Monster Circus

Parte 8: Pequeña confesión

La puerta se abrió lentamente haciendo un chirrido, unos pasos tranquilos se escucharon adentrarse a aquella habitación, llevaba a un chico entre sus brazos, el cual solo apoyaba su cabeza sobre aquel pecho contrario, Zero se encontraba con los ojos cerrados y algo adormilado.

-Zero?...¿quieres darte un baño?-dijo el Kuran, el peliplata solo negó con la cabeza, hciendo que el mayor lanzara un suspiro.

-¿desde hace cuanto que no te bañas?-preguntó a lo que el chico en sus brazos solo ocultó su rostro en el pecho del castaño.

Caminó hacia la cama y con cuidado fue sentándolo en el borde, lo observó detenidamente y acercó su mano a su cara, el de ojos amatistas solo observaba cada movimiento que hacia el contrario.

-¿puedes verme bien?...¿no te molesta el fleco?-preguntó mientras acariciaba sus mejillas, cuando trató de hacer a un lado aquel fleco que cubría su ojo derecho su mano fue detenidas por el menor.

-¿Zero?...¿qué ocurre?-dijo de manera cariñosa.

El peliplata solo negó con su cabeza y agachó su mirada.

-¿te hicieron daño?...-preguntó preocupado.

-e-era...la única...ma-manera...de...de que nadie viera lo que "él" me hizo-dijo triste.

La mano del castaño se dirigieron a aquél lugar. -¿Me dejas ver?-preguntó amablemente, por unos momentos el menor parecía dudarlo pero al final solo asintió con la cabeza, acto seguido el sangrepura hizo a un lado su cabello.

Sus ojos se abrieron por la sorpresa, en aquella zona había algunas cicatrices y algunas quemaduras cerca del párpdado parte de su frente y mejila, pero no eran tantas.

-¿quién te hizo esto?-dijo enojado

-"Él"...él siempre me golpea...dice que soy un chico malo...-su voz comenzó a romperse el solo recordar lo que habi vivido en aquel circo y sin poderlo evitr sus lágrimas comenzaron a caer bañando sus mejillas, Kaname solo acarició sus mejillas y unió su frente con la contraria.

-Nadie volverá a dañarte, Zero...yo estoy contigo-dijo tiernamente, se acercó hacia el lado derecho de su rostro y comenzó a besar aquellas cicatrices...usando su poder de curación en aquella blanca piel...no quedó rastro alguno de ellas.

-Ya no están...-dijo sonriendo, al escuchar eso Zero, llevó su mano a aquel lugar y notó que estaba sana, habían desaparecido.

-Ka...Kaname...-sonrió feliz y se abrazó al vampiro.

Kaname lo correspondió al abrazo. Sólo duró unos momentos y luego se miraron fijamente a los ojos, el castaño sin resistirse, se acercó a aquellos finos labios y depositó un pequeño beso, por unos segundos el peliplata se quedó estático, no sabía lo que estaba pasando, ¿qué estaba haciendo?, lentamente cerró los ojos y se dejó llevar por aquella sensación tan cálida y agradable, el Kuran se separó de a poco y observó aquellos hermosos ojos amatistas. Zero llevó su mano a su boca y tocó sus labios, sin saber el por qué se sonrojó, alzó la mirada encontrandose con aquel rostro sonriente del sangrepura.

-dime...¿qué me has hecho, Zero?-dijo sin dejar de mirarle -¿cómo has conseguido romper esta máscara de frialdad?- acercó ambas manos al rostro contrario –Nadie pudo hacerlo...pero tu, en el momento en que te ví por primera vez...-volvió a unir sus labios suavemente. -...me has cautivado...me has hecho sonreir de manera sincera...Eres el primero en lograrlo...-susurró en sus labios para luego separarse.

-¿qué...qué es eso que haces?-preguntó el chico de repente.

-¿eso que hago?-dijo sin comprender.