Capítulo 16

261 18 5
                                    

—¿Por qué tardaste tanto? —se acerca una vez que salgo del baño.

A su lado están dos grandulones cuidando de él y el resto del equipo comparte con las fanáticas.

—Una chica entró, me pidió una foto y me repitió lo afortunada que soy por estar contigo. ¿Puedes creerlo? Todos piensan que es cierto, todos se han creído este estúpido cuento.

—Patti, ven un momento —Laura me jala a un lado lejos de Royce y mira sobre mi hombro—. Hay un programa aquí y están interesados en hacer una entrevista. Patricia, es el momento linda.

—¿El momento, de qué?

—De contar todo, de terminar con esta farsa y demostrar que vales mucho más que unos cuantos dólares para la empresa de tu padre.

—Pero...

—El joven Geoffrey mejor conocido como Prince Royce llegó a tierra mexicana el día de hoy para iniciar grabaciones del nuevo programa JustKids que tendrá lugar en la Ciudad de México —una chica dice todo eso ante una cámara y con un micrófono en manos. Laura se aleja pero puedo verla desde aquí—. Y llegó acompañado de su prometida, la señorita Smith. Se conoce que ambos llevan mucho tiempo de relación y que pronto darán el siguiente paso. Y como estamos presente en todas partes, nos da un gusto que nuestro programa ¡Q'Onda! esté en transmisión en vivo con nada más y nada menos que la afortunada. ¿Cómo te sientes de estar aquí en México en compañía de tu melocotón?

—Yo... —tartamudeo— muy feliz. Sabía que Royce tenía mucho apoyo aquí pero ahora puedo confirmar lo afortunado que es.

—Nos enteramos de muy buena fuente que su boda se llevará a cabo en unos días y que la han organizado para que sea lo más privada posible.

—Sí... creo que lo más importante para una pareja es compartir ese momento junto a las personas más cercanas, pero claro que sin dejar atrás el apoyo del público.

—¿Cómo definirías a Geoffrey? 

Las imágenes de los días que he pasado con él hacen presencia y las ganas de decir: pedófilo e imbécil son pocas esta vez.

—Geoffrey es un chico excepcional, capaz de dar mucho cuando recibe poco.

—¿Y a Prince Royce como lo definirías?

—Apasionado —respondo al instante debido a los nervios.

—¿Algo más que decir?

Laura me hace señas y mueve sus cejas indicando que es el momento, las ganas de decir todo son grandes pero no más que las ganas de seguir con esto. Ya compartir con Royce no es tan malo.

—Nada más que decir.

Con eso la chica añade algo más y se despide.

(...)

El hotel cinco estrella donde nos alojaremos unos cuantos días es espectacular. Lo detallo mientras un chico del equipo retira las llaves para después dárselas a Royce.

Él cede el paso a la gran habitación y lo primero que ubico es un sofá-cama a un costado.

—Así que doy mucho cuando me entregas poco —deja las maletas a un lado—, y muy apasionado...

—Deja de molestar ya —respondo y ruedo las cortinas quedando fascinada con la vista desde la habitación—. Lo dije porque no se me ocurrió algo más.

—¿Segura fue sólo por eso?

—¡Sí!

—Finjamos que te creí.

El Arte del Destino (Prince Royce)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora