Inteligencia y Fuerza

17

Todo pasa demasiado rápido.
Veo a Adam y a Aitor acarreando a las chicas a solo un lado de las literas.
Aitor sale y Adam se acerca a mi.

-Hagamos lo que hagamos no te separes de ellas.

Asiento a pesar de que no sé nada de lo que pasa. Tan pronto como él se aleja escucho una explosión, todas nos agachamos y presionamos nuestros oídos, dejamos de estar aturdidas y puedo ver a Adam correr a la puerta, veo a Angélica y Nicole y están asustadas, igual que yo. Acerco a las niñas a ellas y empiezo a correr, no se porqué, porqué corro por él, uno de los cinco, aquel que está dentro de todo este asunto, quien a matado a personas sin piedad, quien dice que es un cobarde, las dudas se detienen al pensar en él, en lo que es de verdad, es mi amigo, aquel que me ayudo y defendió cuando pudo, quien me cuidó cuando estaba inconsciente, quien me alimentaba cuando estaba hambrienta o cuando tenia frío, el fue, no alguien mas, fue Adam.
Siento el impulso y esfuerzo que ponen mis piernas, logro llegar al comedor, donde hay una gran puerta que hecha humo de color verde, logro captar su fuerte olor al sentir como mi nariz se quemaba por dentro, tomo la respiración y decidida entro.
No logro ver nada, mis ojos me empiezan a arder y llorar. Después de unos segundos de caminar a tientas, logro ver otras literas, me percato ya tarde de que vienen corriendo contra mí muchos jóvenes, tienen todavía su ropa para dormir y están descalzos, no hay gritos pero puedo ver la desesperación en sus ojos, no saben a dónde ir.
Tomo a uno de ellos del brazo e intento hablar pero al abrir la boca siento el gas entrar a ella y me quema.
El chico al ver que no hacia nada se soltó de mi agarre y siguió corriendo.
Tragaba y tragaba saliva para disminuir el ardor. Un chico topó conmigo y quería dirigirle el camino.

-Vayan hacia haya... está la salida haya.

Señalé el lado donde nadie iba. El chico me tomó del brazo y me jaló para que lo acompañara pero logré soltarme de su agarre y seguí buscando a Adam. Noté que todos los chicos estaban dirigiéndose a donde les había dicho, ahora solo yo estaba aquí, sin oxígeno puro, sin compañía.
Estaba respirando demasiado hondo pero es como si no lo estuviera haciendo, el gas dañaba mi garganta y sólo lograba que me ahogara mas.
Ví una silueta en el suelo, era Adam sosteniendo a Aitor de los brazos, lo intentaba arrastrar pero no podía. Me acerqué a él e intenté ayudarlo, pero no podíamos. Tomé a Adam del brazo y le pedía que saliéramos, que no nos mantendríamos vivos aquí. Pero no quiso. Seguimos jalando a Aitor quien ya estaba inconsciente. A pesar de su enorme tamaño pude ver la luz de la puerta abierta, ya nos estábamos acercando.
Veo a Aitor abrir los ojos y verme, pero no muestra expresión alguna.
Odio como el gas quema mis ojos, nariz y garganta, ¿para qué rayos querían esto?

Salimos del lugar, ahora estamos en el comedor, siento algo de oxígeno puro, pero el gas emana mas y mas para donde están todos, dejamos en el suelo a Aitor y Adam cierra las puertas del lugar, suenan como si se hubieran sellado. Me toma del brazo y me lleva con él, nunca había estado en esta parte. Prefiero no decir nada, esperara a donde me lleva.
Vemos una puerta de color café y Adam la abre con unas llaves que tenia en el bolsillo.
Todo estaba oscuro pero Adam enciende las luces, veo unas computadoras y diferentes interruptores.
Veo como los dedos de Adam se mueven rápido.

-¿Qué es lo que haces?

Tarda en contestar.

-Abro las ventanas.

- ¿Qué era eso?

Tomamos asiento en unas sillas algo incomodas.

- Es un gas tóxico, el plan era crear pequeños los contenedores que pudieran cargar para cuando fueran los juegos, pero la maquina solo pudo hacer la primera etapa que era crear parte del gas tóxico.

- Todos están locos aquí.

