Capítulo XI "¿Lo recuerdas?"

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Me desperté bastante tarde, por lo que me di prisa en desayunar, la verdad era que estaba agotado, el día anterior estuvimos trabajando muy duro, pero creo que mereció bastante la pena. Ya faltaban menos tomas por grabar. Hoy debía ocuparme de mis propios vídeos, tenía que grabar el video de esta semana que aún no lo había grabado, lo iba a hacer en Madrid por lo que debía darme prisa. Me di una ducha lo más rápido que  pude y comencé a vestirme. No sabía porque, pero hoy estaba bastante feliz, no había manera de quitarme la sonrisa de idiota de la cara, y en cierta manera me reconfortaba. Era tan raro que yo estuviera feliz que hasta yo me sorprendía, pero no se, me encantaba estar así. Salí corriendo de casa y abajo encontré al patito esperándome, David iba a ayudarme a grabar el video, era una idea un poco tonta que tenía en mente pero tenía ganas de divertirme grabando un vídeo, por lo que había decidido grabar retos que me dejaran mis suscriptores. Algunos de los retos eran una maldita locura.

-¡Hola David!¡Hola Sergio! - dije refiriéndome al patito y al hombre sin rostro en cuanto entré en el coche.

Ya había visto al hombre sin rostro un par de veces, era un chico entrañable y muy increíble, quería a David y eso me hacía muy feliz. No hay nada mejor que poder ver a David con una sonrisa. El amor siempre ha sido un tema que ha despertado muchos sentimientos dentro de mi, lo cual es curioso teniendo en cuenta lo mal que me ha ido hasta ahora. Supongo que tengo un problema, creo en las falsas promesas de amor. Creo a aquellas personas que me juran falso amor, confio en esas personas y luego... luego no queda nada de sus promesas  simplemente queda un leve recuerdo de aquellas palabras que formularon pero jamás cumplieron. Pero el amor es así, existen los que rompen corazones y a los que se los rompen, y yo queridos amigos, soy de los segundos.

-¿Estás bien Lucas? -preguntó David mirándome por el espejo retrovisor- pareces triste.

-Tranquilo, sólo estaba pensando - dije mintiendo un poco, no tenía ganas de contarle a David mis problemas amorosos, él estaba feliz y no queria que se preocupara por mi.

Rápidamente llegamos a Madrid, esa gran e imponente ciudad que tantas aventuras me había dado y que tantas emociones me había provocado. Caminar por sus calles me hacía recordar distintos momentos de lo que me había ocurrido a lo largo de mi alocada vida aquí. Recordé aquel día que acompañé a Carla hasta el hotel. La chica estaba en el parque de delante de mi casa y estuve hablando con ella, en ese momento no se me ocurrió pensar que pudiera ser una youtuber, por lo que pensé que era una chica cualquiera y decidí acompañarla, por suerte nos volvimos a ver en la Madrid Games Week, el destino quiso que nos reencontraramos y si soy sincero, no me arrepiento de haber hablado con ella esa primera vez, porque quizá Carla fue uno de los comienzos de una serie de aventuras que parece no tener fin.

Al rato pasamos por un sitio que para mi es mítico, la escalera por la que me iba a caer y Zed me detuvo, me rodeó por la cintura y atrajo mi cuerpo hacia el suyo, nos quedamos pegados el uno al otro unos instantes sin ser capaces de reaccionar, podría decir que en esos breves instantes llegamos a conectar y no me equivoco, ya que Zed hizo que viviera otra gran aventura que desde el principio pisó fuerte y que a pesar de no haber tenido un final feliz ha sido una de las mejores experiencias que he vivido nunca.

-Este año nos espera un gran evento -continuó conversando David con Sergio- ¿Verdad Lucas?

-Si -respondí yo con una sonrisa en el rostro- si el del año pasado fue increíble no me quiero ni imaginar cómo será este año.

-¿Recuerdas cuando nos metimos de noche en la piscina con Saray? -preguntó David con cierta ilusión en la mirada.

Claro que lo recordaba, aquello fue increíble, fuimos a Argentina y México por el Club Media Fest, fue mi primer evento de gran tamaño y la verdad es que fue increíble, una experiencia que repetiría encantado, estuve cantando ante miles de personas, incluso canté acompañado de Zarcort y Town. Saray, David y yo vimos los fuegos artificiales juntos, hasta fuimos a una fiesta con Alberto Villarreal. La verdad es que ese viaje nos unió muchísimo a los tres, fue un viaje insuperable.

-Ya hemos llegado -dijo David anunciando que íbamos a comenzar a grabar el video.

Nos bajamos del coche y comenzamos con el video, debía tenerlo listo pronto, puesto que mañana comenzaría una nueva aventura...

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