Capítulo 6

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La felicidad de Serena se sentía en el aire.
Ambos jóvenes, luego de pasar un momento de recuerdos con la madre de Serena, ahora se dirigían corriendo a velocidad.

Corrían mientras jugaban empujando uno al otro divertidamente.

Reían y reían, y no querían parar ese gran momento.

En uno de esos momentos por lo agitado que se encontraban detuvieron un rato mientras reían mas y más...

Plum! Era el sonido de una Serena.
Una Serena que al no percatarse cayó al suelo.

Y para su suerte fue en un charco de lodo

Rayos!-grito Serena, si había algo que amaba con toda si alma era su ropa y Ante la mirada burlona del azabache inflo los cachetes en señal de molestia

Jeje ven levántate-extendió su mano el pelinegro para intentar ayudarla.

Aunque eso significó que cayera al lodo junto a la pelimiel.

Jajaja, no fue muy amable de tu parte-comentaba el pelinegro tratando de levantarse aunque significara unos resbalones traicioneros

Ante esto Serena se divertía, no podía evitar sentirse como en las nubes
Acariciando un suave y cómodo momento del cual no quería desear terminar.

Sabe la clase de persona que era Ash, para ella era muy importante y que siempre estaba acompañádola.

Por esa razón, la hacía sentirse muy mal...

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Sabes lo que haces
Y aun asi continuas
Sabes que lo pierdes
Por la forma en la que actúas

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Ambos jóvenes llegaron exhaustos a la casa.

Tenían unos algodones de azúcar o almenos lo que quedaba de ello.

Deseaban dejar caer su cuerpo en agua caliente y no salir jamás, para ellos tomaron ambos una ducha.

Serena uso magia preparando la cena, pues esta al hacer contacto con los sentidos gustativos del ojimarron, hiso una explosión de sabores.
Una degustación de comida que sólo había en casa.

Finalmente al terminar cada uno se fue por su lado.
Ash se despidió y con Pikachu en sus brazos se dirigió a su habitación.

Le costaba creer que estaba "trabajando" pues lo único que hizo fue ayudar a la pelimiel en su dolor

Para Serena este detalle fue de sobra para que no se arrepienta de tener a Ash bajo el mismo techo, junto a ella.

(...)

El cantar de los mañaneros Pokémon causaron el lento abrimiento de los ojos de la pelimiel.

Está Lucía feliz y radiante.

Tenía un buen presentimiento en el día de hoy.

Se levantó y se vistió, se dirigió a la cocina con la intención de hacer el desayuno.
Aunque para su sorpresa Ash estaba allí. Pudo notar que estaba sufriendo por entender un libro que a los ojos de la ojiazul se le hacía conocido.

Fue Cuando te ví (Amourshipping)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora