En multimedia se encuentra nuestro prota, Ryder Kane. Contengan sus orgasmos, señoritas. JAJAJAJA bueno, así es como me lo imagino. Disfruten del capítulo <3
Capítulo 1
Faltaba solo un mes para mi graduación de secundaria.
La escuela no había sido lo mismo luego de estar una semana en Mina, buscando La Piedra de Nami. Las personas me parecían extrañas. Me había acostumbrado a los extravagantes vestidos y colores de cabellos de las magas y la belleza y fuerza sobrenatural de los magos. Mis padres en ocasiones parecían haberse dado cuenta de que no estuve en casa por una semana, pero luego parecían olvidarlo. El hechizo de Ryder era genial.
Ryder.
¡Ryder Kane! Su nombre era tan perfecto como él.
Estaba ansiosa, porque podría regresar a Mina y quedarme mientras esperaba la respuesta de alguna universidad. Había metido solicitudes para la NYU y para Stanford. Mientras tanto, había estado yendo y viniendo, ayudando en lo que podía a La Casa de La Unión.
Entre mis idas y venidas de Mina, decidí que quería ser maga. Sí; una maga de La Casa de La Unión. Hablé con Marcos y me dijo que primero tenía que recibir el entrenamiento adecuado. Me dijo que no importaba cuán poderosa fuera, aún tenía que seguir las órdenes de La Casa.
Y sobre Ryder. Habían sucedido muchas cosas entre nosotros.
-Srta. Logde. -Cuando escuché la chillona voz de la profesora Ellis, caí de nuevo en mi clase de cálculo. La profesora Ellis tenía cuerpo de modelo y carácter de perra, lo que no ayudaba mucho. Me miraba con una ceja enarcada y una mirada fulminante. -¿En qué mundo está, Srta. Logde?
En la Dimensión de Mina, para ser exactos.
-Que tenga el promedio más alto de la clase no le da derecho a ser tan altanera. Preste atención a mi clase. -Me dio una mirada de pocos amigos y centró su mirada en su libro nuevamente.
Solo un mes. Cuatro semanas. Pasará rápido.
**
Estaba en la cafetería con Maia en la hora del intermedio. Había logrado contarle parte de lo que me había sucedido en Mina. Al principio no me creía, pero cuando le mostré que podía hacer crecer un jardín entero con un agite de manos, no le quedaron más dudas. Aunque cuando Travis no le respondió un mensaje de texto al momento, me pidió que hiciera crecer muchos cactus en su cama.
- ¿Y Ryder? -Me preguntó, mientras batía sus pestañas perfectamente maquilladas.
-Creo que está bien. -Le dije. Me concentré de repente en mi manzana verde. No lo había visto desde hace dos fines de semana, cuando luchamos contra un dragón con cola de caballo gigante. Los demonios se habían multiplicado en cantidades industriales y hasta Ciudad Niebla tuvo que intervenir, creando tormentas de nieve para impedir la movilización de los demonios.
Pero solo faltaba un mes para mi graduación.
Un mes, para poder concentrarme en destruir a Belial, el causante de todo esto. Él no lograba salir del infierno, pero sus legiones sí. Pensaba ponerme a trabajar en eso en el verano.
-Vayamos al centro comercial esta tarde. -Dijo Maia, mientras revisaba su iPhone.
Chasqueé la lengua. Seguramente Maia tenía planeado arrastrarme por todas las tiendas para al final decir que nada le gustó, para luego irse con las manos vacías. Recordé un fin de semana que pasé en Mina, cuando Taylor, una maga de la que me había hecho amiga recientemente, me invitó a Wickdale a conseguir un vestido para una cena con su novio, en donde posiblemente le pediría matrimonio. De más está decir que no fui de mucha ayuda, ya que mi compresión sobre la moda es casi nula.
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Magos de Mina: Belial, príncipe del infierno. (Libro #2)
FantasíaMe vi a mi misma en una especie de habitación blanca. No veía techo, ni paredes, pero estaba de pie en algo sólido. Miré mis manos; seguían estando llenas de ampollas, pero aun así me sentía demasiado irreal. Pero repentinamente, frente a mí, comen...