Monster Circus

cut gil

-¡¡¡ESE MALDITO CANALLA!!!- gritó Kaname desatando toda su aura de sangrepura por la ira y rabia que sentía en ese momento, los cristales de las ventanas estallaron en pedazos, el piso comenzó a agrietarse y salirse del lugar, todo en aquella habitación comenzaba a destruirse.

-Kaname ya ...d-detente ¡!!!- gritó costosamente el peli verde acercándose al vampiro, pero el nombrado no parecía reaccionar.

-ya! Escucha podemos recuperarlo "Él" no le hará nada!- trataba de convencerlo pero le era imposible, el castaño No escuchaba, estaba fuera de sí, el mismo aire le ahogaba, lo asfixiaba... el oxigeno faltaba por el aura de aquel ser de la noche.

Todos los presentes se esforzaban por respirar, incluso algunos se sujetaban la garganta, si Kaname seguía desatando su poder terminarían muertos.

De un momento a otro, un fuerte golpe se propinó en el estómago de Kaname haciendo que este cayera de rodillas al suelo y su aura se esfumara. El castaño se sujetaba el estomago fuertemente tratando de calmar el dolor. Levantó su mirada borgoña encontrándose con el rostro serio y la mirada fría de Cross.

-debes calmarte, Kaname-kun... perder el control no hará que recuperes a Zero- habló el cazador. Kaname asintió y se incorporó torpemente.

El de gafas se giró hacia el peli verde, y con aquella misma seriedad dijo -¿qué haremos, chico?-

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Una chica de baja estatura y apariencia de niña pequeña salía de una tienda, su mirada carmesí observó el dia... ya era de mañana y si no se equivocaba... al siguiente día  seria el último acto que darían  en el pueblo.

Caminó tranquilamente hacia la enorme carpa, ¿y si su padre había vuelto?, sonrió feliz ante aquello y se apresuró en llegar al lugar.

Pero al entrar, notó que Rido aun no llegaba, a pasos lentos se acercó al centro del escenario, allí se encontraban sus compañeros.

-Que bueno que llegas Cutt girl- dijo una voz tras suyo, la nombrada se volteó encontrándose con la mirada azul de Kussata.

-b-buenos días. Señor- saludó la chica haciendo una reverencia. El castaño se acercó a ella lentamente.

- espero que estés lista, este será nuestro último show-

-Si señor- contestó la pelinegra.

En ese momento se vió entrar dos personas más a la enorme carpa, todos los presentes giraron su rostro hacia los recién llegados.

-Rido-san...-susurró feliz al verlo, pero esa sonrisa se borró al ver la expresión de aquel vampiro que consideraba su padre, parecía...

-sabia que lo lograrías- habló Kussata acercándose al Kuran. El cirquero tomó entre sus brazos al inconsciente chico de cuernos. –pueden retirarse-

Ambos Kuran hicieron una reverencia y se retiraron, para todos los presentes era muy normal... pero no para Riko, la chica no entendía muy bien lo que estaba ocurriendo... Rido no había volteado a verla, la trató como a los demás, aquello en cierta forma fue doloroso... ser ignorada por la persona que amaba, por su padre.

Giró su rostro viendo a Kussata alejarse con aquel chico de cabellos plateados, llevó ambas manos a la altura de su pecho y arrugó su ropa.

-¿qué está ocurriendo?-susurró para sí misma, volteó su mirada carmesí hacia sus compañeros de show viendo como se burlaban de aquel monstruo. ¿por qué se burlaban?, esa criatura era hermosa... realmente bella, ¿por qué se burlaban?, ellos son horribles, disfrutar del sufrimiento de otros . Vio hacia los deformes,  los cuales tenian una apariencia grotesca, ellos eran los  único que no se reían.