Fin

14 2 0
                                    

Pensamientos que ya no reconozco como míos y un cuerpo que no siento confortable y seguro.
Y es que pienso que quizás estoy enloqueciendo, pero ningún loco en proceso de serlo se da cuenta de ello ¿no?
No me siento como yo misma, no me veo como yo misma. Tengo unos grandes lagos debajo de mis ojos que marcan mis horas perdidas. Mis horas donde me dedicaba a pensar en ti y en las mil formas en las que me gustaría que desaparecieras.
No reconozco mi hogar como algo seguro ni mi edad como algo correspondiente.
Quizás deberían encerrarme en una cárcel de verdad y no en una que te venda la más hermosa y brillante libertad.
Me asquea todo y llego a sentirme sucia por culpa de mi entorno. Llego a tener ganas de frotar mi piel hasta arrancarla de mi vacío ser.
Hay cosas que jamás llegan a sentirse tuyas y sitios que jamás podrás llamar hogar. Todo por la falta de calidez y cariño. Por la falta de alguien que te brinde un abrazo en un buen momento o unas palabras que te acunen.
Todo porque nada es como uno desea y eso suele suceder, dicen. Corre el rumor que hay que acostumbrarse a sufrir.
¿Pero como acostumbrarte a algo que te quiebra cada día?
No necesitamos un manual de como amar, eso viene por instinto.
Necesitamos un manual de como sufrir y sobrevivir entero a ello. Sin que un solo pensamiento corrosivo pase por la tela de tu mente para mancharla.
Necesitamos un manual de como vivir sin morir demasiado pronto. Evitando a la muerte, a la desgracia. Al hambre y a la pobreza. Evitando las injusticias.
Aquí acabo de pensar. Acabo de reflexionar sobre hechos que pasamos por alto.
Aquí termino dejar de sentirme como alguien que no soy yo. Ni es nadie.
Aquí acabo de contaros hechos que no interesan, que no importan. Que no cambian nada.
Aquí me finalizo y os finalizo.
Aquí cierro pensamientos de alguien sin cerebro. De alguien total y perdidamente descerebrado.

Pensamientos De Una Descerebrada #premiosGRDonde viven las historias. Descúbrelo ahora