su nombre.
¡Maldición estoy jodida! de nuevo estoy pensando en él, en lo que hizo con mi cuerpo... con mi mente, mi alma y mi corazón, poseyó todo ¡absolutamente todo de mí! Y muy a mi pesar yo me quede sin nada... o bueno sí, quede con el corazón hecho polvo, y los recuerdos que logra retener mi mente aun...
¡Esto se tiene que acabar de una puta vez! No puedo seguir así.
Debo buscar algún escape, algo que me distraiga de mi realidad... de mi maldita realidad.
-¡Ana! – Suspiro antes de levantar mi cabeza – ¡Ana! – que sorpresa es Hannah... para variar.
Hannah siempre con su sonrisa radiante, en este momento siento un poco de envidia de la buena hacia ella, como quisiera tener un poco de la alegría que irradia Hannah en estos momentos.
-¡Dios mujer deja el escandalo! – ella se encoge de hombros restándole importancia – ¿Que rayos pasa?
-Quería saber si hoy te animas a venir a tomar unos chupitos con las demás – me cruzo de brazos, esperando su dialogo ya más que dicho anteriormente – solo será uno... y créeme que no pasara lo de la última vez – susurra arrepentida y poniendo sus ojillos.
ESTÁS LEYENDO
TÚ MI CURA
FanfictionDesde que Ana y Christian se ven por primera vez sienten una tension extraña, ella lo ve como un adonis, el la ve como un peligro para su buen juicio, pero aunque traten de mantener distancia entre ambos, el destino esta escrito para estos dos terco...