Mi Jefe es, Mi Marido | ✓

Capítulo 27: Señora Evans

—Es la señora Evans.

—Vaya sorpresa, sabía que algún día mi hijo se cansaría de ti, pero es el mismo resultado, una mujer arribista.— sus palabras fueron tan crueles que me dolieron hasta lo más profundo.

Adelia se paró furiosa, en ese momento me pregunte como podían aguantarse todos los días y durante demasiados años —Creo que no me explique bien Catalina, Emily es la nueva señora Evans.

Catalina palideció, pero trato de disimular —Ni para las bromas sirves Adelia.

Adelia se rio secamente —No es una broma, ella es la esposa de su nieto.

—¡Eso no es verdad! Esta no le llegaría a los talones a la futura esposa de mi nieto.

¿Tan poca cosa soy? Primero sirvienta, después arribista y ahora basura. ¿Acaso esta señora no tiene corazón?

—Es mejor que se guarde sus insultos si Landon la llega a escuchar se va a poner furioso.

¿Lo estaría? ¿Me defendería o se pondría del lado de su abuela?

—¡Si no sacas a esta la sacaré yo misma del cabello!

Una voz furiosa interrumpió la discusión de ambas mujeres —Ni lo intentes abuela, "esta" como tú la llamas es mi esposa y no te permito que le faltes al respeto.— juraría que la señora estaba a punto de desmayarse, estaba más blanca que un papel.

Y yo que saltaba de la emoción, no pensé que Landon fuera a llegar tan rápido y mucho menos que me defendiera, aunque lo tenía que admitir, en el fondo si tenía la esperanza que lo hiciera y al ver que si me reconforto, ya no dolían tano como al principio los insultos de Catalina.

Landon se colocó a mi lado y me abrazo por la cintura, la expresión de Catalina era sombría —¿Es broma, verdad?— la expresión de Landon no cambio y ella al fin entendió que esto era verdad —¿Cómo te atreviste a hacer semejante estupidez? ¡Arruinaste tú vida Landon!

Adelia se levanto exaltada y la respiración de Landon se agito, me sentía un poco culpable por ocasionar una discusión entre ellos —Landon ya es lo suficientemente grande como para tomar sus propias decisiones, y no necesitar de la aprobación de los demás.

Landon adopto su expresión de jefe —Así es, te suplico que respetes mi decisión y a Emily, mi esposa.— a Catalina no le gustó como le hablo Landon pero aun así ya no se volvió a quejar ni discutir nada.

—Será mejor que bajemos la cena ya está servida.— comentó Landon tratando de cortar la tensión que se sentía.

Me dedico la sonrisa más falsa del mundo y se tragó su orgullo —Me parece una estupenda idea, así podré conocer a Emily.

Ahí mismo me di cuenta de que Adelia decía la verdad, Landon era la adoración de Catalina y sólo me había "aceptado" porque Landon se lo había pedido. Pero era obvio que sólo me soportaba y se dirigía a mí con total hipocresía.

¿Me sentía bien? Claro que no, mi orgullo estaba lastimado por los insultos de la "respetada señora de alta sociedad"

Catalina fue la primera en salir y Adelia detrás de ella, solo esperaba que no volvieran a discutir de nuevo, Landon y yo nos quedamos un poco más en la habitación.

—¿Estas bien, Emily?

Traté de sonreí de la forma más natural y despreocupada —¿Por qué lo dices?

—Escuche todo.

—¿A qué te refieres con todo?

—Toda la discusión entre mi mama y mi abuela, me puse aún más furioso cuando te insulto y amenazo con hacerte daño que ya no pude quedarme solamente escuchando. Soporte durante muchos años que maltratara a mi mama solo por respeto pero no podía soportar que hiciera lo mismo contigo.— estaba repartiendo leves caricias en mi mejilla, un gesto que me pareció demasiado tierno, se parecía tanto a ese Landon de aquella noche.

—Gracias por defenderme.— cegada por la emoción le di un beso, pero solo fue un roce de labios involuntario.

—Tenia que hacer algo al respecto, estaba insultando a.— dejo la frase al aire e incompleta, vi la duda cruzar por sus ojos —A ambas.

—Pensé que no lo harías, es tu abuela.

—Haría todo por mi esposa.— me regreso el beso, me tomo de la mano y salimos de la habitación. Me hubiera encantado que esos besos duraran más que un simple roce, se sentía tan bien sentir los labios de Landon sobre los míos.

¿Por qué no podía convivir con este Landon todos los días? Por estos pequeños gestos tan inesperados era la razón por la cual estaba enamorada de él.

Nos sentamos y cenamos en total silencio y uno demasiado incomodo, Landon en ningún momento se separó de mí, y en el fondo se lo agradecí en estos momentos estaba como un ratoncito asustado.

—Estoy disfrutando demasiado de esta cena.— lanzo Landon su comentario cargado de sarcasmo.

—¿Tu usando sarcasmo con tu familia?— le susurre divertida y el me devolvió la sonrisa —Pensé que esa faceta la tenías reservada sólo para mí.

—Descuide señora Evans, tengo reservadas muchas facetas solo para usted.— me guiño el ojo y yo me sonroje, ¿ese comentario había tenido doble sentido o sólo había sido yo?

Era divertido coquetear con Landon además que no me costaba nada seguirle el juego e sus palabras —¿Así? ¿Cómo cuales señor Evans?

—Esas facetas sólo pueden ser mostradas en un lugar más privado.

Me mordí el labio y el paso su pulgar por este hasta que logro que lo liberara, salió una sonrisa victoriosa de su rostro al ver que había conseguido su objetivo.

El mayoreo entro al comedor y detrás de él entro una mujer muy hermosa, demasiado hermosa, la duda de quién sería esa mujer apareció al instante.

—¡Landon!— tenia un tono de voz demasiado chillón, pero eso no fue lo que me molesto, sentí como el estómago se me revolvía y un disgusto enorme me envolvía.

¿Por qué usaba ese tono al dirigirse a Landon? ¿Quién era y por qué lo conocía?

—Yolanda.

¿Por qué el también parecía feliz de verla? ¿Quién era la tal Yolanda?

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N/A

¡HOLAAA!

Por fin!!! El tan esperado capítulo nuevo, quiero que me digan que les pareció como se sienten leyendo esto después de tanto tiempo esperándolo (no me maten) 

PD: los próximos capítulos los tratare de hacer más largos.

Ya saben si les gustó el capítulo dejen sus estrellitas brillando y sus opiniones. Nos leemos el próximo sábado.