Fue Cuando te ví (Amourshipping)

Capítulo 26

(3 años después)

Ash Ketchum ha muerto en vida.
Lo único que prevalece es el apellido, aquel que dejó el mundo en shock al descubrir su casi milagroso retorno.

Nadie pudo imaginar que la familia Ketchum volvería a empezar de cero en el área donde su final catastrófico cayó como un balde de agua fría.

Los Striaton son su principal rival.
Aquel día Ash no logró derrotar a Cilan, no era su objetivo.

Lo único que quiso fue que Serena tenga la vida que siempre se mereció.
Una vida lejos de los problemas.

De esta forma, cualquier inconveniente no atormentará nunca más a la chica que le devolvió la esperanza.
Ash no tenía problemas en tragarse su orgullo y cargar con todo el peso que había aplastado la sonrisa de la pelimiel.

En cuanto a los Ivonne, como era de esperar, sin la única heredera. Había desaparecido aun con la posibilidad de regresar, opción que no era imposible, pero sin duda muy difícil de cumplir.

En estas instancias, lo único que separa a Ash de rendirse ante su obstinación por alejarse de Serena es la sonrisa de la pelimiel.

Y por el lado de Serena, lo que la separa de Ash, únicamente es que después de ese día, nunca volvió a encontrarlo...

                                 (...)

En algún lugar de toda la región Kanto, el ya conocido azabache descansaba en un extenso sofá.

Apoyaba la parte trasera de su cabeza con sus brazos.
Segundos después exhalaba un enorme suspiro.

-Que aburrido...-se quejó

En medio de todo el silencio, Ash se había entregado a todo lo que un día decidió dejar atrás.

Y a la vez, en medio de todo el silencio sobresalió unos repentinos golpes en la puerta.
Estos llegaron rápidamente a los oídos del ojimarron.

-¿Quién es?- preguntó en voz alta

-¿Ash?-

Ash abrió ligeramente los ojos por la sorpresa que significaba, sin duda alguna la voz era conocida.

Por esta razón, Ash se levantó y a paso lento procedió a dejar pasar al visitante.

-Ha pasado mucho tiempo, Kalm.-

-¡Obvio que sí! ¡Nos vemos un día y al otro desapareces por años! ¡¿Qué demonios ha sido de ti todo este tiempo?!-

Kalm se sobresaltó y gritaba sin guardarse nada en su conciencia.

-¡¿Tienes idea de lo que me costó encontrarte?!- volvió a reprochar su desconsideración.

-Lo siento mucho...en serio, era algo que tenía que hacer aunque quisiera lo contrario.-

Ash bajó la cabeza mientras hablaba tristemente, ante esto, Kalm lo miró fijamente hasta encontrar las palabras adecuadas para continuar la conversación.

-Has hecho muchas estupideces, pero sin duda esta es la mayor en tu registro.-

-¿Acaso llevas una agenda titulada: "Idioteces de Ash Ketchum"-

Kalm sonrió ante esto y sacó una pequeña agenda que en efecto tenía lo que el pelinegro mencionó.

-Espera...¿En serio lo hiciste?- Ash llevó la palma de su mano a su cara lamentándose.

-No creo que eso sea importante, mejor aun, ¿no quieres saber por qué estoy aquí?-

Kalm cambió su expresión anterior y con seriedad preguntó al pelinegro.