Parte 12: "reencuentro"

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-Demonios...esto se está saliendo de control!!...maldito Midori...necesito a Zero-decía malhumorado aquel hombre que lideraba aquél circo.

-bien...déjamelo a mi-dijo otro hombre.

-está bien, pero has tu trabajo bien, gatito- dijo Kussata para luego simplemente salir de aquella tienda.

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-¿Zero?...-dijo cierto castaño algo sorprendido.

El peliplata le había tirado al piso, se posicionó sobre Kaname y lo miraba de manera intensa con sus pupilas dilatadas. Ninguno de los dos habló, ninguno se movió, estuvieron en aquella posición comprometedora por unos minutos, hasta que el de cuernos se acercó y besó al castaño, el vampiro correspondió en seguida aquel beso, Kname lamió aquellos labios haciendo que inconscientemente Zero abriera su boca e ingresó su lengua jugando con la ajena.

-Ka...mnnn...name...-dijo entre besos. En ese momento la puerta de aquel cuarto se abrió de golpe.

-Kaname-sem....!!!-era Yuuki quien feliz había entrado pero, se quedó petrificada al ver tal escena. –...pai?...-sus grandes ojos granates se abrieron de par en par y sus mejillas se tornaron de color carmesí, completamente avergonzada y sus labios se curvaron en una sonrisa.

Kaname se separó y miró a la chica algo incómodo por la situación. Zero dio un brico y se escondió a toda velocidad tras el escritorio del sangrepura que estaba a unos pasos de allí.

Kaname se paró y con su típica postura dijo:

-¿qué ocurre Yuuki?-

-eh?...a~...etto...jejeje-dijo algo nerviosa rascándose la cabeza –siento interrumpir...etto...el director quiere hablar contigo, dice que habrán nuevos alumnos para la clase nocturna- dijo la castaña para luego salir corriendo, no sin antes cerrar la puerta y dejar a un molesto Kaname por la interrupción.

-Kana...me?...¿te irás otra vez?-dijo algo triste el peliplata

-si...pero solo será unos momentos-dijo para luego suspirar cansado.

-...quiero ir contigo...-

-no Zero...pueden verte y...-

-¿te avergüenza que me vean?...-sus ojos se volvieron cristalinos -...sé que soy un monstruo...y que ...mi apariencia es...grotesca...pero....no...no quiero quedarme solo...por favor-

Kaname lo miró, ¿cómo podía siquiera pensar que se avergonzara estando con él?-no seas así Zero...nunca me avergonzarías...solo no quiero que nada malo te pase-se acercó al chico y lo miró a los ojos. –te amo, Zero...- besó fugazmente sus labios -...está bien, te llevaré-dijo sonriéndole.

-yay~...-dijo feliz abrazandole como un niño pequeño.

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Dio pequeños golpecitos a la puerta, ésta se abrió dejando ver a un sonriente rubiocenizo que lo hizo pasar. Kaname volteó hacia atrás viendo al peliplata algo tenso, le dedicó una sonrisa tranquilizadora y extendió su mano hacia el chico de mirada amatista, este devolvió el gesto y tomó su mano para entrar a aquella habitación.

Allí se encontraban tres personas, una de ellas era una mujer albina peinada en una media cola y ojos rosados, piel pálida y vestia un hermoso kimono blanco. La segunda persona era una niña de mas o menos 15 años, de baja estatura, cabellos lilas grisáceos y ojos violetas azulados, llevaba puesto un vestido azul muy elegante...y el tercero era un chico de cabellos platinados hasta los hombros, vestia una gabardina de color gris negruzca, no se podía ver muy bien su rostro ya que llevaba puesta un antifaz. Los tres tenían un aura muy conocida para el Kuran...eran vampiros, claro...solo reconoció a la albina.

-Bien, Kaname-kun, ellos son Shizuka Hio, Maria Kurenai e Ichiru Kiryuu-dijo sentándose en su sillón.

-Un gusto Kaname-san-saludó la mayor de aquellos vampiros haciendo una elegante reverencia.

-Buenas noches Kaname-sama-saludó la niña con una sonrisa, el chico de la máscara ni siquiera saludó solo se  quedó en silencio.

-Buenas noches-saludó cortésmente el castaño.

-bien, vera Kaname-kun la señora Shizuka-san me pidió que incorporara a su sobrina y a su hijo adoptivo a la academia, espero que no tenga problema alguno-dijo sin borrar aquella sonrisa de su rostro.

-No, no hay ningún problema...-respondió de forma amable.

-Bien decidido...Maria-chan, Ichiru-kun, como ya todo está preparado mañana comenzarán sus clases.-

-solo debo dejar en claro algo...-dijo esta vez serio el Kuran, todos los presentes lo observaron en silencio, Kaname se hizo a un lado dejando ver al otro chico que hasta esos momentos se encontraba oculto tras suyo y aunque fuera extraño habia pasado desapercibido por todos los presentes.

-Prometan que no lo asustarán o le harán daño, o de lo contrario sufrirán las consecuencias...-sus ojos borgoñas se tornaron en un intenso carmesí causando un escalofríos en ellos.

Cuando Kaname había hecho ver perfectamente a Zero, el chico de cabellos plateados quedó estático, sorprendido...

Sus lagrimas cayeron por la felicidad que sentía.

su hermano...su hermano que durante tantos años había estado buscando estaba allí...frente a sus ojos, era real...

-Zero...-dijo éste, llamando la atención de los presentes incluso la del mencionado.

-Estas bien...creí, creí que te había perdido-comenzó a acercarse, Kaname en ese momento se puso en medio.

-no te acerques-

-quítate Kuran-su ceño estaba fruncido, estaba completamente molesto con aquel castaño por el hecho de no permitirle aercarse al peliplata de cuernos.

Ichiru se quitó la máscara dejando ver a todos su rostro, Kaien y Kaname estaban sorprendidos, ¿por qué se parecía tanto a Zero?, en sí era identico.

-Zero-nii...-dijo feliz, pero el chico solo retrocedió, no era miedo, ya que no tembaba y estaba tranquio, su mirada amatistas se fijó curiosa en aquel chico.

-¿quién eres?-preguntó algo inocentemente.

-soy Ichiru...-dijo cambiando su sonrisa a una triste.-¿No me recuerdas?-dijo algo decilusionado...-soy tu hermano- el chico de cuernos solo ladeó la cabeza...escudriñándolo con su mirada, toda la sala estaba en silencio hasta que Zero pronunció aquellas palabras...

-Ni...Nieve?...-todos excepto Ichiru entendieron lo que aquellas palabras significaban, Ichiru soltó algunas lágrimas de felicidad y sonriendo dijo:

-Así es ...Zero...nieve-el peliplata de cabellos largos sonrió, pero no se acercó a su hermano, solo se abrazó a Kaname.

-Nieve...-dijo sonriendo, observó a su reflejo que ahora se limpiaba aquellas lágrimas...

-la nieve...es algo...¿Qué es puro?- solo recibió un "si" por respuesta.

Ichiru comprendió, su hermano mayor no lo recordaba muy bien, solo pequeños fragmentos...pero aun así estaba feliz...feliz de aquel reencuentro.

CONTINUARÁ...

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