Se me quedó viendo con gracia.

- No te preocupes, también te incluyo.

Reímos.

- Entonces estoy igual que tú.

-Exacto.

Sonreí.

- Te ves tan linda riendo Zenobia.

No supe que contestar pero seguía sonriendo cuando una imagen de Angélica llorando llega a mi mente y me recuerda que lo que estoy sintiendo es peligroso.

- Hay que irnos.

Digo seria y me levanto, avanzo a paso rápido de regreso al comedor donde Aitor está sentado en una mesa. Me ve llegar pero no dice nada, le hice un favor, salvarle su vida y la de Adam.
Veo a las chicas juntas, me acerco a ellas para abrasarlas. Pero Angélica me detiene.

- ¡Eres una tonta por qué nos dejaste solas!

No supe que contestar pero no hizo falta, Angélica me acerco a ella y me abrazó.

- ¿Cuándo dejaras de ser tan tonta?

- Creo que eso nunca se me quitara.

Le digo pero no estoy feliz, estoy algo enojada conmigo, no es correcto lo que siento. Siento como mi corazón salta cuando veo a Adam acercarse, algo que me enoja mas.

- ¿Zenobia estás...?

Dice Adam. Le doy la espalda y me acerco a las niñas. Estoy enojada. No se si con él o conmigo o con los dos, ya ni siquiera me entiendo, estoy perdiendo la poca cordura que me queda. Es una sensación horrible y detestable, cuando lo veo mi piel se exalta, mi corazón me duele y siento cosas en mi estomago, me voy a enfermar o creo que ya lo estoy, después le diré a Angélica para que me dé algo de medicina. Aunque en sí, no me siento del todo mal, es algo nuevo y raro pero... me siento bien. Y mas si alguien cree que soy linda, que me lo diga. Pero todo es una ilusión, es una gran burbuja que en poco tiempo se romperá y me daré un fuerte golpe al caer. No quiero que me domine un sentimiento falso.
Solo lo que es, voy con él solo cuando lo necesito de verdad y también para hablar acerca de escapar... algo que me estresa mucho, es posible que si salimos, no todos escapen.

- Necesito que las chicas se pongan de este lado y los chicos de este.

Adam señaló la parte derecha para nosotras y la izquierda para los chicos, busqué a Tirzah, no estaba con nosotras.
La ví, empezó a correr pero no sabia a donde, hasta que llegó a los brazos de un chico y él le dio vueltas en el aire, ha de haber sido su novio. Se pararon y le dio un beso en los labios, era él.
Me alegra verla así, pero a alguien no.
Angélica va a su lado y la separa de él.

- ¿Quien eres tu?

- Mucho gusto, soy novio de Tirzah mi nombre es....

- No me interesa, alejate de ella si quieres que viva.

El chico no contestó y se alejó despacio con otros jóvenes.
Tirzah regresó con nosotras pero empezó a llorar. No me gusta verla así, pero es necesario, por su protección. Sólo por eso. Si no la dejaría, la dejaríamos.
Angélica tomó un suspiro y se sentó en una de las literas. Me acerque a ella y puse mi mano sobre su hombro.

- Sabes por qué lo hago Zenobia.

- Lo se... y está bien aunque no se vea así, es protección.

- Adam los vio.

- No creo que diga.

Me fulminó con la mirada y se levantó rápido haciéndome a un lado. Fue con Nicole y las niñas, pero no habló, solo se quedo a su lado y se ve que Nicole la conoce ya que ella no pregunta nada.
Adam ya no está aquí, ha de haber ido con Aitor. No se por qué lo salvó, le ha de tener cariño pero es algo en lo que mejor no me meto.

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Hola...
Sí, lo sé, algo desganado, pero no he tenido días tan buenos y no he tenido tiempo de escribir, no he estado inspirada.
Si han notado se han cambiado algunas cosas de la estructuración de la historia ya que EdSuicideSquad y @Another_Sarah95 se encargaron de corregir parte de ella.
Gracias por todo.
Y gracias a los que han leído hasta aquí, la verdad no pensé que llegaría hasta tantas vistas, ya que ningún libro de los que he hecho han tenido tantas... así que gracias.
Atte.
Yajaira Barrientos. ♪