TÚ MI CURA

Capítulo 27 |Solo por tí

(P.O.V — Anastasia)

— ¿Dónde está? — me limito a decir mientras observo a los chicos de seguridad, todos se miran entre si — he, hecho una maldita pregunta... ¿Dónde demonios esta Christian?

Estoy furiosa, ellos tenían que cuidar de él nunca perderlo de vista, estar alertas ante cualquier novedad o evento sospechoso... joder se supone que son los mejores en esto, confiábamos ciegamente en ellos y sus capacidades ante prever estos posibles acontecimientos, fulmino sus humanidades con mis ojos.

¡Quiero golpearlos a todos!

Son hombres duros y de caracteres fuertes, pero me importa una maldita y puta mierda, estoy realmente furiosa, alguien me responderá por esto, ellos se ven intimidados... ¿por mi?, en otras circunstancias me estaría carcajeando por lo absurdo de la situación, ver a estos hombres sonrojados e intimidados por mí es una maldita broma.

Parece que estuvieran frente a Christian Grey y no ante mí... la pequeña e inocente señorita Steele.

—Annie — levanto una de mis manos para callar a Jasón. Quien también esta incomodo, él me conoce sabe que estoy a punto de explotar.

—¡Ni Annie, ni una mierda!— vocifero — Quiero que me digan ¿Dónde... donde esta Christian — aprieto mis dientes con fuerza, Luke me mira y niega con la cabeza — no pueden solo no saber... son la maldita seguridad. ¡Maldita sea! — golpeo la mesa con violencia.

—Lo siento — Jasón baja su cabeza derrotado. — se nos salió de las manos... cuando nos percatamos de su demora que no era normal en él. Ya no estaba. Lo siento.

—Me valen mierda los "lo siento", necesito que solucionen esta mierda... maldita sea. — mi pecho se oprime con el pasar de los minutos.

Y de nuevo la oleada de llanto regresa con fuerza, no logro entender de donde salen, pero tampoco me detengo a pensarlo mucho tiempo. Ahora lo importante es saber ¿Dónde esta? ¿Quién demonios lo tiene?, necesito hallarlo y protegerlo, me siento vacía e incompleta sin él, es como si yo fuera un barco sin timón, él es ese faro que me ilumina y me ubica en la dirección correcta y sin él me siento más que perdida. Él se describe así mismo como una sombra, alguien oscuro, nada más alejado de la realidad. Él se convirtió en luz para mi vida, él es una tormenta que amenaza con destruir todo a su paso, pero sin embargo no destruye más que las barreras, él me hace sentir mejor conmigo misma y hallar el amor que debo sentir por mí misma.

Él es indispensable para mí, mi felicidad depende de él totalmente y no me importa ser dependiente de sus caricias, de su amor que es obsesivo, devastador, controlador y a veces cruel, no me importa en lo absoluto decir y demostrar que le pertenezco por completo, porque es absolutamente mi única verdad. Así como también sé que él me pertenece por completo, desde la cabeza hasta los pies, todo, absolutamente todo es de mi posesión y puede parecer enfermizo e incuso insano, pero es así como ambos amamos, de forma imprecisa, de forma violenta, sin un ápice de duda en nuestras mentes, nos amamos sin escrúpulos, con miedo y sin el, con verdadera pasión, él es el único ser que logró colarse en mi mente insertándose en mi mente como un virus, metiéndose bajo mi piel sin reparo. Él es mi complemento, es la pieza que le faltaba a mi rompecabezas, es mi X y mi Y, es el infinito, es lo tangible y lo intangible. Es vital para vivir. Es simplemente mi vida y mi razón de ser.

Él es mi vida.

—Él volverá — asiento tratando de limpiar las lágrimas de mis mejillas, mientras trato de evitar la mirada de todos sobre mí, maldita sea estoy tan sensible...