Colors

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Haruka miró el techo de su habitación, sonriendo mientras suspiraba. Se sentó en su cama y empezó a contemplar las fotografías que había tomado con su cámara instantánea unos días atrás, cuando sus amigos de la escuela Ran y Ren lo habían invitado a cenar. Tomó una en particular y con aire soñador la llevo hasta su pecho, siendo el área donde estaba su corazón y la presionó. Volvió a suspirar.

***

Haruka miraba aburrido el pizarrón, donde su maestra de inglés anotaba quién-sabe-qué-cosas. No le importaba en realidad, prefería llenar su libreta con dibujitos y un nombre en particular con corazones. Extrañamente sintió la mirada de alguien sobre su nuca, giró su cabeza y encontró a Ren, quien lo miraba con una pequeña sonrisa coqueta la cual, no dudó en corresponder. Se giró de nuevo y siguió garabateando en su cuaderno, hasta que su compañero de atrás le dio unos golpecitos en el hombro y le pasó una notita. La cual decía:

"Saldremos a un hanami mañana ¿Quieres venir?"
-Ren.

Volvió a mirar a Ren y cuando sus miradas se encontraron, le sonrió y asintió con la cabeza. Una vez más, luego de eso, siguió agregando corazoncitos a su nombre y el de alguien más. Sintió su corazón latir más fuerte de lo normal al darse cuenta, de las bellas fotos que le podría tomar a él, bajo las flores de cerezo. Sus mejillas comenzaron a entibiarse.

***

Haruka se levantó temprano, siendo las 6:00 a.m. muy temprano tal vez, pero se encontraba nervioso, no había podido dormir en casi toda la noche y en cuanto vio que era la primera hora de la mañana no dudó en levantarse. Se bañó, se puso la ropa más cómoda (y la que se le veía mejor también) que había arreglado la noche anterior. Se perfumó y después se preparó un cereal. Cuando se dio cuenta que faltaban 15 minutos para las ocho, se lavó los dientes y salió de su casa, no sin antes comprobar que tenía sus llaves y llevaba consigo la funda de su cámara con paquetes de repuesto para las fotos. Estaba seguro, ese día obtendría fotos muy bellas, las cuales no dudaría en poner en su pared.

Aseguró la puerta y suspiró. A paso tranquilo caminó hasta la residencia de los Tachibana, donde vivían Ran y Ren, junto con su hermano Makoto. Los padres de estos habían fallecido hace dos años para año nuevo, en un accidente cuando regresaban de hacer unas compras.

Gracias a eso, Makoto, el hermano mayor de Ran y Ren regresó a vivir con ellos y era su tutor actual, al menos, hasta que tuvieran que ir a la universidad y él se los llevaría consigo a Tokio, si aprobaban sus exámenes claro está.

Cuando estuvo en el umbral de la residencia Tachibana tocó el timbre y esperó a que le abrieran la puerta, siendo esta acción hecha por Ran, la hermana melliza de Ren.

-¡Haru-chan!-Gritó emocionada- Llegaste. Pasa, pasa- Tomó la muñeca de Haruka y de un jalón lo hizo pasar- Le diré a Ren que ya llegaste- Acto seguido, le guiñó un ojo en seña de complicidad y comenzó a subir las escaleras hacia el segundo piso.

Haruka suspiró y se sentó en un sillón de la sala. Escuchó pasos que se acercaban y cuando giró la cabeza hacia atrás observó a Makoto, trayendo consigo los bentō.

-¡Haru-chan- Gritó alegre este, al verlo sentado en la sala- Me alegra que hayas decidido acompañarnos en el hanami. Ren llegó a la casa diciendo que todo debía quedar bien porque nos acompañarías. Hizo un bentō solo para ti. No le digas que te dije o se molestará- Makoto soltó una pequeña risa, donde se marcaron las arrugas en la esquina de sus ojos, delatando sus 37 años.

Haruka sintió sus mejillas arder.

En ese momento se escucharon pasos provenientes de las escaleras, seguido de un par de risas. Haruka observo el vestido color aguamarina de Ran y pensó que se veía linda; "debo tomarle una foto y regalársela" se dijo así mismo, porque ella siempre se quejaba de que tomaba muchas fotos y ninguna le dejaba ver. Después, miró a Ren. Traía una camisa de manga 3/4 azul marino con rayas blancas. Unos jeans negros y unas botas militares café claro. Todo a juego con su cabello castaño alborotado. Era guapo, sin duda.

Pequeños cortos makoharuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora