Monster Circus

Hermosura

-Eeeeeeeehhhhhhhh??!!- exclamó Ichiru, sus ojos abiertos de par en par.

-¡lo que oíste idiota!- se escuchó una segunda voz, esta era de Midori y sonaba molesta. El peliverse se encontraba parado frente al peliplata y cruzaba los brazos.

-estoy embarazado- repitió nuevamente el de orejas de lobo, Ichiru parpadeó nuevamente, una sonrisa se formó sobre sus labios, se puso de pie y abrazó al de ojos carmesí.

-te amo, es la mejor noticia que pude haber recibido- dijo felizmente el peliplata siendo correspondido el abrazo.

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10 AÑOS DESPUÉS...

-no es justo papá- se escuchó la voz masculina de un niño, el chico tenia cabellos platas cortos y su flequillo cubría grácilmente, de su cabeza se podían distinguir pequeños cuernos de color negro. Piel pálida y ojos rasgados y contorneados en negro, sus pupilas eran de color borgoñas. Vestía un pantalón de color negro y una camisa blanca, de su parte trasera se podía apreciar una colita sobresalir de color negro.

-Ryo, tus pies se lastimaran, ponte los zapatos- dijo cierto castaño de mirada borgoña.

-me niego- dijo el infante cruzándose de brazos y haciendo puchero. Kaname suspiró.

La puerta se abrió dejando ver la figura de Zero, éste tenía los cabellos hasta las caderas, y vestía unos pantalones azules y camisa celeste casi blanca y llevaba unos zapatos negros.

-¿pasó algo?-preguntó al ver a su hjo y esposo en una pequeña discusión.

-no quiere ponerse los zapatos...-respondió el castaño resignado.

-entonces que vaya sin ellos- contestó Zero incrédulamente.

Kaname suspiró y se puso de pie, caminó hasta el peliplata y beso suavemente sus labios. –entonces vamos-dijo el castaño con una sonrisa en su rostro.

La familia Kuran caminó hasta la sala, en donde se encontraron con Midori, Ichiru.

-tio Ichiru!- exclamó Ryo para así correr hacia el peliplata, Ichiru al ver a su sobrino sonrió, se acuclilló para recibirlo en sus brazos. El peliplata menor lo abrazó fuertemente.

-¿ya estás listo?-preguntó el gemelo menor.

-¡sip!-fue la alegre respuesta que obtuvo del infante.

Midori observó a Zero y se acercó –entonces vamos- dijo el peliverde con una sonrisa.

-madre!- una voz femenina se oyó venir se las escaleras, los presentes fijaron su vista en aquella dirección. Allí venía Riko quien traía unas capuchas entre sus brazos. Seguida de ella, se pudo apreciar a un niño de cabellos blancos y tenia unas orejas de lobos y ojos rojos grandes, el niño tenia casi la misma edad de Ryo, vestía un pantalón negro hasta la rodilla y una camisa celeste, sus pies llevaba zapatos negros y medias del mismo color hasta las rodillas, el niño mantenía aquella sonrisa alegre de siempre.

La pelinegra se acercó hasta su madre junto con su hermanito y le entregó una capucha.

-gracias, Riko- dijo el de orejas de lobo sonriéndole, acto seguido se colocó la capucha cubriendo sus orejas.

-ven aquí, Aoi- llamó el peliverde, el niño se acercó hasta Midori y sonrió feliz mientras tomaba a su madre de la mano.

Riko se dirigió hacia Zero y le entregó otra capucha, el peliplata la tomó entre sus manos y de igual manera ocultó sus cuernos.