Monster Circus

Cut girl

-Profundo en...este bosque oscuro se encuentra~...el circo del horror...el anfitrión...de los ojos enorme nos observan desde el alto cielo...- una melodiosa voz se escuchaba en el interior de aquel circo...era como el de una niña, los espectadores estaban en las gradas observando aquel nuevo expectaculo con sus ojos bien abiertos, aquello era tan irreal para ellos... ese circo era tan increíble.

-deformes son...la mayoría de ellos...las figuras extrañas que asustan pero en verdad es divertido este circo...en el bosque oscuro~- aquella voz era de una chica de baja estatura, pequeñita, parecía una niña de 11 años, pero en realidad su edad era muy diferente. Tenia hermosos cabellos azabaches hasta los hombros donde estaban onduladas en las puntas, y un mechón verde cayéndole a un lado de su flequillo. Ojos redondos de color rojos, un hermoso rojo rubí que brillaba denotando inocencia y esperanza. Vestia un vestido color rojo estilo lolita sweet. Pero lo que llamaba la atención a todos eran aquellas mejillas, estaban cortabas en forma de cruz a cada lado.

-un hombre de dos cabeza~...- cantó una voz que sonaba doble, en una nube de confeti de multicolor se vió aparecer un payaso...un payaso de dos cabezas, la cabeza del lado derecho sonreía y la otra parecía triste, era escalofriante pero el carisma de aquel fenómeno hacia que la gente lo viera asombrada y no horrorizada.

-Una diva que deforme está~...-se escuchó otra voz, una sensual y melodiosa, era una hermosa mujer de castaños cabellos rizados hasta las caderas, sus ojos estaban cubiertos por un antifaz de color blanco, y vestía un vestido de color fucsia con volados hasta la mitad de sus muslos, su piel estaba demasiada palida, casi azulada como la de un muerto, parte de su cara era cubierta por flores que decoraban parte de su rostro y brazos. La gente observó horrorizada aquellas piernas de la mujer...sus rodillas se doblaban hacia atrás, era escalofriante...demasiado...

- una bestia que devora la...carne...que pudriendo se está...- se escuchó una cuarta voz que sonaba algo sadica y ronca, los reflectores mostraron a un chico que aparentaba tener 18 a 19 años de cabello azabache con reflejos azulados, piel absolutamente blanca, vestía ropas de color celeste con adornos, un pantalón suelto y una camisa de fuerza, estaba descalzo y se encontraba de rodillas, cuando levantó su mirada se pudo apreciar aquel rostro perturbador, parecía un loco total, y en su boca tenia algo que mascaba, no se podia saber con exactitud que era por las penumbras pero...deduciendo era...carne podrida.

Todos estaban asombrados ante los nuevos artistas.

-¡¡divertido es, divertido es!!- decía la cabeza sonriente del payaso.

Aquel show llegó a su final.

El maestro de ceremonias apareció y a voz carismática dijo :- espero les haya gustado!!-

El que ese grupo de deformes apareciera solo indicaba algo. Kussata pronto se iría del pueblo...

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-Señor...-llamó aquella chica de mejillas cortadas a Kussata, el cirquero volteó su vista hacia la muchacha que lo llamaba.

-¿qué quieres?-dijo frío y de mala manera.

-etto...¿Cuándo...?-

-¿otra vez la estúpida pregunta?- dijo molesto el castaño empujando a la menor haciendo que se cayera sentada.

-auch...-

-ya te lo he dicho antes, podrás ver a tu madre cuando cumplas mi ultima orden-

-e-está bien- dijo bajando la mirada tristemente, Kussata solo se fue del lugar sin decir palabra alguna.

La pequeña niña se puso de pie, sacudió el polvo de su pomposo vestido y caminó hasta donde estaban sus "compañeros".

-Cut Girl...el señor Kussata dice que te encargues de atraer niños...- dijo la dama con deformadas piernas.

-p-pero...-murmuró la pelinegra.

-lo se... pero no tenemos de otra, ademas...estamos en deuda con el señor  Kussata, lo mínimo que podemos hacer es obedecerle-dijo esta formando una imperceptible sonrisa tratando de convencer a su compañera.

-h-hai...- tartamudeó, sus "compañeros" se fueron dejándola sola en el centro del escenario.

Sus ojos rubíes comenzaron a aguarse dando paso al llanto...dejó salir todo aquello que sentía en su interior, odiaba lastimar a la gente...¿por qué decia lastimar?, facil...Kussata a veces raptaba algunos niños cuando necesitaba "ratones" para experimentar, si..los ratones eran los niñosrobados...no queria, pero si no lo hacia... nunca conocería a su madre, nunca conocería su rostro...quería verla aunque sea solo una vez, solo una vez era suficiente para ella.

Y Kussata usaba aquello para tenerla amenazada, pues por mas raro que parezca, Kussata no podía maltratarla como a los demás.

CONTINUARÁ...