Wayland Girl (Alec Lightwood)

1-"Clary Fray"

  Estás acostumbrado a lastimar sin intención 
A jugar con las palabras, las personas y el amor 

Te equivocaste

Te reíste cuando hablamos de extrañarme
Te quisiste hacer como siempre el importante
Tu estrategia infalible pisoteé.
Te equivocaste- Yuridia

*-*-*-*-*-*-*-*

Una joven morena se decidía en escoger una peluca, cuando su hermano entró a la habitación de ésta. 

-¿Está bien ésta hermano mayor?-

-¿Enserio?- contestó el chico, para después empezar a caminar hacia la sala de control. Con su hermana detrás.

-A los demonios les gustan las rubias- dijo ella poniéndose a un lado de él.

Llegaron a la sala de control, y ahí se encontraron a su hermano, que tenía su vista en una tableta. Cuando los escuchó discutir como siempre, levantó su vista hacia ellos.

-Muy bien Izzy. A los demonios les gustan las rubias- habló el rubio.

-Te lo dije- le dijo la morena a su hermano.

-Es platino- fue lo único que respondió el joven para después dar media vuelta e ir a la sala de armas.

La morena se colocó su peluca, y fue a la sala de armas con su hermano. Tomó su látigo, mientras su hermano tomaba su arco, y runificaba algunas flecha. Su otro hermano entró y tomó una espada serafín. Ya listos salieron del Instituto y fueron a cumplir su misión. Que era interrogar a unos vampiros, porque estaban traficando sangre humana o algo así había explicado el moreno.

El trió perseguía a un demonio cambia formas, mientras caminaba chocaba con personas y su apariencia cambiaba. El rubio dio un salto con una acrobacia y cayó unos metros atrás del demonio. La morena lo seguía en un punto un poco alejado. Y el pelinegro los vigilaba desde arriba, caminaba de edificio a edificio. Hasta que el demonio llegó a un club nocturno, y los tres shadowhunters se encontraron en la entrada, dispuestos a atrapar al demonio.

El rubio iba atrás de los hermanos morenos, y por accidente chocó con una pelirroja.

-Fíjate por donde caminas-

-¿Puedes verme?- preguntó el rubio confundido.

-Claro que puedo verte idiota, ese es el punto-

-¡JACE!-

El rubio al oír su nombre, dio media vuelta y caminó dentro del club. La pelirroja por no quedarse con la duda, se quitó su chaqueta, dejándose la blusa provocativa que traía puesta, y se adentró al club también, seguida por sus dos amigos.

La pelirroja vio que el rubio seguía a una chica con vestido morado que se adentraba a un espacio que cruzaba una cortina larga. Así que decidió seguirlos, cuando entró observó a una rubia bailando provocativamente, y miro que el rubio bailaba con la chica del vestido morado.

De un momento a otro, la pelirroja vio que el rubio sacaba una especie de cuchillo dispuesto a enterrarselo a la chica, asi que gritó para avisarle, acto que ocasionó que la chica del vestido se transformara en un demonio con tentáculos, acto que inició una pelea.